El luchador y la pelirroja, dos mundos opuestos

Capítulo 5: Tarde de comida

— ¡Mañana comienzan las vacaciones!! — Celebraron Lucy y Mirajane.

— ¿Ustedes viajarán a alguna parte? — preguntó Natsu.

— Loke y yo viajaremos a cultivar mangos en una isla — Dijo la rubia.

Mirajane fue la siguiente en hablar — Pues, mis padres se irán de viaje así que tendré casa sola... — Dijo mirando lascivamente a Laxus, el cual comenzó a temer por su vida — ¿Me vas a visitar, cierto?

— Claro que sí, cariño... — Respondió el rubio con miedo por su vida.

Juvia fue la siguiente en hablar — ¡Juvia va a aprovechar para seguir escribiendo sus novelas!

Gray sonrió — ¿En verdad eres disciplinada con eso no?

— No puedo desperdiciar ni un solo segundo. — Declaró la peliazul con total seriedad.

Después de eso, Erza dijo — Pues yo voy a viajar a la playa con mi madre y mi prima Flare, seguro será divertido.

Natsu se encogió de hombros — Yo voy a aprovechar para entrenar estas vacaciones.

— Lo mismo. — Contestó Gray.

Luego de aquella pequeña charla, llegó la maestra Cana al salón.

— Buenos días maestra — La saludaron sus alumnos.

— ¡Buenos días! — dijo ella contenta — ¡Alumnos, hoy es un día especial! Como se acercan las vacaciones y me rehúso a trabajar hasta el final, vamos a hacer una actividad.

Sus alumnos celebraron al escuchar esa noticia, pues no tendrían que trabajar el último día de clases — ¡Vamooooooooos!

Cana sonrió — Por ende, alumnos, nuestra actividad será cocinar en parejas. Iremos al salon de cocina del colegio donde prepararán algo para su pareja. Tienen todo el día para eso. ¿Entendido?

— ¡Si maestra!

— Bien, entonces vamos. — Anunció la castaña mientras se iba.

Todos los alumnos se levantaron para ir al salón de cocina, al otro extremo de la escuela. Mientras caminaban, el grupo de amigos decidió quienes serían sus parejas. Cuando llegaron al salón, que consistía en un montón de cocinas a lo masterchef, las parejas ya estaban formadas. Evidentemente, Laxus estaba con Mirajane y Lucy estaba con Loke.

Gray se acercó al puesto de Juvia — Bueno Juvia, ¿qué te parece si nos hacemos juntos?

Ella lo miró sorprendida y algo sonrojada — ¿E-en serio?

— Si, en serio. — Afirmó él. La razón era porque se rehusaba a cocinarle a Natsu y apenas había hablado con Erza. En cambio, la peliazul le agradaba bastante.

Por su parte, Juvia sonrió — ¡Adelante! ¡Juvia se hará con Gray-sama! ¿Qué le gusta comer?

El pelinegro se rascó la nuca — La verdad, lo que sea. No soy muy exigente.

— Vale, Juvia se esforzará en hacer algo que le guste.

— ¿Y tu que quieres? — Preguntó el chico.

— Agua.

— ... ¿Como que agua?

— A Juvia le gusta el agua.

— Si, pero... ¿cómo voy a prepararte agua?

— No lo se... pero a Juvia le gusta el agua — Le dijo la chica, lo cual lo confundió incluso más — Bueno, ¡a trabajar! — Ella se puso a preparar la comida.