El néctar de la discordia (Finalizado)

Elección

Ahora que todo quedo aclarado entre ambos amantes, Alastor deja en claro su decisión final a todo aquel que lo rodee, empezando por su leal lacayo

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Angel abrió la boca dejando caer su lengua hacía afuera junto a un jadeo, con una sonrisa de satisfacción se recostó en el escritorio panza abajo, permitiendo que alastor golpeara su interior con una estocada mas fuerte, quien disfrutaba de sentir como aquel jugoso ano rosa se contraía por dentro, apretando mas su miembro, el albino elevo su cabeza hacía atrás haciendo que su saliva cayera por la rustica madera al sentir esas garras presionar sus nalgas.

De inmediato el ciervo aumento el ritmo de su movimiento de caderas contra el culo blanco de su niño, mientras que este no pudo evitar marcar la mesa con sus largas uñas en cuanto la mano del contrario se alzo por encima de esas carnes tan esponjosas.

Finalmente el mayor volvió acabar dentro de el, después de su tercera ronda, el de cuatro brazos se desmorono con un ultimo gemido.

-AAAHHHH~~ ALASTOOOR~-

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La noche se alzaba lentamente en lo que la pequeña niffty cerraba las cortinas de los largos pasillos, husk se asomo con pasos pesados y una botella en la mano, su cola se arrastraba por el piso ensuciándolo con polvo después de haber salido del sótano, sin embargo la pequeña cíclope con un pequeño moflete infantil fue en busca del armario de limpieza para encargarse de eso.

El gato alado gruño ronco, deteniéndose, rodó los ojos en cuanto la luces en las pequeñas lamparas de adorno comenzaron a titilar, lentamente volvió la mirada hacía atrás escuchando desde la lejanía de la oscuridad, las fuertes pisadas del demonio radio.

Hizo una mueca irritada, sentía una sensación familiar, casi como un deja vú, quería escupirle unas cuantas maldiciones, pero hasta el se preocupaba de no perturbar el sueño de angel.

Tan tierno y adorable, incluso con el saco del imbécil de su amante puesto, dormía plácidamente en los brazos del moreno.

Alastor detuvo su andar, justo a un metro de su colega, el felino sin quitarle la vista de encima respiro con fuerza tratando de calmar sus ganas de gritar.

-¿que es lo que quieres hablar?- le soltó directamente sin rodeos.

-intenta no usar un tono elevado, no queremos que se despierte... sígueme- comento con mas severidad lo ultimo.

Frunció los labios obedeciendo al instante, llegar a la habitación con temática ñoña de princesa de cuento de hadas, fue toda una odisea, la tensión entre ambos varones parecía no solo cortar el aire como una tijera, si no mas bien que rompía las paredes como si de ambos salieran grandes bolas de energía.

Husk respiro tranquilo inhalando el aroma a frutas que niffty coloco en la estancia, con eso pudo sonreír sincero y conmovido, enserio ese mocoso era un niño mimado, se apoyo en el marco de la puerta con los brazos cruzados mientras que el pelirrojo, se adentro colocando cuidadosamente a su criaturita en el mullido colchón, ignorando por completo al pequeño cerdito que corrió hacía el armario para ocultarse de las presencias ajenas.