avión (Yoonmin)

J & Y ✈

-Oh, Yoonie, que bueno que llegas.- el menor dice y Yoongi se queda pasmado. Lo mira (descaradamente) de arriba a abajo.

Jimin vestía unos jeans flojos (no exageradamente) rotos a las rodillas, una camisa blanca sin mangas y una chaqueta de tela suave, con color naranja y verde.
Y al subir más la mirada, la boca de Yoongi casi abandona su cuerpo.

Un Jimin con el cabello pintado, tal como se lo había dicho antes.
Un morado llamativo, pero no exagerado, más su hermosas facciones creaban a una obra de arte.

Tenía un corte nuevo, mas o menos un mullet, ya que en la mañana llevaba más largo el cabello.

-T-tú...

-¿Te gusta?-Jimin dice, sonriendo. Yoongi casi deja caer las dos cajas que llevaba en las manos, por lo que pasó de largo a Jimin para buscar una mesa donde dejarlos.

Regresó y lo encontró ahí, confundido.
Su lobo le estaba rogando que lo besara. Lo necesitaba, tan tan mal.

-¿Que si me gusta, Minnie?

-¿No te gusta?-Pregunta aquello con miedo, mirando a su alfa con ojitos de cachorro.

Más fué su sorpresa cuando Yoongi lo tomó de las caderas y lo alzó, haciendo sus piernas rodearle las caderas.

-Me putas encanta, Park Jimin.-Dice esto y las mejillas ajenas se tintan de un rosa natural que lo hacía ver demasiado lindo.
Le plantó un beso y cerró la puerta con su pie, para luego acorralarlo en una pared, perdiendose en sus labios.

Un rato después, se separan y Jimin ríe.

-¿Tanto así?-Dice el ahora pelimorado, jugando con la camisa del mayor.

-Tanto así.-Aseguró.

-No quise utilizar un esmoquin, lo siento.

-No te preocupes, cielo. Tampoco yo. Definitivamente se veía muy formal.

Jimin asiente y lo toma de la mano, llevandolo a la sala.

-Sientate. Te traje algo.-Yoongi dice, alejandose de él, para caminar hacia la mesa de la cocina.-Es de mi cosecha. Espero te guste.

Jimin abre mucho sus ojos y observa la caja, tan hermosa...Y...¿Tenía unas letras perfectamente bordeadas?
Mierda...
J & Y.

Sus ojos se cristalizaron y su belfo inferior empezó a temblar.

-No, lindo....No llores.

-Yoongi, no..-Dice cuando siente una lágrima deslizarse.-Esto es muy caro, y debe significar mucho para tí, después de cuarenta y tres años probablemente sea la única que quede en el mundo.

-Y quiero que la tengas tú.-Dice sonriendo tiernamente. Jimin quiere volver a llorar. ¿Porqué estaba tan sensible?-Omega.

Jimin alza la mirada.

-Solo si bebes una copa conmigo.-Dice, mirando a su alfa con atención, asiente y camina hasta la cocina.

-Pero eso será después.-Yoongi interrumpe su camino, tomandole de la cadera.-Más noche. Cuando estémos solos.-Anuncia y Jimin asiente.-Vamonos ahora o llegaremos tarde.

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Al llegar al lugar, Jimin sale del auto, esperando a que su alfa también lo haga, trayendo la caja que contenía el otro vino.
Observó la hermosa casa por la parte de afuera, cuando sintió la enorme mano ajena rodear su espalda baja, caminó junto a él.
Llegaron a la puerta y tocaron, Yoongi le indicó a su sombra que se quedara afuera, observando el panorama.

-¡Yoongi!-Un chico pelirrojo dice, dandole un abrazo fuerte al alfa. Aquéllo alteró al omega a un lado de ellos.

-Buenas noches, Hobi.-Saluda.-Él es Park Jimin.-Yoongi lo presenta y se dan la mano.

-Soy el novio.-Jimin aclara con una sonrisa y Hoseok asiente.

-Eres el novio, ya veo.-Asiente otra vez para tomar nota mental.
Una cuarta voz resuena desde dentro.

-¿Amor? ¿Quién e...-El chico ni siquiera termina la frase. Mira a Jimin y luego a Yoongi, claramente nervioso. Jimin reconoce al chico, y entonces se incomoda.-¿Y él? Yo creí que venías solo.-Mira a Yoongi y este arquea una ceja.

-Amor, ten modales, saluda.-El notable alfa regaña a su pareja.- Él es el novio de Yoongi.

La vida de verdad era una perra.

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Se está viniendo lo bueno mi genteeee!