Zanahorias y coliflores

Capitulo 35

El Demonio del Terror

Dirigible de Pilaf

" ¡GRAAAAAAAAAHH!" Piccolo Daimao rugió de dolor mientras sostenía su cabeza tratando de calmar el repentino dolor. "¡I-Imposible!"

"¡Señor! ¡¿Qué pasa?!" Piano preguntó preocupado, al ver a su padre y maestro en un dolor repentino, hasta que se le ocurrió una hipótesis basada en lo que sucedió hace un rato. "N-No me digas..."

"Tambourine también está muerta..." gruñó Piccolo mientras se recomponía. "¡¿Qué clase de bestia vive ahí fuera?!" "Espero que no nos envíen en su lugar..." susurró Pilaf a sus subordinados, claramente nervioso por este desarrollo. "No estoy ansiosa por luchar contra un monstruo..." Mai murmuró con miedo.

"¡Ustedes tres!" Piccolo espetó con severidad, señalando con el dedo a Pilaf Gang. "¡Lleva esta nave al lugar donde mataron a Cymbal y Tambourine! ¡Yo, Piccolo Daimao, borraré a este enemigo de la existencia! ¡ Con extremo prejuicio...!"

"¡Sí, señor! ¡De inmediato, señor!" Los tres dijeron al unísono antes de que Mai y Shu bajaran las escaleras hacia la cabina de la aeronave. Pilaf estaba a punto de unirse hasta que notó algo extraño en el mapa que había configurado. "¿R-Rey Piccolo, señor? No pretendo alarmarlo, pero parece que las otras Dragon Balls se están moviendo... ¡Y están convergiendo!"

"Alguien más está juntando las Dragon Balls, ¿eh?" Piccolo suspiró mientras miraba el mapa esférico de arriba. "Muy interesante..."

"¡¿Q-Qué debemos hacer?!" Pilaf tartamudeó, medio preocupado por el deseo de su nuevo jefe y medio por su propio pellejo. "S-si quienquiera que los recolecte los obtiene todos-"

"No los obtendrán todos", interrumpió Piccolo, sosteniendo las joyas de cuatro estrellas y seis estrellas entre sus dedos. "Todavía tengo dos bajo mi custodia y, a juzgar por los patrones en tu pequeño mapa, sospecho que están tratando de atraerme. Je, je, je..."

Piccolo dio una sonrisa siniestra mientras dejaba las dos Dragon Balls en su bolso. "Déjalos continuar por ahora", descartó el Daimao con un movimiento de su mano. "Esto funciona a mi favor de dos maneras. Esto nos ahorra la molestia de rastrearlos nosotros mismos, y tenemos una buena oportunidad de acabar con más competencia. Pero primero, el que mató a Cymbal y Tambourine..."

"¡P-Por supuesto, señor!" Pilaf se arrastró, pateándose mentalmente por no haber pensado en tal estrategia. Aunque en retrospectiva, no era un demonio sumamente poderoso de siglos de antigüedad.

Cubrepañal CCS Azul, Puente

Gebo se cuadró, observando la pantalla del mapa que tenía delante. Los dos pings de Dragon Ball que se sospecha que están bajo la custodia de Piccolo todavía están en movimiento, y todos han optado por evitarlos por el momento. Los cuatro equipos enviados habían recogido cuatro pings. Eso dejó el último ping, hacia el que se dirigía Piccolo, que fue un cambio repentino de rumbo.

"Parece extraño que Piccolo vaya directamente al One Star Ball de repente", pensó Gebo en voz alta. Luego se acercó a una de las terminales de comunicaciones y se puso unos auriculares. "Equipos Dragón, regístrese".

"Este es el Equipo Crane", dijo Tenshinhan por los auriculares, Chaotzu sentado en el asiento del copiloto de su avión. "Tenemos la Esfera del Dragón asegurada".

"Equipo Lobo aquí", intervino Yamcha, acompañado por Pu'ar. "Tenemos nuestra Dragon Ball y estamos regresando. Esta búsqueda es casi demasiado fácil en comparación con las últimas veces".