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AROA.

— ¿ Estás segura ? —. Me mira Val preocupada .

Sinceramente , pienso que esta acción la tomé por puro impulso. Pero también porque siento que es lo que necesito.

Mirarle a los ojos y decirle todo lo que me hubiera gustado decirle.

Por eso ahora estamos en la puerta de su habitación de hospital. Pude localizarle ya que soy familiar suyo. ( Aunque me duela ) , parte de mi sangre , es la suya.

— Estoy bien , Val.

— Estaré por aquí. Sentada al lado.  No me iré en ningún momento..

— Tengo a los guardias conmigo. —. Sonrío para tranquilizarla. Aunque mi pulso vaya a mil por hora. Pero verla así no me ayuda en nada. Así que , cuando los policías que me escoltan me preguntan si estoy lista , asiento, y tras dar un abrazo a mi tía , entro.

Poco recuerdo de él. Se que mi tía me hablaba de él para que sepa que tuve un padre , aunque no lo hiciera mucho.

Pero se que me dijo que tenía el pelo negro y los ojos claros , como los míos.

Sólo que ahora los tiene cerrados por el coma en el que le indujeron.

Su consistencia es fuerte , blanca como la nieve y llena de tatuajes , excepto su cara. De cuello para abajo seguramente tendría pero está tapado con la sábana y las vías que lo mantienen con vida.

Sin embargo , me da un vuelco al pecho cuando veo mi expresión en su rostro. Igual que la mía cuando duermo. Relajada. Serena.

Ni con sus tatuajes y la cicatriz que tiene en la frente parece que me hubiera abandonado y maltratado a mi madre.

Me acerco lo justo y necesario .

Respiro hondo , y empiezo .

— No se cómo llamarte. Pero papá desde luego que no. Me hubiera gustado pero nunca me diste la oportunidad. Me abandonaste. Si.... Se que lo hiciste. Sabía que no me querías. Sabía que tampoco querías a mi madre. De hecho , creo que nunca lo hiciste , por eso se lo hiciste pasar tan mal. Por eso la trataste como si no fuera nada. Hiciste que la odiara por sus fallos. Pero se que los hizo bajo tus amenazas. Por eso , a ella la perdono. Pero a tí no puedo. ¿ Sabes por qué ? Porque tú destrozaste a mi familia , destrozaste mi infancia , mi vida. En mil pedazos y ni siquiera tuviste cargo de conciencia ni creo que la tengas después de lo que has hecho. No digo que te merezcas esto que te ha pasado pero todos sabemos que la vida te la devuelve , y de la peor manera. Te odio papá. Pero vine hasta aquí no sólo para decirte lo que tú solo me hiciste sentir por ti. Si no para hacer las paces con un pasado que quiero dejar atrás y no volver a recordar jamás. —. Y , con eso , y el rostro lleno de lágrimas , salgo de la habitación junto con los guardias , que se me quedan mirando apenados y extrañados.

— Mi calabacita ..... -. Me abraza mi tía cuando me echo a llorar en sus brazos.

— Lo he hecho , Val. Lo he hecho.

— Has sido muy valiente , cielo. — . Me acaricia las mejillas . — Muy muy valiente.

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Al salir del hospital , nos encontramos con mi madre . Tanto ella como nosotras nos sorprendemos al vernos.

Pero , de repente , algo en mi me dice que haga lo que estoy pensando.

Por eso, sorprendiéndome tanto a mí misma como a todos , voy corriendo y abrazo a mi madre.

Tanto ella como mi tía se quedan en shock , pero segundos después , mi espalda es rodeada por sus brazos temblorosos y sus sollozos.

— Lo siento , Aroa. Lo siento mucho , de verdad .

— Ya está , mamá.... Ya está. —. Acaricio su espalda.

Nos separamos , y la miro a los ojos.
Ella me sujeta de las manos , y , con los ojos acuosos , me dice :

— Se que un lo siento no va a solucionar lo que te hice. Pero si se lo mucho que me he arrepentido y arrepiento cada día de haberte dejado.

— Yo..... Yo te creo hermana. —. La voz débil de mi tía nos sorprende. Cuando la miramos , sus labios tiemblan y , finalmente , mi madre abre uno de sus brazos para que ella se una. Me separo de ellas para darlas espacio. Son hermanas. Ellas también lo necesitaban.

— Te quiero , Vali. Te quiero muchísimo. 

— ¿ Te ... Todavía te acuerdas ?

— ¿ De cómo te llamaba ? —. Dice al separarse . — Siempre lo hice. Pero esa hermana que tú viste en ese momento no me dejó. Estaba nublada por lo que sentía por él y lo pagué con todos vosotros. Sobretodo.... Sobretodo con esta pequeña pelirroja que tan bien has criado. —. Me mira con una media sonrisa. — Quiero darte las gracias por haberlo hecho. Gracias por habermela quitado para que no corriera peligro. Gracias por haberme hecho abrir los ojos. Y , a tí, Aroa. —. Le tiemblan los labios al mirarme. Acaricio su hombro para reconfortarla : — Gracias por darme la oportunidad de perdonarme.

— Tuviste fallos muy gordos pero se que no fueron culpa tuya. —. Respondo. — Por eso te perdono.

— Tienes un corazón que no te cabe en el pecho. —. Me abraza y sollozo en su hombro. Feliz por haber echo las paces con el pasado.

Ahora, lo único que pretendo, es dejarlo atrás para poder mirar hacia delante.
Hacia el futuro.

YOU.  [ TERMINADA ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora