El Cuarteto en Mexico /Cuarteto De Nos/

Capitulo 6-

Nos despertamos al sonido del teléfono de Riki. El cual estaba recibiendo una llamada.

—Agh, apaga eso...—Dijo Roberto—La concha de la lora dormí re mal—.

Riki contestó la llamada.

—¿Que queres Alvin?—.
—¡No encuentro la llave!—.
—¡Pero tiene que estar por ahí!—suspiró—¿no tenías una copia?—.
—Si pero no la encuentro...—.
—Dios mio Alvaro, sos un desastre—se golpeó la frente—voy para alla—.

Ricardo se paro de la cama.

—¿Que pasó?—.
—El Alvincito se quedó encerrado—Suspiro.
—¿Alvincito?—Preguntó Tavella.
—Si Tave, no sabes que es el apodo de cariño que le puso al novio—.
—Anda a cagar Roberto—.
—¿En serio es tu novio o es cosa de Roberto?—.
—Cosa de el, no sabes como es—.
—Cosa mía, pero bien que te gustaría—.
—Ta, cerra y vamos—camino hacia la puerta—Si te vas a poner así me voy—.
—¡Que te valla bien con tu novio!—Exclamó Roberto mientras el menor salía de la habitación.
—¡No jodas!—.

Ambos rieron, para luego hacer contacto visual. Cosa que pusó nervioso a Roberto.

—Pobre Riki—Río Tavella—¿en serio le gusta?—.
—N-no se—.

Roberto realmente no estaba nada concentrado en la conversación, solo trataba de disimular su nerviosismo. Además, le había prometido a Riki no contar nada sobre lo que le había confesado.

—¿Estas bien Rober?—poso su mano derecha en el mentón de este, levantando su rostro para poder observarlo bien.
—Eh? Yo- si- este...-—soltó una risa nerviosa.

Fue entonces que Santiago se dío cuenta de que estaba poniendo nervioso a su "amigo". Así que decidió seguir para ver si su teoría era verdad.

—¿Tu...?—Lo insitó a continuar mientras se acercaba disimuladamente a el.
—Eh, este...—Roberto trataba de pensar una respuesta mientras se apartaba.

Mientras más retrocedía, más acorralado quedaba. Dando con la pared. Finalmente, y al ver como se había puesto Roberto, y lo poco discreto que el mismo estaba siendo. Tavella decidió terminar el experimento, o tal vez dejarlo para más tarde.

—¿Vamos a ver que paso con Alvaro y tu hermano?—Dijo tratando de sacar a su amigo de la situación que el mismo había provocado.
—S-si, mejor—.

Ambos se pararon, caminando por los pasillos en silencio. Al llegar se encontraron con Riki dando vueltas afuera de la puerta de la habitación.

—¿Puedieron abrir?—Preguntó Roberto.
—¿A vos que te parece?—.
—Mira, no te hagas el loco—.
—¡Pelado! ¡como no vas a encontrar la llave!—Ha lo Tavella.
—¡No la encuentro! ¡No se que la hice!—daba vueltas por todos lados, revolviendo entre las cosas pero no había rastro del objeto.

Fue entonces que llegó Topo, que al escuchar es escándalo decidió ir a revisar que pasaba.

—¿Que pasa acá?—
—El hamster se quedó encerrado—.
—¿Como?—.
—Perdió la llave—.

Gustavo suspiro.

—¡Me la diste a mi gil!—.
—¡¿Que?! ¡¿Cuando?!—.
—¡Ayer! ¡sabes que, voy a buscarla!—.

Los demás observaron como Gustavo se alejaba con una ligera mala gana.

—¡Sos un pelotudo!—Exclamó Riki mientras observaba a topo volver con la copia de la llave.
—¡Bueeno perdón!—Dijo avergonzado—me olvidee—.
—Ta, ya fue—Dijo topo abriendo la puerta.

Ricardo entro a la habitación, y el primer objeto que llamo su atención fue la llave que había pasado por abajo de la puerta.

—¡Alvaro vení para acá!—Dijo arrastrándolo del brazo.
—¡¿A vos que te parece que es eso?!—lo regaño, señalando la llave que llacía en el piso—.
—¡Eh! ¡Eso no estaba!—
—Si claro, le salieron patas de seguro—.

Roberto no pudó evitar reír.

—Pareces mamá—.
—¡Mentira!—.
—Si, bueno—Volteo en la dirección en la que estaban los demás—¿vamos a desayunar?—.
—Dale—.
—¿Y Santi?—Preguntó Alvin.
—¿Yo?—Preguntó Tavella
—No vos no, el otro—.
—Ah—.
—Tenes razón Alvin—.
—Yo lo despierto, ya aprovechen para cambiarse o no se, nos vemos acá—Dijo Gustavo.
—Bueno—.

Luego, cada uno de ellos se dirigió a su habitación, excepto Alvaro y Ricardo los cuales ya estaban en esta.

—'tas pa' la cagada—Dijo Riki juntando ropa para cambiarse.

Alvaro permaneció en silencio.

—Si te vas a cambiar pasa primero—.
—No, así estoy bien—.
—Bueno—Dijo Ricardo dirigiéndose al baño con la ropa en mano.

Fue entonces que Ricardo se había dejado el celular en la cama, y aprovecho para mirar la hora ya que el suyo estaba apagado.

"08:48", fue entonces que notó el fondo de pantalla de Riki. Era una foto que se habían sacado hace bastante tiempo. Eso le dio bastante ternura. Rápidamente lo dejó en su lugar y se arregló un poco mientras Riki salía del baño.

—¿Estas pronto?—.
—Si—.
—Bueno vamos a esperar afuera—.
—Para que dejé el cel cargando—.
—Bueno, voy saliendo despacio—.
—Dale—.

Una vez se encontraron con los demás afuera, caminaron lento por los largos pasillos. Conversando de todo un poco.

—Che Riki, ¿donde dormiste? Porque me mandaste el mensaje de madrugada y no volviste a entrar—.
—Con estos giles—Dijo señalando a Roberto y Santiago, que venian conversando a un costado—.
—¿Por?—
—Al principio iba a salir a tomar aire pero estos boludos dejaron la puerta abierta y ni cuenta se dieron—poso las yemas de sus dedos en su frente—entonces ta, les avise y de ahí Roberto no me dejó salir—.
—Y bueno, mira si te pasa algo—salió Roberto.
—Que me va a pasar Roberto, no seas pamentera—.
—No salgas solo de noche y punto— .

Riki suspiró. Fue entonces que llegaron afuera del hotel.

—
Nota:

Lo prometido es deuda Lu (perdón por el apodo jshs)

Bueno, acá es donde me van a tener que ayudar porque quiero poner referencias.

¿Que es algo muy común, pero característico de ver en la calle en Mexico?

Los amo! Chau