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Pasaba la hora de la comida cuando Danielle llamó a Diggle para ver como seguía Oliver, mientras estaba en su oficina trabajando, estaba tranquila o eso parecía, porque Allison había pedido el día libre, para seguir buscando a su hermana, aun no se daba por vencido, cosa que Danielle entendía si fuera Barry, ella tampoco se daría por vencido.

- cómo sigue Oliver- le preguntó Danielle a Diggle

- bien, diría que bien- respondió no del todo convencido

- a que te refieres- cuestionó Danielle

- la policía fue a casa de Oliver- le conto luego de haber acordado no más mentiras de su parte

- porque- preguntó confundida, también algo preocupada de que hubiera ocurrido algo con el caso de Thea

- la detective Mckenna Hall, vio anoche a Oliver en la reunión con el conde, Quentin casi lo arresta, pero como siempre Oliver fue muy lindo inventando excusas- le platicó con cierto tono sarcástico, por cómo se libró del arresto

- mhn- pronunció Danielle ante la mención de la detective -y ahora que van a hacer- le preguntó considerando que no le habían dado la jeringa para que ella lo analizara, conocía a alguien que podría hacerlo magníficamente, aunque no se encontraba en la ciudad

- vamos a ir a buscar a Felicity, por ayuda- le dijo Diggle cuando caminaba hacia el rubio que lo esperaba a el

- de acuerdo- dijo Danielle -porque siento que me ocultas algo- le preguntó al escuchar la duda en la voz del mayor

- no, nada, debo colgar- negó llegando con Oliver quien silenciosamente le preguntaba qué era lo que ocurría

- Digg- advirtió Danielle

- bye-

- no te atrevas a colgar...- ordenó Danielle escuchando el tono de fin de llamada -me colgó- se dijo a sí misma de manera incrédula. Volvió a llamarle a Diggle, pero este no contesto, se dio por vencida y decidió que saliendo del trabajo iría a la flecha-cueva para ver que ocurría.

Esa noche, luego del trabajo, condujo a la vieja fábrica Queen, donde era claro que estaban ambos hombres, pues el vehículo estaba afuera, al bajar las escaleras comenzaba a escuchar la conversación entre ambos sobre donde se escondía el conde, al parecer Felicity había conseguido analizar la muestra

- no puedes ir Oliver, aun sufres por los efectos del Vértigo- objetó Diggle desde la silla hacia Oliver que se acercaba a su baúl por el arco, ninguno de los dos se dio cuenta de la presencia de la castaña hasta que hablo

- con que eso era- intervino Danielle notablemente molesta, porque ambos le ocultaron que Oliver seguía mal, lo sabía cuándo Diggle le comento que irían a ver a Felicity para pedirle ayuda. Al escucharla ambos giraron hacia las escaleras donde estaba recargada con el brazo sobre el barandal, Oliver tuvo que ignorar su molestia para poder irse a detener al conde

- escuchaste al conde, se está expandiendo, si no lo detenemos se convierte en epidemia- le dijo al mayor

- puedo a obligarte a no salir- planteó Diggle levantándose de la silla retomando la conversación de que aún Oliver no se encontraba en buen estado para ir

- trata- alardeó Oliver cerca del mayor sintiéndose confiado en que Diggle no podría detenerlo

- si le das a esto, puedes irte- concedió tomando una pelota de tenis con las que Oliver práctica su puntería y la acercó a su cara

- de acuerdo, en definitiva, es algo que quiero ver, pero antes- camino hacia la mesa metálica con una sonrisa y tomo su nuevo termo vacío, había repuesto el que Oliver daño por culpa de Helena, la acción causo gracia en Diggle quien casi ríe de no ser por lo serio del momento, a Oliver solo le fastidio que le recordara ese incidente -listo- comento retrocediendo de nuevo, vio como Oliver levantó el arco y apunto hacia la pelota. Danielle veía atenta la acción del rubio, no porque pudiera darle a Diggle sino porque vio que, bajo el arco, dándoles a entender que no estaba del todo bien

𝕳𝖊𝖗𝖒𝖆𝖓𝖔𝖘 𝕰𝖘𝖈𝖆𝖗𝖑𝖆𝖙𝖆 || ᴀʀʀᴏᴡᴠᴇʀsᴇ || ᴀʟᴄɪɴᴀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora