Te Voy A Conquistar... ¡Lo Prometo! || Bakudeku || Omegaverse

Capítulo 4

–¡D-disculpa! N-no quería decir eso, yo...–Izuku quería que se lo tragara la tierra en ese momento y que nunca jamás lo dejara salir. Pero debía decirle la verdad a Bakugou. –Pensé que sería lindo ponerte un apodo, ya sabes, porque somos... Amigos. –Esto último lo dijo mirando hacia el suelo. Katsuki se quedó callado por unos segundos observando confundido al menor. Después decidió hablar.

–Que nerd eres. –hizo una sonrisa burlona. –Entonces yo te llamaré Deku, por ser tan inútil. Jajaja– Katsuki mostraba su superioridad soltando algunas feromonas, cosa que molestó un poco a Izuku, quien solo frunció el seño. –Bueno, bueno, "Deku" significa "tu puedes", ¿Mejor? –Izuku sonrió.

–tengo que irme ya, te veo después, Kacchan.

–¡Espera! Yo... –¿Por qué lo detuvo? ¿Por qué no quería que Deku se fuera? Necesitaba pensar algo rápido para hacer que se quedara un poco más. –¿Encontraste a tu hormiga? –preguntó recordando lo que había sucedido en su primera "cita".

–¿Mi hormiga? –Izuku estaba confundido, hasta que recordó la mentira que había inventado para hablar con Bakugou. –¡A, si! Mi hormiga, jaja. Si, la encontré en mi casa; resulta que nunca se perdió. – hizo una sonrisa nerviosa.

–¿Estás mintiendo?

–¡N-no! Claro que no... Es solo que soy muy distraído, jeje.

Bakugou se acercó a él poniéndolo aún más nervioso de lo que ya estaba. El menor intentaba evitar a toda costa el contacto visual con el Alfa.

–Solo estoy jugando contigo. –soltó de pronto el cenizo. –Te creeré en cuanto vaya a tu casa y vea esa dichosa granja de hormigas.

Izuku tragó duro, ¿Había escuchado bien?, ¿A caso Kacchan iría a su casa para verificar que no estaba mintiendo?

–a-am, claro, p-puedes ir cuando tú quieras, y cuando no quieras también, jaja, Aunque no creo que vayas cuando no quieras, a menos de que te obliguen, pero dudo que alguien te obligue a ir a mi casa, así que-

–¡Deku! – interrumpió el alfa. –Te veo esta noche.

Se despidieron de nuevo y ambos se levantaron a la vez. Izuku salió del restaurante hacia la boutique, y Katsuki se acercó a sus amigos, quienes lo miraban de forma pícara.

–Parece que encontraste a tu alma gemela, Bakugou. –se burló Sero.

–No digan mierdas, Deku es solo un extra que conocí hace unos días, es algo irritante.

–¿Y por qué tienes un aroma diferente? Normalmente hueles a caramelo, pero ahora hueles a... – Kirishima se detuvo a olfatear a su amigo. – ¿Menta?

Bakugou se detuvo a olfatear su antebrazo, en efecto tenía un olor a dulce menta, pero sin llegar a empalagar. Era tan fresco que podría olerlo por siempre.

–Tierra llamando a rubia explosiva, ¡Responde!

–¡Cállate! Intento concentrarme. –Bakugou seguía oliendo su antebrazo como si su vida dependiera de ello. Quería grabar en su mente aquel cautivador aroma que le recordaba al pecoso.

–Por lo menos disimula un poco, ¡Mañana regresaremos y nos presentarás a ese lindo Omega!

–Mañana tenemos clases, idiota. De todas formas ya les dije que Deku es solo un extra y ya. –y sin más, dejó al trío de amigos en aquel restaurante y salió del centro comercial.

–¡Espera! ¡¿Y ahora con qué dinero pagaremos?! – de tanto esperar, Mina convenció a los chicos de pedir unos "pocos" platillos, aprovechando que estaban en un restaurante fino, y asumieron que Katsuki pagaría la cuenta, pero éste se fue dejándolos sin dinero y con una gran deuda. El mesero solo los fulminó con la mirada al escuchar que no tenían dinero.