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Empezaba el día, ____ aun no había sido reagrupada a un pelotón, no estaba lista para hacer extracciones. Un Sargento la puso al mando de un Coronel, alguien que necesitaba reclutas nuevos.

Emocionada acepto, caminando hacia el comedor del cuartel, ella no tenia muchos amigos, apenas había ingresado y muy pocos se acercaban a ella, asi funcionaba, asi eran los militares hombres, siempre veian debil a una mujer ante el ejercito.

No le habían dado referencia alguna de su superior, mas porque aun no empezaba en sí. Se encaminó en busca de su comida, no era la mejor, incluso parecía comida de algun animal pero no tenia razon para quejarse.

Ella posicionó su vista en un soldado muy solitario, nadie se sentaba a su alrededor y eso le daba mucho de que pensar. Era algo que le causaba curiosidad.

Se dirige hacia su mesa, sintiendo la mirada de todos sobre ella sin saber el porque.

"¿Puedo sentarme?" Preguntó ella mirando al soldado comer.

No recibió respuesta alguna mas que un "uhmm" pero aun asi se sentó a un lado de él, teniendo cierta distancia de aquel soldado.

La chica le costaba no hablar, le era imposible, necesitaba tener alguna especie de conversacion con el soldado a su lado, asi se despectiva, queria tener con quien conversar.

"¿Usted conoce a un Coronel?" Preguntó ella nuevamente tratando de crear alguna clase de conversación.

El chico solo se dispuso a verle de reojo mientras seguia comiendo, sin darle respuesta mas que el sonido de su mandibula masticando.

"Es mi jefe, bueno mas bien mi superior a cargo. Pregunto porque no me dieron muchos detalles hasta mañana" Añadió ella nerviosa mientras comía de su comida.

La chica se sentía ignorada y lo reafirmo aun más cuando el soldado se levanto de su asiento, dandole una mirada fria para luego irse. Ella no hizo mas que seguirle el rastro con la mirada hasta que se fuera del comedor. Estaba extrañada de que no le haya dicho aunque sea algo, el soldado lo catálogo como raro, alguien a quien no le gusta estar rodeado de gente.

Ella no se sentia del todo ofendida pero aun asi no le dio como que mucha importancia, termino su comida y se levanto para dirigirse a su habitación, una en la cual era compartida por otros 3 soldados más. Se encaminaba para arreglar sus cosas para el día esperado, estaba muy ansiosa por empezar con el entrenamiento.

Llega a la habitación y aquellos soldados solo la ven despectivamente, sin una pizca de amabilidad, como si marcaran alguna especie de territorio.

Ella solo se dispone para acomodar sus cosas, no tenia porque estar aguantando ninguna actitud de mierda de algunos soldados.

"Te recomiendo no acercarte a ese "soldado"" Anunció uno de ellos, acercandose a ella, como si le advirtiera de algun peligro.

Ella no responde, mas bien le parecio raro el comentario tan repentino que daba uno de sus compañeros de cuarto.

"Lo digo en serio, nadie se le acerca luego de volverse Coronel, ningun recluta trabaja con un contratista de su nivel" Añadió para luego tomar distancia de la chica "Y se rumorea que él no desea de reclutas" Terminó de añadir para luego volver a su cama.

La unica conversacion mas decente que obtuvó fue una advertencia. Era ridículo incluso para ella, solo trato de ser amable con el chico, no buscaba mas que una conversacion.

Aunque lo ultimo que ella si le prestó atención de su compañero fueron las palabras "luego de volverse Coronel" preguntandose a ella misma si era él su superior.

¿Su primera interacción fue preguntarle por él?
Se preguntó, pero rechazo el pensamiento de inmediato.

¿Cómo un soldado tan solitario puede ser un Coronel?

Oberst KönigDonde viven las historias. Descúbrelo ahora