《3 pt. 1》

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Tres veces me había cambiado el estilo de cabello y he posado quinientas veces frente al espejo porque la ropa que había escogido para salir no me acababa de convencer. ¡Ahg, odio mis inseguridades!

Repasemos: suéter de cuello alto beige, jean negro, botines y chaqueta. Se ve elegante y a la vez no, eso está bien, además no voy a morirme de calor ni nada de eso, porque el clima hoy se ve afectado por lluvias. A pesar de, sigue siendo hermoso para mi.

Con I Don't Wanna Live Forever de Zayn y Taylor Swift reproduciéndose en mi speaker terminé de retocarme el maquillaje, en el cual hoy me había esmerado un poco más y moriría si llega a arruinarse. Tarareaba bajo la canción esperando por la llamada que me tiene al borde de la desesperación.

—2:45... —murmuré, fijándome en la hora de mi reloj digital en la mesita de noche junto a la cama.

JungKook y yo habíamos quedado en que nos veríamos por la tarde, bueno, en realidad yo lo decidí. Porque quería que descansara de su viaje, solo espero que si lo haya hecho. Hoy es nuestro séptimo mesiversario y obviamente no podemos pasarlo por alto, ya que en los anteriores casi no pudimos vernos, solo fueron videollamadas o visitas rápidas. Así que es nuestro momento de celebrar como es debido, aprovechando que tenemos bastante tiempo.

Creo que vamos a salir un rato y vamos a cenar juntos, aunque soy yo la que no sabe bien a donde o como van a ser las cosas, ya que él quiso planearlo todo.

—¡Ay, ya está bien! —terminé yéndome del espejo, porque si seguía allí iba a cuestionarme hasta la existencia, y todo por culpa de mi atuendo. Está bien, me veo bonita, y ya está. No lo pienso más.

Mi bendito celular finalmente sonó, y yo corrí de un lado al otro del cuarto solo para poder alcanzarlo. JungKook dice que ya está llegando, así que le dije que bajaría enseguida y que no era necesario que saliese del auto.

Me puse perfume, agarré mi cartera y verifiqué que mi regalo estuviese ahí, el colmo sería que se me quedara. Suspiré viendo aquel accesorio y sonreí, espero que le guste. Salí del cuarto bajando a trote las escaleras, mi mamá estaba conmigo en casa y por eso debía avisarle.

—¡Mamá, voy a salir con...! ¿JungKook? —me detuve a mitad del camino al ver la imagen frente a mí.

—¡Ah, JinHee, ya estás aquí! mira que lindas. —me mostró el ramo de flores en sus manos muy contenta y emocionada.— Me las trajo mi yerno, ¿a que son hermosas? hace mucho no me regalaban un ramo tan bonito, muchas gracias hijo.

—No es nada, madre, usted se merece todo un jardín de hermosas flores. —le responde Jeon, usando el tono romántico que tiene como carta bajo la manga para cuando quiere algo.

—Por Dios, ¿que cosas dices? —ríe mi mamá avergonzada, mientras yo analizo la escena a detalle.— voy a ponerlas en agua, este chico si sabe como ganarme. —me murmura dirigiéndose a la cocina.

Una vez estuvimos solos, puse mis ojos en JungKook y alcé ambas cejas buscando una explicación al reciente acto que acababa de formar. Él levantó la barbilla mostrándose orgulloso y se encogió de hombros, me dedica una sonrisa cuando extiende su mano en mi dirección.

—Tu eres un chico inteligente, ¿sabías? —le digo bromeando en cuanto tomo su mano para llegar a su lado, entrelazando sus dedos con los míos.

—Bae, no me malinterpretes, yo te quiero mucho, pero créeme que le debo todo a la persona que te trajo al mundo para que pudieses estar conmigo. —responde acercándose a mi oído.— te ves hermosa, creo que no podré resistirme hoy... —susurró antes de depositar un beso justo allí que sería la primera provocación del día.

𝑴𝒀 𝑻𝑰𝑴𝑬 / 𝗝𝗝𝗞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora