𝑴𝒀 𝑻𝑰𝑴𝑬 / 𝗝𝗝𝗞

《Uno》

Cuando miraba alrededor todo me parecía como si estuviese dentro de un sueño. Veía la gente correr de un lado a otro tras el escenario, y yo estaba de pie junto a la escalera que me llevaría a la tarima del teatro, donde cantaría por primera vez en casi tres años.

Sostenía el micrófono entre mis frías y temblorosas manos, con las cuales arreglaba de vez en cuando los encajes de mi vestido blanco. Mi corazón latía a mil por hora, podía escucharlo en mis oídos, sentía una leve presión en el estómago y mi respiración estaba ligeramente alterada. Pero no, no dejaría que los nervios me dominaran esta noche.

No decepcionaré a aquellos que me apoyaron tanto para que esto sucediera; mi profesor, quien no dudó un instante en escogerme para representar a la clase en este Festival de Invierno; mi familia, quienes estaban hoy acompañándome a pesar de sus apretadas agendas, estaban realmente emocionados por verme subir una vez más al escenario; Ange, que aunque no está presente porque tuvo que ir a Estados Unidos para terminar su curso, me hizo saber lo feliz que estaba por mi cuando me envió de regalo los zapatos de la suerte que hoy estoy usando.
JungKook... que desafortunadamente le tocó cumplir con su agenda para estos días, con quien no puedo estar más agradecida por ser mi apoyo, mi fuerza y confianza, ayudándome todas esas veces que nos vimos para mejorar mi actuación.

Sonreí al recordar todos esos momentos y sentí que mi corazón finalmente se calmaba, en un suspiro se esfumaron todas esas inseguridades que me hacían dudar y sustituí los nervios por la adrenalina que me causó poner un pie sobre aquel primer escalón cuando mi profesor llegó a mi lado, anunciando que era mi turno y deseándome suerte por una última vez.

Cuando entré en escena muchas personas me aplaudieron, la mayoría eran compañeros y conocidos de la academia. Localicé a mis padres y a mi tío en las primeras filas a la izquierda, Choi sostenía un celular en sus manos, por el cual seguramente estaba transmitiendo el Festival para Ange.

Miré a todas aquellas personas que llenaban los asientos, y cuando el piano comenzó a tocar, yo sonreí a lo grande. Se sentía bien, saber que podía llegar a dominar todo un escenario y encantar a las personas con mi voz. Esta noche cantaría mi pequeño demo de Innocent First Love, de ASTRO.

Todo salió como esperaba, y cuando la canción acabó, los aplausos, vítores y chiflidos no tardaron en llegar. Mi familia se colocó de pie, acto seguido unas cuantas personas más, que me sonreían y comentaban entre ellos. La sensación de satisfacción que te crea ver en el rostro de las personas como pudiste transmitirles lo que sentías a través de tu canto, es un sentimiento indescriptible. Tu cuerpo se llena de felicidad, de una emoción intensa que te da ganas de llorar, esa euforia que crece por dentro cuando escuchas los aplausos.

Lo amaba. Realmente amaba cantar, y me apasionaba hacerlo.

—Kang JinHee, lo hiciste muy bien, ¡estoy tan orgulloso de tí!

En el camerino, mi profesor se me acercó una vez más para felicitarme. Al igual que mis otros compañeros, que llegaron minutos después que él.

—¡Muchas gracias a todos!

Mis padres y mi tío ya habían venido antes, puesto que debían irse rápido. No dejaron un solo halago por decir, me regalaron sus felicitaciones y dejaron un hermoso ramo de rosas rojas con una tarjeta acompañada de un presente que todavía no he tenido tiempo de revisar.

—JinHee, iremos a cenar a un restaurante de aquí cerca para celebrar, ¿vendrás con nosotros? —me preguntó una de mis compañeras de clase.

—Si, claro. —les sonreí.— Ah, solo dame un segundo, hay algo que tengo que hacer antes. —mis compañeros se despidieron de mi, en el camerino volvimos a quedar solo yo y los obsequios.