Capítulo 6: Perdón

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Cuatro meses habian pasado con rapidez y Ace estaba agotado.

Su vientre ahora estaba abultado, las nauseas aún seguían y era demasiado sensible sentimentalmente.

Lloró alrededor de una hora cuando vió a Kotatsu chocar contra el mástil del barco fracasando miserablemente en atrapar un pájaro.

"No te preocupes, que uses pantalón ya te hace lo suficiente genial para mi" intentaba consolarlo cuando en realidad Kotatsu no lo necesitaba, pero incluso siendo un animal era consciente de su estado por le permitía ser tan dramático como quisiese.

Si, incluso kotatsu lidiaba con él.

Entre otras cosas que ahora ocurrían, estaba el echo de que Deuce se había vuelto el doble de sobreprotector desde que se enteró del embarazo y los chicos no habían ayudado. Ya no le permitían hacer nada que involucrara trabajo físico y lo trataban como la cosa mas fragil y delicada del muneo, cuando Ace no era asi.

Fue frustrante al princpio pero terminó cediendo a su terco novio y se volvio tan mimado como podia ser.

Lo unico bueno de estar embarazado era que Deuce se encaragaba de todos sus antojos y podía comer todo lo que quisiera, aunque gracias a eso sentia que habia subido de peso por no hacer nada.

Cuando llegaron a una isla Ace fue el primero en bajar, pisar tierra firme siempre era bueno y mas ahora que por su embarazo era tedioso y a veces le causaba nauseas el movimiento del barco en el agua, el amaba el mar, pero al parecer a su bebé no tanto.

Miró de reojo su barco y confirmó que todos estaban ocupados desembarcando y sonrió al pensar que seria bueno adelantarse un poco, estar por su cuenta debia estar bien, además de que también estaba cansado de la sobreproteccion de todos, que lo hacían sentir un inútil.

Mas sabía que sería imposible escapar de la vista de su sobreprotector novio, asibque no se sorprendió cuando el peliazul gritó desde arriba del barco.

—¡Ace! -Lo llamó, Deuce preocupado —No vayas muy lejos, terminando aqui te alcanzaré.

—¡Si! -Ace respondió sin detenerse —No tardes. -Le pidió divertido despidiéndose de él con ambas manos.

Caminando por el pueblo confirmo que sería un buen lugar para restablecerse de suministros, incluso se veia lo suficiente cómoda y horageña para pasar algunos días ahi.

Explorar una isla nunca había sido tan cansado como lo era ahora: con una panza grande y pies que se hinchaban con facilidad. No habia caminado mucho aun así se sentía cansado, quizás gracias a lo mimado que lo estaba haciendo Deuce estaba perdiendo su condición física, definitivamente necesitaba salir a caminar mas.
Interrumpiendo sus quejumbrosos pensamientos, el delicioso olor de pan recien horneado golpeo sus sentidos. Él siempre había sido de buen apetito, pero desde que estaba embarazado era un pozo sin fondo, lleno de antojos y comiendo el doble, ahora podía culpar a su bebé.

Se dejó guiar por el delicioso olor hasta encontrar una bonita cafetería.

—Podrias darme aquel de allí -Ace señaló  el pan mas esponjoso tan pronto entró.

La chica lo miró sonriente y amable, y su mirada rápidamente cayo en el estómago abultado del pecoso y su expresión se volvió bastante suave.

—Supongo que deben ser los antojos ¿No? -Preguntó la chica alcanzando el pan. —He escuchado que la maternidad es algo asombroso.

—Bueno, siento que me volveré caprichoso si me acostumbro a toda la atención y sobreprotección. -Ace respondió en un suspiro —Ahora me he logrado escapar un poco de mi novio.

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⏰ Última actualización: May 23, 2023 ⏰

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