Kindan no kajitsu ( Chuuzai Soukoku ) Oni Chuuya x Kitsune Dazai

🍑Capitulo I 🍑

Solo pasaron unos cuantos años, 7 si queremos ser exacto. (y yo me desaparecí días.)

La cantidad era algo, como se puede decir, corta si es que lo pronuncias, pero suficientemente larga para los dos niños, lo que no se podía cambiar era la hermosa unión que tenían ambos, o bueno, como actuaba el pelirrojo abrazando a cada rato al otro, aun así, todavía no había logrado hacerlo hablar, ¡Pero! Entendía su idioma, era un gran paso.

Los pasitos eran notorio, esta dando vueltas sin parar en un lugar, era algo confuso, o eso pensaba el castaño que frunció su ceño sin entender casi nada sobre las peleas de cuerpo a cuerpo de los oni.

—ahh, es muy cansado. Primero nos hacen pelear cuerpo a cuerpo—levanto sus brazos con un notorio enfado, aun así la mirada que le dirigía al castaño no cargaba el odio a el.—Luego nos dicen un montón de cosas, y de fumigar a los humanoooos. Aparte de eso, siguen buscándote—señalo al contrario—Habrá que tomar medidas extremas, ¿no crees, Dazai?—Dazai, así decidió ponerle al kitsume.

—hm...—se quejo el otro, de paso asintió en el acto.

Un escandaloso sonido salió de un punto medio del bosque.

—y bien, ya te termino el receso.—Suspiro pesadamente el mayor.—Bien, dai. Tu te quedaras aquí, mientras tanto, eh...—se entrecorto el solo,—come algunos duraznos y procura esconderte.—Esta vez, señalo los arbustos.—vamos dazai, anda, anda.—Hacia leves movimientos hacia el lugar, en uno que otro caso lo estaba empujando al lugar.

... (puntos suspensivos lol.)

—Este examen sera de un combate entre ustedes. Como ya sabrán la ultima vez pelearon con armamentos. Pero, HOY SERA DISTINTO.—El fuerte grito era horrible y áspero—Ahora demostraran sus talentos especiales en la ronda final, demuestren lo mejor de si mismos. y el que quede de 10 para abajo... recuerde lo que le pasara.—Sin mas que decir, dio media vuelta y se dirigió al campo, acompañado de los demás, las miradas de odio eran mas que notorias.

—Maldito profesor.—maldijo uno del montón, era mas un susurro para si mismo, en su interior quería saltar y atacar, lamentablemente terminaría muerto antes de pensar en que movimiento dar primero.

—Bien malditas sabandijas, el tablero indica quien peleare con quien.—Señalo aquel gigantesco tablero que cargaba entre sus finos hilos los nombres de todos, al rededor de ellos estaban todos los adultos mirando a sus hijos, primos, nietos, etc...

El de ojos azulados, bajaba por el tablero de nombre en nombre, sus pupilas giraban de derecha a izquierda leyendo de la forma mas rápida y precisa posible.

Nakahara vs Shiosen.

Un rango shiosuke, podía llegarle a ser un tanto complicado la batalla, pero estaba seguro de si mismo. No se dejaría vencer, al menos no en la gran final, seria una completa decepción para toda su familia, y eso era lo que menos quería.

Apretó fuertemente sus puños, miro al suelo, distintos golpes sonaban desde abajo, ya había comenzado, si perdía, no seria igual de fuerte que los Nakahara, no podría defenderse a si mismo o a sus seres queridos, eso era lo que mas temía, perder a su hermana mayor y menor, Kyoka, un bebe de año, que Kouyou había encontrado y decidido así misma criarla. su mirada se frunció, pero... recordó algo, el kitsume, era obvio... las personas estaban aquí reunidas, las fuertes obligaciones de ganar, era solo para llegar a los altos estándares y poder proteger al ser tan especial,

Dio un par de vueltas, conocía a Dazai desde hace 7 años,  no resulto tan mala persona, en especial con Kyoka, una vez se la llevo para presentarla, este solo parpadeo un par de veces, y miraba atentamente a la bebe, en cámara lenta como si el mundo así lo quisiera, la bebe abrio sus ojos, eran azules, dio una sonrisa por eso, no se sabe como, pero... empezó a llorar de repente, en su desesperación la Mesía y decía que guardara silencio...