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TRES SEMANAS DESPUÉS
Rosalie Hale abrió los ojos esa mañana con una extraña sensación.
Se había levantado de su enorme cama doble con el estómago hundido, y mientras se vestía con un par de jeans y un suéter de lana rosa con mangas, juró que tenía ganas de vomitar.
Miró a través de la ventana de vidrio del piso al techo en las paredes exteriores de su habitación.
Un hecho extremadamente raro en esa parte olvidada y lluviosa del país, completamente en desacuerdo con el atuendo que había elegido.
No es que tuviera ningún sentido para alguien como ella. Ser vampira le dio la capacidad de usar un traje de piel de animal típico del invierno ruso en una playa soleada de las Américas.
Así que con un leve encogimiento de hombros se despidió del paisaje soleado y salió de su habitación.
Sus pies cubiertos con elegantes botas negras bajaron las escaleras con paso suave.
La mansión de los Cullen estaba vacía cuando llegó a la sala de estar de la planta baja. Vacío como había estado la semana anterior, cuando toda su familia se fue de viaje de verano.
Habían ido a tomar el sol a una de las playas de California. Su sobrinita Renesmee, después de muchos meses de insistencia, había convencido a la familia de pasar sus vacaciones en una playa, ya que nunca había visto el mar.
Ojalá hubiera ido a la Isla de Esme. Pero el clima frío había llegado a los trópicos, por lo que le tocó a la pequeña conformarse con las playas de Hollywood.
En unas pocas semanas, Carlisle había alquilado una mansión enorme y apartada en la playa. Alice había hecho todas las maletas y Edward se había ocupado de todos los pasaportes.
Todo para complacer a la hermosa princesita de la familia.
Rosalie sonrió al imaginar lo feliz que debió haber estado su sobrina en el agua salada. Habría dado cualquier cosa por meterse en el agua y hacerse unas fotos con ella en la playa.
Pero los viajes familiares ya no formaban parte de la vida de Rosalie.
No desde que Sarah había entrado a la familia.
Rosalie nunca olvidaría este día. Estaba cazando con Emmett en el bosque cuando ambos olieron un fuerte olor a sangre.
Mientras corrían hacia el olor, se encontraron cara a cara con una joven de piel morena con la cabeza cubierta por el líquido escarlata.
