Scott' Spot - CHERIK WEEK [2023]

02 - Corazón en prisión de metal, escapadas a fiestas

  Erik vuelve, de hecho, cinco días después.

   ㅡTus visitas me están costando caro ㅡCharles dice esto mientras sana ahora una herida en la sien de Erik, que siempre encuentra una nueva forma de lastimarseㅡ. Duermo menos, mis estudiantes notan que estoy más distraído en clases. Confundí las células eucariotas con las procariotas enseñando una lección ayer.

   ㅡUna verdadera tragedia. No es como si durmieras mucho antes.

  Charles presiona con fuerza la herida de Erik, en un acto completamente infantil por el tono sarcástico de sus palabras, que hace a Erik tratar de esconder un jadeo por el dolor.

  Erik lleva diciendo lo mismo desde el primer día en que apareció en su casa, "no pienso volver". Y sin embargo, aquí lo tiene Charles, una y otra, y otra vez.

  No todo puede ser atribuido a la culpa de Erik. Después de todo, es Charles quien lo acepta. Erik y él tienen la mala costumbre de encontrarse siempre en situaciones donde la vida de uno corre riesgo, o intentando salvar el mundo de algún mal que se avecina. Erik y él siempre que se reencuentran, discuten, y sus peleas son conocidas por atraer grandes catástrofes detrás de si. Tal vez sea esa la razón por la que sigue dejando a Erik entrar a su casa, porque se siente bien de una manera extrañamente placentera poder convivir con Erik tan seguido sin que alguien vaya a su casa con intenciones de cortarle la cabeza.

  Si se pone a pensar, Charles se daría cuenta que ese ha sido el tiempo en que Erik y él se han visto más seguido desde su época en la CIA, en los 60'.

  Así que, mientras tanto, no tiene problema en dejarlo entrar a su casa. Charles se creía afortunado de que ningún estudiante se haya dado cuenta de sus visitas, hasta que vio a Jean y a Scott en la cocina aquella noche. Scott es increíblemente fácil de leer. Hay personas que poseen la capacidad de resistirse a la lectura telepática, Erik es una de ellas, pues de no ser por todos los años en el pasado en que Charles pasó horas conectado a su mente, se le haría muy difícil captar los pensamientos superficiales de su amigo. Scott no es ese tipo de persona. Y por eso, fue muy fácil descubrir que el chico ya tiene sus sospechas.

  No es nada concreto, no tiene pruebas si quiera. Pero él sabe algo, sabe que Charles miente. Y por eso, Charles decide que si Erik iba a seguir yendo a poner en riesgo su reputación con sus estudiantes, al menos podía servir de apoyo.

   ㅡSí, así que, decidí que ya que estás aquí, voy a sacarte provecho. Ven, ayúdame con mi trabajo.

  Erik hace una mueca en su dirección. La expresión en su rostro es un muy claro "¿En serio?" Y cuando Charles no titubea ni retrocede, recibe su respuesta implícita de un "Sí, es en serio". No tiene otra opción más que sentarse junto a Charles frente a una mesita, hay una lámpara en medio de ellos que les da la iluminación necesaria para trabajar. Es tarde, Charles no está seguro de qué hora es, solo sabe que es de madrugada. Entre Erik y él hay cientos de papeles y exámenes, acompañados de libros de historia, matemáticas y ciencias.

   ㅡTienes buenos estudiantes ㅡmenciona Erik tras un tiempo en silencio. Charles mira en su dirección.

   ㅡLo sé. Son buenos chicos.

   ㅡParece que tu sueño finalmente se concreta.

  Erik se lame los labios mientras pasa con sus manos las hojas de los exámenes. La mirada de Charles se pierde en un punto en blanco de la hoja, la yema de sus dedos acaricia la madera de la mesa. 

   ㅡMi sueño sigue sin estar completo ㅡmurmura en voz baja, Erik puede oírlo debido a la corta distancia que lo separa. El alemán lo mira con compasión en sus ojos, que poco lo caracteriza a excepción cuando está con élㅡ. Mi sueño incluye un mundo donde los mutantes y los humanos convivan en paz...