Amor Verdadero | alejandro zendejas

12. desconocida

Primero de Marzo 2022
Ciudad de México

𝐀𝐥𝐞𝐣𝐚𝐧𝐝𝐫𝐨 𝐙𝐞𝐧𝐝𝐞𝐣𝐚𝐬

Un partido desastroso, salía expulsado antes del primer tiempo por una entrada. Era un partido muy importante para mi, mi familia y la de Grecia estaban aquí.

Salí del campo enojado conmigo mismo, no podía culpar a nadie más. Camine hacia los vestidores mientras me maldecía. A los pocos minutos fueron llegaron mis compañeros y nuestro director. Ellos me trataban de levantar el ánimo y se los agradecía.

—Te quedarás aquí? -preguntó Bruno.

—Si, me esperaré hasta que termine el partido.

—Nos vemos hermanito, levanta la cabeza Alex. Un error no define el jugador que eres.

Le agradecí mientras el salía con el resto de mis compañeros. Yo no tenía cabeza para nada, solo veía el partido desde mi teléfono.

En los minutos agregados marcaron penal a favor de Querétaro. Yo ni quería mirar el penal y preferí cerrar mis ojos. Al escuchar el silbato unos segundos de silencio lo siguió después el grito de gol. Querétaro había empatado el partido.

Mis compañeros empezaron a llegar uno por uno. Entre ellos platicaban cómo se les había parecido el partido. Yo solo me limite a escuchar pues estuve en el campo menos de 40' minutos.

—Tú Alex? A ti como te pareció el partido? -me preguntó Jorge.

—Pues bien no? Yo nomás pude jugar un rato.

—Ey Alex, no te pongas así. Te dije que un error no te define. Ademas venías jugando muy bien, de los errores se aprende.

—Concuerdo con Bruno. Para la próxima ya sabes cómo no entrar. -dijo Jorge.

Mis demás compañeros también me decían lo mismo. Entre todos me levantaron el ánimo y me hacían reír. Mientras que todo esto pasaba en el vestuario, le llame a mi hermano para decirles que ya bajarán.

—Aquí anda tu novia no? -busqué con mi mirada el dueño de la voz.

—No es mi novia pero si, esta mi familia y la de ella. -dije sonriendo.

—Ea! Hermano, se nota que te gusta. Cuando la vamos a conocer bien?

—Pronto, no coman ansias. -ríe.- Cuando nos juntemos todos la invitaré.

Mis compañeros reían mientras que otros hacían el tipo gritó de burla. Termine de bañarme y cambiarme antes que mis otros compañeros así que me despedí de ellos y salí.

—Ya llegue. -dije.

—Alejandro! -volteé al lugar de donde venía el grito.

—Camila? -dije al verla.

—Hola! Te extrañe bastante. -dijo mientras que me abrazaba.

Sin pensarlo le regrese el abrazo. Tenía tanto sin verla y yo también tenía muchas ganas de verla.

—Yo también te extrañe.

Al separarnos pude, por fin, ver a Grecia. Por su lenguaje corporal me di cuenta que estaba incómoda. Ella se mantenía a un costado mientras que mis hermanos estaban con sus padres.

—Alex! -gritó aquel pequeño de dos años.

—Josué! -dije mientras que lo atrapaba entre mis brazos.

—Es tu hijo? -pregunto Camila.

—No, es hijo de ella. -apunte a donde estaba Grecia.

Camila no contestó nada más y cambio de plática. Me preguntaba un montón de cosas mientras que yo solo contestaba con mi cabeza.  Ella fue alguien muy especial en mi vida. Toda mi familia lo sabe pero nuestra historia tuvo un final no muy agradable.