Capitulo 1

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Me encontraba con la maleta en la mano y respiro profundo. Era la primera vez que dejaba el país para irme a otro. Mi vista se centró en una pareja que estaban abrazados y girando de la alegría, ambos se ven y se dan un beso. Había otras dos personas más grandes despidiéndose de lo que seguro era su hija, abrazados hasta que ella se separó de ellos y tomo su maleta y se fue.

Estaba nerviosa, no lo veía a Luka desde hace mucho tiempo, tampoco taaanto tiempo, en la época de las fiestas siempre nos juntamos, pero a escondidas, ya que ahora él es una persona conocida y por lo que me dice él lo agobian las cámaras.

Y no, no en ese sentido. Luka y yo somos amigos desde la secundaria, el no era una persona de tener tantos amigos, era tímido. El había entrado en el cuarto año de secundaria y decidí yo acercarme a él y desde ese entonces nos hicimos amigos.

Veo una persona más alta que yo y con años más también caminado hacia mí.

- ¿Almendra? - me pregunta.

- ¿Sí? - le digo insegura.

- Luka la espera afuera- me dice y camino hacia la puerta principal, cruzo el umbral y siento como el aire frio toca mi cara, en España ya era otoño y el frio empezaba a notarse.

- Hola Almendri- dicen atrás mío y me giro de repente.

- Sabes que no me gusta que me digan así- le pego con la campera que tenía en mi mano y me tiro encima de él para abrazarlo. Hacía casi dos años y medio que no veía a mi amigo. Habíamos terminado la escuela y él se vino a España a probar suerte y en menos de dos años ya era parte de la fórmula 1. Bastante suerte o talento.

- Tu bipolaridad la extrañaba- dice en mi oído, me separo de él y veo que había cambiado bastante, ya no era un flacucho, alto con pelo. El gimnasio ya había hecho efecto y su melena ya no estaba, tenía el pelo más corto, más prolijo.

- Veo que mudarte te sentó bien- digo tomándolo de los brazos.

- Y vos seguís igual que todos los años- le pego en el brazo- Nada, duro como piedra- dice arrogante. Lo abrace una vez más, pero esta vez intentando demostrarle que de verdad lo extrañaba, y mucho. Nos subimos a su auto y la persona que había venido con él se subió en el asiento de atrás- Ah, él es Alessandro-

- Un gusto Alessandro- lo miro, pero él no dice nada.

- Es italiano, no entiende- ahora entendía porque la única cosa que me dijo, lo dijo tan exageradamente- Mira, Alessandro- lo mira a mi amigo- ¿Puedo tomar alcohol? -

- Que no sepa hablarlo bien, no significa que no lo entienda- Luka me mira y se ríe.

- Y yo que quería una cerveza- dice abrochándose su cinturón y arrancando el auto.

- Mi mamá te manda sus masitas, las que tanto te gustan- digo sacando el tupper de mi mochila- Pero hay menos de las que me dio. Me dio hambre-

- Ayy Almendri nunca vas a cambiar- dice riendo. Pasamos todo el viaje al hotel charlando de nosotros, de su vida, de la mía, de cómo era todo antes de que él se mudara y de cómo es ahora que vive en otro país. Llegamos al hotel y Alessandro me ayudo bajando mi maleta, le agradecí y entramos al hotel. Luka me acompaño a mi habitación, ya que el había reservado una antes de que él vaya por mí al aeropuerto.

-Bueno todo listo- apoya mi maleta en la cama de la habitación- En menos de dos horas tengo conferencia de prensa y después tengo libre-

- ¿Puedo ir? – digo dando pequeños saltos.

- ¿A la conferencia? - asiento- Si queres podes venir, no quiero que te aburras-

- Seria aburrido si no estuvieras en esa conferencia-

Parada De Besos (sportslover #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora