Imbecil. - Male Reader X Lookism

2.

Yejun.

El día estuvo aburrido, hacía lo mismo de siempre, hacer ejercicio, salir a correr, comer y jugar/molestar a Yuu, estaba acostado viendo el techo, como si fuera lo más interesante repartiendo caricias, Yuu, estaba encima mio, en mi pecho durmiendo, aun escuchando algún ronroneo por parte el, mis pensamientos por una parte querían evadir el tema de saber quien era la persona con la que sueño constantemente, pero por otra tenia miedo. Podía sentir mis cejas fruncir, tanto de confusión como enojo al no poder llegar a nada. El toque de la puerta me hizo salir de mis pensamientos y hablar un "pasa" sabia que era mi madre, lleve mi vista hasta su silueta la cual entraba con una sonrisa tierna, pude notar que venía con una bolsa algo pesada, al principio solo pude hacer una cara de querer saber, como buen chismoso.

- ¿Recuerdas? Yejun, dijiste que irías a entregarle esto a mi amiga - pude ver que hizo un puchero, a veces mi mamá se comporta infantil.

- Oh, no recordaba eso, pero voy. - Deje de darle caricias a Yuu, no quería molestarlo y despertarlo, pero lo hice, solo escuche un maullido al dejarlo wn la cama como queja, pero al final volvió a dormirse. - Entonces al rato nos vemos.

Mi madre sonrio para después darme la bolsa algo pesada para ella, para mi era poco, me acompaño hasta llegar a la puerta para salir despidiéndose con un "ten un lindo recorrido" con una sonrisa y una mano despidiéndose de mi. Asentí para después seguir con mi camino, yendo a Gangbuk.

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Después de caminar, el aire era fresco, algo que agradezco, aparte de ya empezar a anochecer, para suerte mía no había mucha gente, prefiero que sea así, tenia mis audífonos escuchando música, al final de todo la música me hace sentir más tranquilo y evitar el pensar que me ven. Llegue hasta donde vive la amiga de mi madre, agradeció a que yo entregara las cosas y que soy un buen hijo, solo pude asentir a sus palabras, me menciono que debo tener cuidado con un ladrón de zapatos, me dio un poco de gracia ¿alguien que roba calzado? Era gracioso, solo agradeci de que me dijera tal noticia para estar atento, sabia perfectamente como defenderme, no era algo preocupante y nunca dejaría que me quiten mis preciosas botas negras ¿quien en su sano juicio dejaría que les roben sus tenis/zapatos/botas?

Suspire, volviendo a retomar mi camino, dirigi mi mirada al frente para notar mucha gente caminando, aquello hizo que desviará mi camino a otra calle, aun no conociendo me aventure a ver si había salida a otro lugar, pero mala elección encontré a unos 5 tipos en el suelo inconscientes y sin ¿calzado? Solo pude pensar en las palabras de la señora. Solo suspire para seguir mi camino, no era algo de cual ponerle importancia.

- Alto ahí - deje de caminar al sentir alguien atrás de mi, nuevamente suspire - si no quieres salir lastimado, quítate esas botas y entregamelas.

- ¿Crees que tengo miedo de salir lastimado? - conteste de mala gana, nadie me daba ordenes más que mi madre ¿quien se creía? - No te daré mis botas, puedes intimidar a alguien más, pero a mi no - escuche un chasquido de su parte, venia acercándose para golpearme.

- Imbecil, si hubieras colaborado no saldrías como ellos. - Me gire para velo, notando a un chico unos 4 cm más bajo que yo, de cabello castaño de lado y ropa de color negro, es atractivo para ser sinceros, aun que lo conocí con una cara de gruñón se veía atractivo.

Sonrei con burla - No terminare como ellos, yo no soy estúpido - Su ceño se frunció, dando una posición de prepararse para pelear y darme el primer golpe, alzando su pierna para golpearme la cara fallando su acción - fallaste, eres lento

Aquello hizo enojarlo, queriendo encestar un golpe en mi, los cuales para su mala suerte fallaba, cambio de técnica tratando de golpearme en algún lado que no protegía, pero siempre lograba parar el golpe. Nuevamente me quiso dar una patada, pero logre agarrarle el pie y hacerlo caer, el chico rápidamente se paro.

-veo que no te cansas, entonces tendré que noquearte - lo último lo dije en un susurro cuando se acercó a mi, dando un movimiento rápido golpee el lugar asegurado a dejarlo inconsciente.

- Imbecil... - Podía asegurar que caía lentamente, senti pena por el asi que logre agarrarlo antes de que su cara tocara el piso y tener un rasguño.

- Vaya, es la segunda vez que me dices imbecil. - Suspire para llevarlo a la pared más cercana y sentarlo ahí.

Escuche quejidos y murmullos atrás de mi, suponía que eran los chicos que vi al principio tirados, al levantarse y verse confundidos decidieron voltear donde yo estaba, llamando la atención de todos, podía sentir las miradas, eran una molestia, volte a su dirección con una mirada molesta, aquello los asusto y se fueron corriendo, suspire y me levante correctamente para seguir con mi camino, hasta que escuche el ladrido de un perro, volteando a verlo pude ver que era blanco y a su lado otro que era más chiquita y de orejas rosas, causándole ternura, pude ver como se acercaban al chico, lamiendo y ladrando para que despertara, supuse que eran sus mascotas. Al final me sentí mal por ellos.

- Lo siento por darle una paliza a su dueño, pero no dejare que me quite mis botas - Los perros vieron a mi dirección, uno dispuesto a morderme y la otra de acercarse me agache para que la de orejas rosas se acerque a mi, estirando mi mano para que se acerque y huela mi mano teniendo confianza en acercarse, acariciándola, gustosamente acepto por un poco más de tiempo el perro que es blanco completamente se acercó para que lo acariciara también.

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