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Lu Yuan miró a su alrededor a los ciudadanos y declaró en voz alta: "Creo que no solo yo he presenciado los acontecimientos, ¿por qué no pedimos a todos que sean testigos?"

Lu Yuan estaba muy seguro de sí mismo y eligió a un anciano que estaba vendiendo en un puesto cercano, y dijo: "Anciano, estoy seguro de que has presenciado los acontecimientos aquí. ¡Dilo y yo llevaré a cabo una investigación justa!"

El anciano vendedor de verduras, que estaba observando la situación con el resto de las personas, no esperaba que el nuevo funcionario de patrulla lo señalara.

Él, por supuesto, había presenciado todo el incidente. ¿No era simplemente un grupo de jóvenes caballeros que habían ayudado a una niña disfrazada de hombre? ¿Cómo resultó en un malentendido para el funcionario de patrulla?

Era divertido ver el espectáculo, pero no era agradable cuando uno mismo estaba involucrado. El anciano dependía de su pequeño negocio en el borde de la calle para mantener a su familia, y no se atrevía a ofender al funcionario de patrulla. Pero ofender a un grupo de jóvenes caballeros... El anciano miró la ropa que llevaba Rong Jia y recordó que alguien lo llamaba "Príncipe Heredero". Después de pensarlo, frunció el ceño y se quedó en silencio.

¡No se atrevía a ofender a ninguno de los dos lados! Lamentó no haberse dedicado a vender verduras en paz en lugar de buscar emociones.

Rong Jia notó la dificultad del anciano y se adelantó diciendo: "El honorable señor Lu Yuan es un funcionario de patrulla, incluso si se equivoca, los pobres ciudadanos no se atreverían a hablar".

"¡Eso es imposible! No soy un funcionario que abusa de su poder. ¿Por qué no se atreverían a hablar? A menos que el Príncipe Heredero Rong tenga algo que ocultar".

A Lu Yuan le desagradaba que las personas se aprovecharan de su posición, y cuando Rong Jia dijo eso, sintió que estaba siendo insultado. ¿Cómo podría ser como esos ricos y ociosos que abusaban de su poder? Dirigió su mirada hacia el anciano, deseando que dijera la verdad sobre lo que había presenciado, pero notó que el anciano evitaba su mirada, mostrando una expresión de querer decir algo pero no atreverse a hacerlo.

Lu Yuan sintió un escalofrío en su corazón.

El anciano no se atrevía a hablar cuando lo sacaron a un lado por separado, pero había muchas personas observando a su alrededor. En la multitud, las voces se fueron mezclando y volviéndose cada vez más fuertes. Después de todo, había muchas personas y Lu Yuan no sabía quién había dicho qué.

Lu Yuan tenía buen oído, y cada vez que escuchaba una frase, su expresión se volvía más sombría. Hasta que escuchó a alguien en la multitud gritar:
"Señor, estás acusando injustamente a las personas. Es obvio que estaban ayudando a alguien, ¿cómo puedes decir que los lastimaron?" .La cara de Lu Yuan se volvió completamente negra.

Todo el mundo en el lugar escuchó esa frase, y la cara de Lu Yuan ya no podía volverse más oscura.

Rong Jia también lo escuchó. En la primera vida, cada vez que veía a Lu Yuan como el protagonista masculino, siempre tenía una actitud arrogante. Era la primera vez que veía a Lu Yuan frustrado. Rong Jia podía adivinar lo que estaba pensando Lu Yuan. Seguramente Lu Yuan no se esperaba que esta vez terminaría perjudicándose a sí mismo. Al asumir su nuevo cargo, calumnió a otros. ¿No estaba dejando claro que no era competente en su trabajo?

En ese momento, Xu Xiyue también fue llevada de regreso por las personas de Lu Yuan desde la clínica. Al principio, los guardias le preguntaron a dónde vivía para llevarla de regreso a casa, pero Xu Xiyue estaba fascinada por la expresión de Lu Yuan y quería agradecerle personalmente al señor que la había llevado a la clínica.

Soy el segundo protagonista masculino [Transmigración rápida]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora