Soy el segundo protagonista masculino [Transmigración rápida]

6.15

" ¿Por que? "Rong Jia preguntó perplejo.

Si no recordaba mal, Tang Yao no debía irse de la base en ese momento. Tang Yao tomó esa decisión de manera repentina, por lo que podía comprender la perplejidad de Rong Jia.

Miró afuera de las puertas de la base y dijo: "Siento que esta base no es adecuada para mí".

En realidad, esta base no era adecuada para Tang Yao. Ella ya lo había descubierto antes, pero la traición de Bai Chengfang y lo ocurrido ayer consolidaron su determinación de dejar ese lugar.

Ella dijo: "Quiero ir a la base del sur, todavía confío en el país. Si puedo, haré todo lo posible para ayudar a quienes lo necesiten. En esta era, no hay nada más confiable que el país. No puedo quedarme aquí como una tortuga encogida todo el tiempo. Seguiré los pasos del país".

En ese momento, el país estaba realizando una gran búsqueda y rescate de supervivientes, pero esta área aún no había sido abordada, por eso fue ocupada por un jefe. Tang Yao esperaba unirse a las filas del país y llevar a todas las personas bajo el ala del país lo antes posible. No quería depender de un líder que consideraba la vida de las personas como insignificante en esta base poco confiable.

Gao Snian estaba junto a Rong Jia, mirando a Tang Yao mientras hablaba, sus ojos brillaban sin poder contenerse. De repente, sintió que esta chica era verdaderamente deslumbrante.

Rong Jia estuvo de acuerdo en irse con Tang Yao. Tang Yao tenía su propio automóvil y llevaba a tres miembros además de ella: dos personas normales y un usuario de habilidades llamado Wang Yue.

Decidieron ir rápido, manteniendo un bajo perfil como habían planeado originalmente, para encontrar menos personas y menos zombis, lo que haría su viaje más fácil.

Sin embargo, para su sorpresa, aunque originalmente la carretera estaba desierta, después de dos días y dos noches de viaje, había una cantidad inusual de personas en la carretera cuando volvieron a tomarla. No eran principalmente automóviles privados, sino más vehículos militares utilizados para escoltar a civiles.

Después de conducir durante toda la noche, Gao Snian y un miembro del equipo masculino se turnaron para conducir. Rong Jia y Tang Yao sostenían binoculares para observar la situación.

Cuando vieron al ejército, Tang Yao instintivamente miró hacia donde estaba Rong Jia, quien también se dio cuenta y asintió para indicarle que también lo había notado.

Aunque la mayoría de los vehículos eran militares, también había algunos automóviles privados. Rong Jia pensó que probablemente eran personas que conducían hacia el ejército del sur, buscando refugio.

Descubrieron que el camino por delante estaba bloqueado por alguna razón y era hora de comer. Tang Yao propuso detenerse a comer antes de continuar.

Gao Snian estuvo de acuerdo. Por lo general, Gao Snian solía ser tan aburrido como una calabaza, pero desde que se enteró de que Rong Jia no tenía sentimientos por Tang Yao y viceversa, se había vuelto más animado. Según la madre de Rong Jia, el chico estaba mucho más animado.

Gao Snian asintió activamente y nadie tuvo objeciones, al final todos se detuvieron para comer.

El lugar no ofrecía comida caliente, así que todos comieron pan y galletas.

Alrededor tenían fideos instantáneos y una pequeña olla, de alguna parte sacada, con paquetes de condimentos. De repente, el aroma de los fideos instantáneos se esparció por todas partes; era de sabor a carne de res estofada.

Wang Yue inhaló profundamente y luego suspiró: "Me gustaría comer, la carne estofada que hace mi mamá".

Cuando terminó de hablar, todos a su alrededor se quedaron en silencio. Algunos sabían que sus padres ya no estaban, otros no habían visto a sus padres desde el apocalipsis. Aun así, todos mantenían la esperanza de que sus padres aún estuvieran con vida.

Tang Yao tampoco sabía si sus padres y familia estaban vivos. Acarició el cabello de Wang Yue sin decir una palabra.

Los padres de Rong Jia todavía estaban presentes allí. Rong Jia estaba un poco incómodo para hablar en ese momento, pero su madre intervino: miró a los niños y dijo: "Cuando lleguemos a la base estable, les prepararé carne estofada, ¡mi carne estofada es muy sabrosa!"

Después de las palabras de la madre, Wang Yue rió suavemente. Asintió con la cabeza y dijo obedientemente: "Gracias, tía".

La risa de Wang Yue suavizó el extraño ambiente triste que se había formado a su alrededor, y después de hablar, todos comieron tranquilamente.

Mientras comían, escucharon una discusión proveniente de adelante, desde los camiones militares. Todos dejaron de comer y escucharon a alguien decir: "¿Ustedes son soldados? ¿Cómo pueden intimidar a la gente común?"

"Señor, por favor, sea responsable de lo que está diciendo. No estamos tomando sus cosas por la fuerza. Simplemente, en la tropa no hay comida, los soldados llevan dos días sin comer. Y además, estos días su suministro de alimentos ha sido proporcionado por el ejército. Ahora el ejército tiene dificultades y esperamos que pueda colaborar. Además, le garantizo que cuando lleguemos a la base, se le devolverá el alimento que tomamos prestado a todos". Hablaba un oficial de unos treinta años, de cejas marcadas y mirada firme, mirando directamente al hombre obeso frente a él.

El hombre obeso llevaba una cadena de oro alrededor del cuello y usaba unas gafas de sol de mala calidad en un día nublado. A pesar de lo que decían los soldados a su alrededor, no se inmutaba en lo más mínimo y parecía estar desinteresado en lo que sucedía. Los soldados no sabían qué hacer con él, así que finalmente llamaron a su oficial superior.

"Tonterías, si les doy algo, ¿me lo devolverán? Ustedes, ¿de qué se alimentan? El país los ha mantenido sin hacer nada. Son ustedes quienes explotan a la gente común. ¿Y qué si comí la comida del ejército? ¿Está mal que un ciudadano común como yo coma comida del ejército? La falta de alimentos es culpa de su negligencia, ¿Qué tiene eso que ver conmigo? Un grupo de inútiles, ¡bah!"

Mientras el hombre obeso hablaba cada vez más ofensivamente, Deng Zhuo lo miraba entrecerrando los ojos, con los puños apretados. Deng Zhuo era musculoso, aunque no se notara bajo la ropa; sin embargo, su postura erguida marcaba la diferencia. El hombre obeso se percató de las manos apretadas de Deng Zhuo y se detuvo por un momento, pero luego, sin temor, dio un paso adelante y dijo: "¿Qué, también quieres golpearme? ¡Mira, los soldados están golpeando gente!"