✿︎𝗘𝗻𝗱𝘂𝗹𝘇𝗮𝗻𝗱𝗼 𝘁𝘂 𝗮𝗺𝗼𝗿✿︎ - Minsung ✔︎

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Después de esa tarde Jisung durmió para olvidar la vergüenza que pasó con Minho, pero en su contra sus sueños trataban justo de él...

—Jisung-ah dame un dulce beso.

—Claro que sí mi bello. —Se acercó y lo besó.

—Hablaba del pan tonto, pero eso no estuvo nada mal... dame otro ¿si?

Jisung era sonámbulo y hacer una pijamada no era algo bonito que digamos. Chaeyoung estaba por llamar al manicomio al ver a su amigo en la cocina besando un cojín.

— ¿Han Jisung? —Asomó su pequeña cabeza Chae con el seño fruncido.

Jisung abrió los ojos sin mover aún un músculo, así deshaciendo su sueño y viendo la ridícula realidad.
— Maldición.. —Susurró Jisung, soltó el cojín y acomodó su pijama. —E-Eh, vamos a dormir ¿Quieres? —Impartió paso como si nada ubiera pasado y Chaeyoung tenía aún el gesto de confusión en su cara.

Amaneció y Jisung fue al trabajo, limpió y esperó a que la gente llegara, como un día cualquiera; atendiendo a los clientes con alegría y entusiasmo, compartiendo panes y sonrisas.

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Noche anterior (perspectiva Minho)

Minho abrió paso hacia su casa desanimado por no poder ver bien y conversar con su amor platónico de primera vista, tuvo un día normal, conoció a Mina, Tzuyu la había llevado a la casa a comer ya que se habían hecho amigas, juró que había escuchado su nombre en alguna conversación de esa peculiar amiga de Jisung pero no le dio ni una pizca de importancia.

Durmió y extrañamente soñó...

—Minho-ah dame un dulce beso.

—Claro que sí mi caramelo. —Se acercó y lo besó.

—Hablaba del pan, tonto, pero eso no estuvo nada mal... dame otro ¿si?

Si, lo mismo que había soñado Jisung pero en reversa, sería coincidencia o algun síntoma de la enfermedad "has encontrado a tu alma gemelatitis" para la cual no hay más medicamento que el amor...

Minho despertó tarde, sus padres habían ido de excursión, pero él les avisó que él no querría ir, así que lo dejaron durmiendo. Igual tenía mucho tiempo y una persona que le podía enseñar las cosas que él quisiera de aquel pueblo.

Se dirigió a la cocina a desayunar, encontró una bolsa de pan con una nota

"Te compre pan del que te gusta para desayunar, no tardaremos mucho, si sales cierra bien la puerta al salir, si sales abrigate bien"

— Ni escribir sabe, ¿por qué repite tanto que saldré? —Quitó la nota y sacó el pan, lo olió y quedó sumamente disgustado, lo dejó en la mesa y decidió ir a un lugar en donde los panes si estaban buenos, además de los trabajadores...

Cuando Minho entró, Jisung estaba atendiendo a una clienta con una bella sonrisa, era tan linda que aún sin luz, los ojos de Lee brillaron como lunas en plena madrugada al verlo.

Han miró al otro viniendo hacia a él con ese brillo, caminata conquistadora, y él mantenía su sonrisa hasta que recordó el vergonzoso sueño que tuvo con el dichoso.

El mayor se inclinó en la barra mirando al peli-negro, mordió su labio inconscientemente y dijo
—¿Me puedes dar un beso? —El menor quedó flechado, recordó aquel sueño como si fuera una indirecta del destino. — De pan, claro.. —Añadió apenado.

— C-Claro —Forzó una sonrisa y sacó el pan para dárselo.

— ¿Puedes disfrutarme mientras te acompaño? —Dijo Minho sin conciencia alguna por lo embobado que quedó mirando los labios de Jisung, el cual tenía una cara de confundido y evitando reírse. — Digo, ¿Puedes acompañarme mientras lo disfruto? —Estaba más rojo que los caramelos pintados en la pared.

— Me temo que aún tengo clientes que atender, mi compañero está ocupado y necesitamos más trabajadores. Será otro día, disfrútalo por mi. —Le respondió con lástima.

— Pero yo quería disfrutar tú beso.