Soy como soy...

¡Qué familia mi familia!

¡Qué familia mi familia!
Conformamos ese grupo de locos lindos porque, por un lado, somos bien lindos, y por otro lado somos esos locos al que no todos pueden llegar a entender. Un grupo que se fue formando desde distintas raíces pero poco a poco se entremezclaron las ramas aportando cada una ese grado de linda y propia locura que hoy compartimos.
Una familia laargaaa…
Ayer nos observaba y sonreía orgullosa.
Porque no es común reír cuando lo que todos esperan es verte llorar. Porque no es lo que acostumbramos ver cuando vemos a dos mujeres abrazadas, preocupadas una por la otra y diciéndose que se quieren mucho, cuando esas dos mujeres son viudas de un mismo hombre.
Tampoco es lo más normal que en los momentos más críticos que un hijo está pasando, se hablen entre los primos para que una triste noticia llegue a nosotros, los veteranos, de la voz, de la mano o a través de un abrazo en directo, siempre que sea posible, y volverse el sostén necesario para "los viejos". Y cuando hablo de los primos, no son solo los de sangre, porque nuestra familia crece y crece con la llegada de cada nuera y yerno, a los que contamos como hijos.
Pero sin duda alguna lo más raro que tenemos es eso de despedir a nuestros seres amados con la alegría de los momentos compartidos. Sacar a flote las anécdotas más lindas, volver a vivirlas y a disfrutarlas. Claro que entre las risas se nos pianta un lagrimón, pero después volvemos a reír.
Además tenemos la virtud de saber interpretar las señales que nos envían los que ya cruzaron a la otra orilla. Es increíble pero ¡siempre se presentan!
A veces con una fecha, o con la suma de números, a veces en forma de "oreja de negro" (semilla del timbó), en ocasiones la letra "e" en cursiva (en las nubes), el pavimento o en una remera.
Tal vez seamos locos (lo de lindos estoy segura), pero es esa locura que nos permite seguir p'alante con una sonrisa o unas buenas carcajadas y poder afirmar, sin dudar, que somos felices.
Y aunque es cierto que a veces la vida nos golpea duro, le hacemos frente y cuando nos abrazamos no hay golpe que pueda derribarnos.
eee
ilargiluna
29/5/2023