Cuestión de Justicia

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A la mañana siguiente cuando comenzaban a despertar los niños de la Wammy House empezó el suceso que marcaría las vidas de tantas personas. Directa o indirectamente, el suicidio de A tendría consecuencias en las vidas de los niños.

Un par de gritos fueron los que rompieron con el silencio que a esas horas debería dominar los pasillos. Un silencio consecuencia de una somnolienta población, que al escuchar los gritos pareció despertar de repente a todos los niños. Los directores se dirigieron hasta el lugar de donde procedían esos gritos. Pero no estaban preparados para lo que encontraron.

Elphaba chillaba abrazando las piernas de su hermano. Las lágrimas fluían por los ojos de la niña que miraba a todos lados como enloquecida por el dolor.

-¡¡A!! Por favor... ¡¡Por favor hermano!!

Aquello era impactante. El cuerpo de A balanceándose como si se tratase de un pescado y la niña abrazándole llamándolo a gritos. Sabiendo que no obtendría respuesta. Y entonces los niños comenzaron a cuchichear. Algunos mirando a Elphaba con pena. Otros, insensibles a sus llantos dijeron la cruel verdad

-¿Para qué lo llamas estúpida? ¿No ves que está muerto?

-Alex...

-venga déjalo ya, resultas patética.

-El hermano no era lo bastante bueno para ser un detective y además de ser un segundón era un cobarde.

-¡¡No te consiento que digas eso de mi hermano!!

-A era un cobarde... y un perdedor.

Los profesores se plantearon parar al alumno. Por respeto al dolor de la niña. Pero en sus ojos se podía ver perfectamente que estaban de acuerdo con la declaración de ese alumno. Al menos en parte. Por eso no reaccionaron a tiempo. Un alarido de furia en estado puro acalló las carcajadas de aquellos que insensibles al dolor y movidos por el morbo hacían leña del árbol caído. Ese grito de furia les cerró la boca y les heló la sangre en las venas.

El tiempo pareció pararse. Una exhalación de color negro pasó a toda velocidad y le soltó un tremendo puñetazo al que había comenzado las burlas. Uno a uno, los que se habían burlado del suicidio de A fueron cayendo al suelo repletos de sangre. No podían defenderse. Aquella... aquella cosa rezumaba tanta furia y locura que resultaba imposible hacerle frente.

Los que estaban en el pasillo, incluyendo a los profesores, dieron un paso atrás aterrorizados por aquello que estaban presenciando. Cuando ya pudieron recuperarse de la impresión se encontraron con que Beyond Birthday estaba cubierto de sangre de los otros alumnos y los miraba con odio. Cruzó la estancia y bajó a su difunto amigo. Una vez hecho esto se encaró con Elphaba.

-Elphie...

La niña corrió a los brazos de Beyond abrazándose a él como si la vida le fuese en ello.Él correspondió al abrazo. Pero mientras que en los ojos de la niña había un dolor horrible por la pérdida de su hermano en los de Beyond había algo más. Algo oscuro. Algo que había estado dormido hasta la fecha y ahora acababa de despertar. Algo que se alimentaba de la furia que Beyond tenía. Él ya había buscado responsables de la muerte de su mejor amigo. Y lo tenía. Vaya que sí. En ese momento, Beyond juró que le haría pagar lo que les había hecho. Aunque fuese lo último que hiciera, L pagaría la muerte de A.

No era una cuestión de venganza. Era una cuestión de Justicia.

No me dejes, no me sueltes (Death Note)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora