Dicen de mí que soy una traidora. Dicen de mí que estoy loca por volverme contra "la mano que me alimenta". Pero yo no lo veo así. Tal vez estoy loca, y si es así deba darle las gracias a L por otro de sus "maravillosos" regalos. Pero nadie ve la otra cara de la moneda. Ven a L, el más gran detective que ha habido nunca. Ven en él al triunfador. Pero todos nos ignoran a nosotros, los juguetes rotos que se quedaron por el camino para que L pudiera estar donde está ahora.
Yo sólo quiero que nos reconozca. Que paren lo que han hecho con nosotros desde pequeños. Quiero que L use ese poder para obligar a la Wammy a dejar de portarse como un niño cruel, obligarla a rectificar, y a pedir perdón a los que ha destrozado la vida.
Quiero una oportunidad, una oportunidad para salir de esta oscuridad que me corroe la sangre. Esta oscuridad que me hace tener pesadillas cada noche, pesadillas que me hacen llorar y gritar en sueños, clamando por una piedad que jamás llega. Quiero la oportunidad de ser feliz, de salir de esta agonía. Pero aunque lo intento no logro salir. Ahora sólo puedo luchar por no hudirme más en esta locura.
Mientras me oculto en las sombras veo como pasan los ex-alumnos triunfadores la Wammy House. El orfanato donde crecí. También es donde creció L, ese maldito detective que parece ser de hielo. ¡Sólo quiero que les haga parar! Puede que sea tarde para nosotros, para esa primera generación de sucesores. ¡Pero que no reproduzca lo que a nosotros nos condujo a esta oscuridad con los otros niños! Hacer eso es cruel. Es muy cruel. Y nos llena de desesperación e impotencia ver como cada vez hay más niños que están abocados a acabar como nosotros. Eso nos da rabia, e impotencia. Y como estamos atados de pies y manos nos hundimos más en esta oscuridad.
Mientras veo pasar a la cara triunfante del orfanato no puedo evitar sentir ira hacia aquellos que como L, triunfaron, y sabiendo lo que hace la Wammy no hacen nada para cortar de raíz esta tragedia. Los que pueden hacer algo no hacen nada. Y eso es un crimen. Y mucho más gordo que esos otros crímenes que ellos resuelven y de los que presumen sin parar. Fumo, si... caigo en el vicio pensando que a lo mejor este humo me ayuda a desahogar mi rabia. Aunque son vanas esperanzas, porque sé que fumar no me quitará esta oscuridad. De repente le veo. Camisa blanca, descuidado, con ojeras... muchos le tomarán por L porque parece su jodido clon, pero son tan diferentes... nadie sabría distinguirlos. Nadie que no se fije en el dolor que transmiten esos ojos rojos. Esos ojos rojos que nadan en la locura, dolor y oscuridad.
No se en qué momento me he puesto a sonreír como una demente.
-Beyond Birthday...
Digo con admiración. Veo como él me nota, como sonríe con siniestro placer al saberse reconocido.
-Elphaba... la malvada Bruja del Oeste.
Niego, ¡maldita bromita! Pues no van y me ponen el nombre de la malvada bruja del oeste del mundo de Oz!? Pero río, sin alegría, pero río. Y noto como él se suma a mis risas. Si, aquí estamos los dos. Los máximos exponentes de los juguetes rotos de la Wammy. Tal vez haya llegado la hora de hacer justicia. Al fin y al cabo ¿No era para eso para lo que la Wammy educaba a sus niños?
Apago el cigarro. Ha llegado el momento de hacer Justicia. Por los que se quedaron en el camino. Por los perdidos en la oscuridad... y por los niños que van a ha acabar como nosotros como nadie haga nada. Sí, es hora de hacer justicia. Y lo haremos nosotros. Nosotros a los que tachan de escoria.
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No me dejes, no me sueltes (Death Note)
Fiksi PenggemarEn todas las historias hay un villano... y en la nuestra también. Nos dicen que somos lo peor, pero sólo somos personas. Personas rotas como si fuéramos juguetes. Olvidados, abandonos y rotos juguetes... Dicen por ahí que L al final lo ha conseguido...