15: Tierno

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YoonGi estaba sentado en una banca mientras trataba de arreglar el peinado de su hija. Su esposo tenía dolores de estómago y vómito así que él decidió ir con la curandera por algo junto a sus hijos ya que estos llevaban días pidiéndole panquecitos pero por falta de tiempo no podía comprarlos.

—EunJi ¿Cómo le hice en la mañana? —le preguntó mientras trataba de recordar cómo había peinado a su hija.

—Uhmm, creo que solo hiciste esto —movió sus manos mientras sonreía.

—Creo que mejor cambiaremos el peinado, ¿Te parece? —habló mientras le quitaba los listones.

La niña asintió levemente mientras jugaba con el encaje de su vestido color café.

—Muy pronto aprenderé hacer chongitos para no sufrir, solo tenme paciencia cachorra —habló.

—Papi mimi peina rápido —habló el pequeño JiHoon mientras cargaba un pollito de felpa.

—Tu papi se esfuerza mucho para ser muy bueno en todo lo que hace —mencionó con una sonrisa cuando recordó como su omega lo peinaba a él para que en un futuro peinara a su cachorrita.

YoonGi empezó a darse prisa en hacerle dos coletas a su hija para que su pollito no se siguiera sintiendo mal. El pequeño JiHoon se alejó un poco cuando vio a un pequeño gatito, fue hasta el y lo acarició, se escondió cuando escuchó el nombre de su papá alfa.

—Míralo, YoonGi hace el trabajo de ese omega. Es un tonto, no se cómo el líder lo soporta —habló con molestia una omega.

—¿Cuántos años tienen los cachorros?— preguntó su compañero con curiosidad.

—Cuatro, todos en la manada lo saben. No sé que tiene ese omega tonto, hasta su nombre es patético y tonto —se quejó.

—Oye. Jimin no es un mal nombre y pues el líder ya tiene su familia —rió nervioso.

—Es ridículo, además, ni siquiera es de esta manada... ¡Auch! —gritó cuando sintió como golpearon su pierna— ¡Maldito mocoso!

—Tú eres la ridícula, Papi Yoon quiere a Papi Mimi —le enseñó su lengua.

—¡JiHoon! ¡Ven aquí! —gritó el alfa mientras caminaba con su hija agarrada de su mano y esta dando pequeños brincos tratando de seguirle el paso a su papá.

—Líder, su hijo es un maleducado. Me golpeó —lloriqueó.

—Dijo cosas feas de papi —se defendió el pequeño mientras abrazaba la pierna de su padre.

—¿Siguen hablando mal de mí esposo? Ya ha pasado bastante tiempo desde que aclaré mi indiferencia hacía él —Habló mientras suspiraba. —No tengo tiempo para estas cosas.

Los dos omegas se miraron entre sí, uno se sentía más avergonzado que el otro. YoonGi les dió una mala mirada antes de irse con sus cachorros de ahí.

—Cachorro, no debes golpear a las personas. —dijo YoonGi.

—Pero dijo cosas feas de papi, tenía que defenderlo —habló con un mohín.

—Está bien que quieras defender a tu papi pero tampoco golpees a las personas. Si vuelven a escuchar algo feo de su papi me dicen para castigar a esas personas —YoonGi miró a sus cachorros —o también pueden decir algo como, cállate mi papá Yoon ama a papi Mimi o algo similar.

—Papi, corre. Papi Mimi debe sentirse muy mal —hablo EunJi con preocupación.

—Cierto, hay que correr, ¿Listos?

YoonGi comenzó a correr con sus cachorros mientras reían.

(...)

—¿Ya te sientes mejor, pollito? —preguntó YoonGi mientras acariciaba el cabello del rubio.

—Aún me duele un poco la panza pero ya estoy mejor —Sonrió tiernamente mientras se cobijaba un poco más tenía muchos escalofríos —¿Dónde están los cachorros?

—Comiendo ese pan que tanto les gusta junto con su leche —respondió —¿Quieres que les hable?

Jimin asintió —Quiero abrazarlos, los extrañé mucho.

YoonGi dió un pequeño beso en la frente del rubio y otro en los suaves labios del omega antes de salir de la habitación. Jimin sonrió mientras sus mejillas se tornaban de un rojo carmesí, se sentía feliz de tener una linda familia.

El alfa entró a la habitación sin hacer mucho ruido, sus cachorros estaban felices de ver a su papá omega, solo lo vieron un ratito en la mañana y fue para despedirse antes de salir.

—¡Papi Mimi! —gritaron ambos mientras corrían abrazar a su padre.

—Mis pequeños, ¿Cómo se la pasaron con su Papi? —cuestionó acariciando las cabelleras de sus tiernos cachorritos.

El alfa con aroma a café ayudó a su omega a poder sentarse en la cama y también subió a sus cachorros a la cama para que pudieran abrazar a su papá de una manera más cómoda.

—Papi Yoon me peinó, mira —le mostró sus dos coletas que le había hecho el pelinegro, este se sintió avergonzado y trató de cubrir el peinado con sus manos.

—Estaba mucho mejor hace mucho pero se despeinó por tanta adrenalina que tuvimos, ¿Verdad, EunJi? —habló nervioso, la niña asintió feliz.

—Es un lindo peinado —habló con una tierna sonrisa —¿Y tú JiHoon no quieres decirme nada?

—Bueno. —miró a sus padres antes de volver hablar —Me porte mal... Golpeé a alguien —confesó mientras sus ojos se ponían acuosos.

Jimin miró a su esposo pidiendo una explicación mientras trataba de calmar a su cachorro, el cual lloraba en su pecho mientras su hermana daba suaves palmaditas.

—Escuchó como hablaban mal de tí, él solo quería defenderte —habló YoonGi.

—Oh, vaya... JiHoon, tranquilo. Muchas gracias por defender a tu Papi pero está mal que hagas eso. —Jimin pellizcó con suavidad uno de los mofletes de su hijo.

—Lo siento papi —besó la mejilla del mayor.

—Son unas cositas muy tiernas, mis pequeños pollitos —abrazó a los niños con cariño.

—¿Y Sun, niños? —cuestionó YoonGi.

—Está dormido, yo lo ví —respondió EunJi.

—¿Quieren dormir aquí con nosotros? — preguntó Jimin con una sonrisa.

Ambos cachorros asintieron con una gran sonrisa, YoonGi fue por las pijamas de sus hijos y los comenzó a cambiar con ayuda de Jimin, una vez listos la familia se acomodó en la grande cama matrimonial, sus cachorros quedando en medio para evitar que se cayeran. Jimin se quedó dormido casi al instante mientras que a sus cachorros les tuvo que leer un cuento antes de que se durmieran. YoonGi se quedó viendo la bonita imagen de su familia dormir abrazados.

—Tiernos pollitos... —murmuró sonriendo.

Escuchó como raspaban la puerta y ya sabía quién era, Sun siempre quiere dormirse con Jimin así que rasca la puerta con sus patas hasta que le abrieran.

Se levantó de la cama con mucho cuidado y fue abrir la puerta, no fue una sorpresa para él cuando el can lo ignoró y se dirigió directamente a la cama para acostarse y cerrar sus ojos.

—Al parecer mi pollito te ha consentido mucho —habló cerrando la puerta con cuidado y luego se acostó en la cama nuevamente, quiso gritar cuando Sun le mordió su pie —, definitivamente eres un consentido.

YoonGi amaba a sus pequeños pollitos, sus tiernos pollitos.

Fin

Mi pollito | yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora