Se hizo un silencio sepulcral cuando la mano escuálida y pálida del chico se alzó sobre las cabezas de todos, atrayendo la atención de la multitud. Los ojos de aquellos que lo rodeaban se clavaron en su mano, si piel blanquecina brillaba por los rayos del sol.
Mercenarios y caballeros por igual, absolutamente todos dirigieron sus miradas hacia su mano, con un temor creciendo dentro de ellos, luego de ver como alguien como Gonzalo fue derrotado con solo un dedo.
Los murmullos inquietos se extinguieron y el aire se volvió denso con anticipación. La silueta del chico se recortaba en contraste contra el fondo oscuro y opresivo. La expresión aburrida en su rostro no cambio en ningún momento, sus ojos enfocados en la multitud como estaban, se movieron con deliberada lentitud.
La multitud permanecía en un estado de expectación y temor.
Los ojos carmesíes de Accelerator se movieron buscando su presa.
Accelerator conocía mejor que nadie a los humanos, después de todo estando en el lado oscuro de ciudad academia era algo obligatorio identificar las verdades intenciones de todos, o de lo contrario sería usado por todos, engañado y traicionado.
Desde muy joven entendió eso.
Entonces él sabía exactamente como identificar a los espías. Con su malo levantada en lo alto del cielo, sus ojos se enfocaron en buscar a alguien que definitivamente fuera un espía, como parte del sentido común concentro toda su atención en los mercenarios, ya que, por probabilidades, tenía más opciones de encontrar a un miembro de Kuroinu entre ellos, aunque no descartaba a los caballeros, giro sus ojos y observo al hombre que había mandado a volar.
― JA . ― dejo escapar una pequeña risa.
― ¿q-que estás haciendo? ― Maia grito, Accelerator si ve volvió para mirarla, simplemente sonrió.
― bueno, todos los que sean miembros de Kuroinu morirán. ― Accelerator dijo, mientras sus fríos ojos recorrían a todos.
maia parecía querer decir algo mas, pero no estaba segura de que podría decir para detenerlo.
Ahora bien, lo que el buscaba era señales en el lenguaje corporal, era lógico que todos estarían, nerviosos luego de lo que él hizo, pero el buscaba a aquellos que reaccionaron ante la palabra de Kuroinu, y rápidamente localizo a unos cuantos, ignoro a la mayoría y centro toda su atención en el que era más obvio de todos.
Un mercenario que estaba en parte trasera de la multitud.
― y empezare por ti . ― Accelerator dijo con una sonrisa, mientras apuntaba con su dedo al hombre.
Las palabras resonaron en el aire, enviando escalofríos por la espina dorsal de todos los presentes. Maia que se había mantenido expectante de las acciones del monstruo, sintió que se sangre hervía, desde su punto de vista, Accelerator solo estaba realizando acciones al azar, pues para ella era imposible que alguien distinguiera a un espía simplemente con una mirada.
Entonces, lógicamente, ella deseaba intervenir y detener las despóticas acciones del monstruo, Sin embargo, la parálisis del miedo le impidió dar ese paso valiente. Se sentía impotente y vulnerable ante aquel ser que encarnaba sus mayores temores, enviando a volar a Gonzalo con un dedo, matando a un grupo de soldados en menos de un minuto, ella presencio todo eso de primer mano, y no podía negar el terror que este chico, producía en ella, Era consciente de que su falta de coraje la convertía en una cobarde, una espectadora pasiva en medio de la tragedia que se desarrollaba ante sus ojos.
Su mera presencia era suficiente para sofocar cualquier intento de resistencia. Ante él, incluso los mercenarios, curtidos en innumerables batallas y acostumbrados a la ferocidad del combate, podían sentir cómo su piel se erizaba y su sangre se enfriaba. Accelerator era algo mucho peor que un ejército de monstruos despiadados.
