El amor es un Birch. Judd x OC

Una reunión para acabar con todo o no

******Piper P.O.V ******

Besé a Judd suavemente.- Te veré esta noche.- El otro día no pude quedarme a cenar en casa de los padres de gis y me invitaron a ir el viernes.-

-Puedes retirarte si quieres. No necesito la aprobación de mi patética familia.- Gruñó frunciendo el ceño.

-Quiero conocerlos. Hará las cosas mucho más fáciles a largo plazo si les gusto. Sé que no hemos estado juntos por mucho tiempo, pero...- Me sonrojé mucho y mi voz bajó con nerviosismo. -Esperaba que esto durara mas tiempo.-

Al mirar a Judd a través de mis pestañas, lo vi sonriendo alegremente. La sonrisa de Judd casi parecía fuera de lugar en su rostro normalmente más reservado. Extendió la mano y agarró mi barbilla tirando de mi cara hacia la suya y besándome sin sentido.

-He estado esperando que digas eso durante semanas. Sé que no hemos estado juntos por mucho tiempo, pero ya sé que eres tú. Mi reina. No puedo esperar a que llegue esta noche. Estoy seguro de que mi familia será más tolerable contigo a mi lado.-

Le sonreí brillantemente antes de despedirme y hacer mi camino hacia la puerta principal.

Abrí la puerta para encontrar a mi madre sentada en la mesa luciendo seria.

-¿Quién es el chico Piper?- Dijo con voz seria.

-Ese es Judd Birch. Es mi novio.- Al notar la desaprobación en su rostro, rápidamente tomé una decisión que, con suerte, me ahorraría el problema de su intento de criarme expresando su disgusto por mi relación con Judd en función de su apariencia. -Estoy cenando con sus padres esta noche. ¡Estoy seguro de que no les importaría que te unieras a nosotros! Estoy seguro de que los adorarías, son personas increíblemente dulces y viven justo detrás de nosotros.-

Las cejas de mi madre se levantaron ante mi declaración y se elevaron aún más ante la oferta de cenar con su familia. -¿Cuánto tiempo has estado saliendo con ese chico?- Su voz ya no sonaba disgustada sino ligeramente sorprendida y curiosa.

Me sonrojé ligeramente. -Desde aproximadamente una semana después de que llegamos aquí. Un mes y medio más o menos. Es rudo y un poco problemático, pero es tan dulce conmigo y siento que me derrito cuando está cerca.- Me acerqué y puse mi bolso en el mostrador antes de sonreírle suavemente a mi mamá. -Por favor, no lo juzgues por su apariencia, mamá. Realmente es dulce conmigo.- 

Mi madre suspiró mirándome como si fuera un rompecabezas al que le falta una pieza. Casi me sentí incómodo bajo su mirada cuando finalmente habló de nuevo. -Está bien. ¿A qué hora vamos a cenar?-

Sonreí brillantemente. -¡5:30! Le enviaré un mensaje de texto a Judd diciéndole que también vendrás.- Envolví mis brazos alrededor de mi madre en un abrazo antes de alejarme y prácticamente corrí escaleras arriba hacia mi habitación.

Sacando mi teléfono de mi bolsillo trasero, le envié un mensaje rápido a Judd sobre la llegada de mi mamá y me dirigí a mi armario improvisado. Saqué un par de jeans oscuros y un gran suéter marrón grueso de aspecto cálido. Quería verme bien para su familia cuando me conocieran oficialmente como su novia. 

Me dirigí a la ducha y rápidamente me duché y arreglé mi cabello aplicando una capa ligera de rímel. Mirando mi pequeña colección de maquillaje, decidí no hacer nada más. Regresé a mi habitación y me puse un par de botas de combate negras que no usaba a menudo. Mirándome en el espejo me sentí lista y miré la hora. Eran alrededor de las 5:15.

Empujando mi teléfono en mi bolsillo trasero me dirigí escaleras abajo. Cuando mi pie golpeó el último escalón, miré hacia arriba con sorpresa. Mi mamá estaba vestida con una camisa casual de manga larga negra y jeans claros, un par de tenis blancos en sus pies. Se parecía más a la mamá que solía conocer que a la adicta al trabajo y ocasional fiestera que había llegado a conocer. Mi mirada se suavizó cuando ella me miró y sonreí.