—Siento que estoy cavando mi tumba, pero está bien—dijo un poco nerviosa— Honestamente no se me toda la historia pero sé que sucedió hace ya dos años, en ese tiempo ellos acababan de cumplir los 18, diferentes fechas mismo mes, el caso es que lo quisieron celebrar juntos en una misma fiesta, para esto antes se rumoraba que había llegado una chica misteriosa que nadie había visto pero que aún no era elegida, escuche muchos murmullos aquel día mientras me encontraba en mi habitación, decían que llegaría entre las 7 y las 8 de la noche y que sería mi compañera de habitación, lo cual me erizo la piel porque llámame loca pero yo presentía algo, tenía algo de miedo porque a mí tampoco me habían elegido pero tenía esa consideración porque mi madre fue alguien muy importante aquí aparentemente, digo a aparte de abandonarme al menos me dio algo de beneficio durante un tiempo y es que cuando estas cerca de los 18 es cuando ya no hay alternativa, deben elegirte sí o sí, son las reglas. Pero, volviendo al tema de la chica, llego como 7:30 a mi puerta, lo recuerdo muy bien porque me asusté y creí que venían a molestarme o algo, cuando abrí la vi ahí con una sonrisa y yo no pude entender cuál era su alegría ¿sabes? Era como "¿si sabe dónde está verdad? Esto no es precisamente el paraíso en los internados, pero igual me presente cordialmente, ella solo dijo:
—Hola, si se quién eres, mi nombre Agnes Rosé, creo que mi madre fue una gran amiga de tu mamá por eso estoy emocionada de conocerte, pero entiendo lo raro de la situación, sé que no tuviste una relación muy cercana con ella— Cuando dijo eso claramente me moleste porque era una herida que yo aun no cerraba del todo y solo pude actuar con mucha hostilidad hacia ella.
—No sé quien rayos eres, pero no te pedí opinión sobre mi familia y si tienes algo o no que ver con ella, lo único que se de mi madre es que no me quería y me dejo aquí a mi suerte todos estos años así que, si quieres ganar puntos conmigo diciendo eso, fue lo opuesto. Instálate donde quieras, no me importa— Le respondí y salí furiosa de la habitación, se que no fue la forma correcta de hablarle y créeme que después me arrepentí porque se veía que era buena persona y te transmitía una calma que claramente yo no tenía entonces. La cena era a las 8 así que me fui a los comedores antes, siempre hacia eso para evitar muchas cosas, pero como esta chica era nueva no sabía eso, se supone que yo tenía que indicarle eso pero con lo que pasó me olvide por completo de ella y cuando dejaron de sonar las campanas, todos estaban ahí excepto ella y fue cuando me dio un remordimiento de consciencia en ese momento y quise levantarme a buscarla pero sabía que era mala idea y más en una zona de selección, pasaron unos segundos y entonces la vi bajando los escalones con una seguridad increíble y seguía con esa sonrisa pero a mi entro la preocupación y quise hacerle una seña o jalarla a sentarse rápido pero estaba muy lejos, ella comenzó a saludar a todos como si fuera el parque y yo entre en pánico porque jamás debes dirigirte a nadie más con esa facilidad si no eres de su círculo o conocido si quiera y menos si son superiores, ella de sonreír en el momento en el que se dio cuenta que nadie le devolvía el saludo y entonces fue a sentarse donde estaba yo, yo entre pánico porque sabía que éramos los blancos de esta noche por decirlo así.
—¿Debra que está pasando? — me dijo algo asustada y yo solo pude mirarla con cierta compasión y miedo, iba a decirle algo cuando un chico la tomo del brazo y la hizo que se parara, para llevarla al centro y decir lo siguiente:
—¿Esta chica quien demonios es? Y porqué llego después de las campanadas, con una actitud irrespetuosa, por cierto, ¿Quién está a cargo de esto? — alzo la voz con autoridad.
—Dime, quien es tu compañera de habitación porque sé que era su responsabilidad ponerte al tanto de las reglas de este lugar— le dijo con la voz golpeada y ella no supo que responder y solo me miro directo hacía mí. Lo cual me hizo sentir que moriría en ese instante, jamás había roto una regla ni queriendo y esto era muy malo. El la soltó y le ordeno quedarse ahí parada, se acercó a mí y yo baje la mirada, lo tuve a centímetros de mí, era uno de los mejores amigos de Harry, el príncipe Matías Ayamonte, sabía perfectamente que era el más despiadado de todos y no perdonaba ninguna.
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𝑨𝑻𝑹𝑨𝑷𝑨𝑫𝑨
Teen FictionElla es una chica insegura, reservada, tímida y algo ingenua, fue enviada al orfanato "Berkeley" en Cleveland, dónde nada es lo que parece. Un misterio, dos chicos y un romance oscuro ☝🏽🖤. ¿Que pasará? Acompaña a Mova en este retorcido misterio. ✔...