-Marta-
Hoy es nuestro penúltimo día en Nueva York y mañana volvemos a Madrid. Siento que se ha pasado volando, pero aun así he disfrutado mucho junto a Pablo. Me despierto y al mirar la hora son las 7:00h.
Quisiera volver a dormir pero los efectos de jetlag siguen en mi, por otra parte mi marido esta dormido y después de intentar conciliar el sueño, decido levantarme y paso al baño a lavarme la cara.
Para matar el aburrimiento ordeno la maleta y voy guardando las cosas que compré ayer en los parques Universal, por suerte no es mucho, ya que no quería tener que pagar de más. Al cabo de un rato se despierta Pablo.
- Buenos días, señorita.
- Buenos días, cielo.
- ¿Desde cuando llevas levantada?
- Desde las 7:00h de la mañana, el jetlag ha podido conmigo.
- Entonces no tardará en hacerme efecto.
- Tenemos que aprovechar nuestro día aqui en Nueva York.
- ¿Que planes tienes?
- Podriamos ir por Central Park y pasar el dia allí.
- Me encantaría,por cierto, ayer por la noche vi un colibrí posado en la ventana.
- Eso es una señal de que un ser querido vino a verte.
- Si es asi, me encanta el mensaje..
Sonreimos y nos ponemos en marcha para nuestro dia de hoy. Creo que estaremos por la ciudad y estaremos de relax.
Antes de nada miro por la ventana y esta lloviendo como si no hubiera un mañana, menos mal que trajimos ropa de abrigo por si acaso. Decido ponerme unos leggins negros y un jersey blanco, con unas botas.
- Tengo paraguas. -añade Pablo.
- Siempre tan precavido -digo sonriendo.
- Un poco.
Bajamos a desayunar y opto por unos gofres, porque son mis favoritos y por un dia no pasa nada. Al terminar salimos a caminar cogidos del brazo y vemos a la gente con un chocolate caliente y refugiandóse de la lluvia.
Paramos en una tienda donde venden vinilos y veo unos cuantos de Queen, los quisiera todos pero no tenemos tocadiscos en casa. También vemos que hay pósters, asi que no puedo evitar coger uno.
- ¿Son de Queen? -pregunta Pablo
- Asi es. -respondo.
- Como diria Freddie Mercury, eres el amor de mi vida -dice Pablo.
- Te quiero -me acerco y le doy un beso.
- Y yo a ti, princesa.
Después de nuestras compras y justo en la quinta avenida hay un piano donde todos pueden tocar. Animo a Pablo y quiere que este con él.
Nos sentamos en el banco y tocamos Lo saben mis zapatos.
- Cantala conmigo.
- Me da verguenza.
- Solo mirame.
Al final arrancó a cantar con él y varias personas se acercan y graban con sus teléfonos, me siento liberada y siento que es un paso más para mi.
Terminamos de cantar y recibimos aplausos, no esperaba para nads vivir esta experiencia y sobretodo en Nueva York. Desde que conocí a Pablo me ha enseñado que no tengo que temerle a nada y hacer cosas con el corazón y esta ha sido una de ellas.
Nos levantamos y Pablo agarra mi cintura para besarme, rodeo su cuello con mis brazos y no nos damos cuenta de que la lluvia nos ha dejado calados.
- Por fin puedo decir que me he dado un beso bajo la lluvia -dice Pablo.
- Nunca mejor dicho.
- Aunque estamos un poco empadados.
- Aun así, ha sido genial.
- Y que lo digas, aunque deberiamos ir a secarnos antes de que cogamos un resfriado.
- Tienes razón.
Volvemos al hotel para cambiarnos y tambien me seco el pelo con el secador y esta noche me lo lavaré. Pablo ya esta listo y seguimos con nuestro paseo por la ciudad.
(...)
15:00h de la tarde y vamos a comer, la lluvia ha parado y optamos por un restaurante italiano. Nos sorprendremos porque suena Laura Pausini y Pablo no duda en grabar un storie y no me doy cuenta de que me sé la canción.
- Laura, escuchame, que haces sonando en Nueva York, tia. Mira, hasta mi mujer se la sabe.
- Laura, te mando un beso enorme.
Sube el storie y enseguida nos traen la carta, pedimos pizza y alguien nos ha mencionado en Instagran cantando antes en la calle.
- Guardaré ese recuerdo para siempre.
- Es una experiencia que no se vive todos los dias.
Comemos y volvemos al hotel para descansar y el resto de la tarde nos quedamos en la habitación. Pablo aprovecha para ordenar su maleta y yo hago el check in para mañana coger el avión y también contesto algunos correos que tenia atrasados.
Una vez hecho, me voy a la ducha, ya que antes con la lluvia me ha dejado el pelo hecho un cuadro.
- ¿Vas a ducharte?
- Si ¿por? -digo quitandome la camiseta.
- Para ahorrar agua, ya sabes.
- ¿Eso es que quieres ducharte conmigo?
- Puede.
Rio y entro en la ducha y sin darme cuenta Pablo me sorprende.
- Eres un caso.
- Pero me quieres.
- Y mucho.
Nos duchamos juntos y al salir nos ponemos el pijama, guardo todo en el neceser y lo pongo en la maleta. Reviso de no dejarme nada y para matar el aburrimiento jugamos con el teclado que se trae mi marido a todos los viajes e incluso a veces componemos alguna que otra canción.
- Tengo que llamar a mi madre. -dice Pablo.
- Corre, que si no se enfada.
La llama por videollamada y hablamos un rato con ella. Pedimos la cena a la habitación y mientras pongo el móvil a cargar porque esta a punto de apagarse, nos llega la cena y cenamos viendo una peli.
(....)
Hora de irse a dormir, hago una última revisión de no dejarme nada. Dejo todo preparado y me tumbo en la cama junto a Pablo.
- Mañana ya volvemos a casa.
- Por una parte no quiero, pero por otra si.
- Tengo ganas de ver a Pasapuré.
- Se pondrá loco al verte.
- Eso seguro.
- Pero Luis lo ha cuidado como a un rey.
- Más le vale.
Seguimos hablando hasta que nos quedamos dormidos. Mañana de vuelta a casa y estamos deseando llegar a Madrid.
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la mejor amiga de pablo lopez
RandomMi nombre es Marta García, tengo 24 años y resido en Madrid. Actualmente vivo con mis padres, pues encontrar piso es un autentico caos. Estoy estudiando Magisterio en la universidad y en los ratos libres suelo leer o ver videos de mis youtubers fav...