He dormido todo el día, aun no superaba el hecho de haber sido "violada", aunque no realice ningún acto de defensa, en el fondo sabía que serían inútiles, aun así es chocante, creo que jamás lo superare del todo.
Harry estuvo callado, creo que si no hubiera sido por las circunstancias, hasta lo hubiera disfrutado.No creía que esto estaba pasando, me convertiré en una prostituta, venderé mi cuerpo a cambio de dólares, es tristemente increíble.
-Hey, tendrás que volver con las demás hoy, traeré ropa para que te cambies, vuelvo en un rato, vuelve a dormir. -Hablo Harry y volvió a salir.
No pude volver a dormir.
No sabía como él podía ser tan frío después de lo de anoche. Pero, ¿qué podía esperar de un hombre que tiene vínculos con el secuestro y un burdel? Nada bueno o normal, por supuesto.
Después de algo mas que una hora entro una chica muy delgada y muy maquillada con una bolsa de papel.
-Ten, te lo manda Harry.
Lo dejo sobre la cama y salió. Curiosa, rápidamente abrí la bolsa y me sorprendí con lo que había dentro, una blusa coral y un jeans de mezclilla hasta la cintura, lo que mas me sorprendió fue que ambas prendas tenían etiqueta. Me vestí y me puse el par de zapatillas que tenía desde que había llegado y salí, sin saber hacia donde.
Debo de decir el acto de Harry me agrado mucho, tal vez el no era tan frío después de todo.-Tú, sígueme. -Dijo Harry pasando por mi lado, sin siquiera mirarme.
Oh, el si es frío.
Lo seguí hasta una habitación tipo oficina, las paredes claras y solo un par de muebles cafés, el único toque de color era una pequeña planta en en un rincón del escritorio. Se sentó y comenzó a hablar.-Bien, tú sabes que es esto no..
Asentí, el siguió hablando pero deje de prestarle atención, el mismo hombre aquí adelante era quien horas atrás estaba "haciéndome el amor" -aunque de amor no había nada- sus manos tocando mi piel, sus labios...
-Lea, escuchaste algo de lo que te dije. -habló en un tono aunque calmo, se notaba enojado.
-S..s..si. -balbucee, joder, su mirada me intimida.
Harry tenía una mirada bastante profunda, fría y directa, que intimida hasta al hombre más poderoso del mundo.
-Lea, lo diré una sola vez, cuando hablo, me gusta que me escuchen. -diablos, estaba enojado.
-Lo siento, Harry.
-Llámame Sr. Styles a partir de hoy. Bien, te decía que, tienes suerte, comenzaras en una semana, se nota que no tienes experiencia y que te espantaras con tu primer cliente. Mañana irás conmigo al salón de mi hermana para un cambio, no queremos que te reconozcan.
-O sea que... ¿Saldré de aquí? -pregunte emocionada.
-Si me hubieras escuchado no te hubieras sorprendido.Me guiñó un ojo y salió dejándome sola en la habitación. Este hombre es extraño.