¿Y Sí El Mundo Se Acaba?

Capítulo 11 - Recuerdos que atormentan y sanan.

Terry

—¿Vas a dejar ya, esa cara de trauma?— le pregunto a Bi mientras mantiene la mirada clavada en sus pies.

—¿Cómo no estar preocupada? Nos han descubierto—dice exagerada como siempre.

Chicas...

—Básicamente no, nos descubrieron.

Sí, después que Seren se fuera mi madre nos ha dado el sermón del año.

No hemos podido mentirle sobre nuestra pequeña visita a Harry pero tampoco le contamos toda la verdad sobre el tema de la visita.

Mi madre es una confiada de la vida; confíaba en cualquier persona con tal le dieran una buena excusa y eso fue lo que hicimos. Otra prueba de su confianza incondicional es Seren y su «a mi parecer» no creíble historia.

¿Estaba en el comedor?

Pues yo no le creo. Todos le han creído sin poner en duda su palabra y ella a manipulado la situación a su favor. No le tengo rencor ya que fue una jugada inteligente de su parte.

Además estaba más ocupado pensando en donde había estado en realidad.

No creo que haya entrado a la misma habitación que nosotros ya que de milagro salimos sin ser descubierto por el vigilante pero tampoco creo mucho en su versión.

—Que tu mamá se hubiera creído lo que le dijimos no significa que estemos librados.—dice Bianca sufriendo lo que al parecer era el inicio de un ataque de pánico— Ella no-nos los ha dicho, nos va a tener bajo la mira.

—Tranquilízate Bi —le digo intentando calmarla—. Tienes que hacer los ejercicios de respiración.—le recuerdo.

Mientras hace sus respectivos ejercicios me acerqué a Ed que se mantenía quieto en una esquina de mi habitación.

—En parte tiene razón Terry.

— Lo se pero necesitamos seguir investigando—le recuerdo a lo que él como respuesta asiente.

—Por ahora mantengamonos alejados de todo lo que tenga que ver con el proyecto DEFG— dice de lo más tranquilo y despreocupado.

Era lo que debíamos hacer por ahora.

Pero la verdad eso sería más difícil ya que nosotros formamos parte de el.

...

Mi mirada estaba completamente en el cielo estrellado que se apreciaba a través de la ventana. Recuerdo que observarlo era una de las cosas que más me gustaba de pequeño.

Derrepente una estrella fugaz se hace presente causando una sonrisa en mi rostro y un sentimiento de satisfacción se hizo presente.

De pronto una mano llega hasta mí hombro dándole una pequeña caricia para después sonar una voz para mí familiar.

—¿Terry pediste un deseo?— dice mi madre.

Cómo por arte de magia todo el ambiente se torna triste. Algo dentro de mí decía que de nada serviría tal deseo ya que nunca se haría realidad.

Estaba a punto de responder cuando un estruendo sonó haciéndonos sobresaltar a mi madre y a mí.

A diferencia de mí, mi madre giro para tener la misma discusión de siempre y yo como el niño que era simplemente cerré los ojos para intentar contener e ignoral escozor en mis ojos.