Bon Appetit.

Capítulo 82: La bruja y el humano

Ante las palabras de Sarah, Gerald torció su expresión y susurró en voz baja.

"¿Con humanos?."

Después de escuchar el odio en su voz y expresión, Sarah se amargó. Sabía por qué Gerald odiaba a los humanos. Elanya murió a causa de un humano que traicionó su fe. Pero los tiempos ya estaban cambiando. No estaba bien vivir escondidos por el bien de sus descendientes y el futuro. Al menos, eso era lo que ella pensaba antes de irse.

"¿No te gusta?."

"No. Esa es una idea terrible. ¿No sabes cómo son?."

Mientras tanto, Luana ya estaba llenando más de la mitad de su canasta grande. Sarah la miró y habló con Gerald. No quería que él lo entendiera de inmediato.

Tomó tiempo para que alguien entendiera lo que estaba rechazando. Así que quería que escuchara esta historia y pensara en ella ahora.

"No existe el mal absoluto en el mundo. Es una pena para Elanya, pero tenemos que ir más allá".

"No, el mal absoluto existe. Y eso es humano".

Sara estaba un poco sorprendida.

'Ah, Gerald ha estado tan profundamente herido todo este tiempo.'

Pero sin saber que estaba un poco decepcionada consigo misma.

"Gerald".

Entonces, en el momento en que volví a hablar con Gerald, Luana gritó.

"¡Hecho!"

Finalmente, la canasta grande estaba llena de comida.

Parecía que necesitaban continuar la conversación más tarde. Sarah sonrió y se acercó a Luana.

***

El lote baldío donde se alojaba el Ejército Imperial temprano en la mañana estaba cubierto de niebla. Y los tres se escondieron a través de esa niebla, donde era difícil ver ni siquiera una pulgada adelante.

'¡No puedo ver!'

Luana caminó a través de la niebla con una canasta pesada y miró perpleja. Sarah y Gerald caminaban tranquilamente, pero Luana no sabía qué era qué, por mucho que lo mirara.

Mientras caminaba así, de repente se aligeró el peso de la canasta. Lo miró por si se le caía sin darse cuenta, y Gerald miraba a Luana justo a mi lado.

"Yo te lo guardaré".

"Gracias."

"No lo menciones".

Sarah, que los miró a los dos con una mirada feliz, pronto agitó su dedo en el aire.

"Veamos, debería estar por aquí".

Sarah, la bruja del espacio, pareció ver algo que Luana no pudo ver.

Siguió a Sarah, y había una pequeña choza al final del camino. Dos caballeros están custodiando el exterior. Pero cuando Gerald agitó su mano, los dos cerraron rápidamente los ojos y colapsaron en el acto.