004 • La pieza faltante.

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Mérida se encontraba recogiendo algunas flores para decorar las trenzas sueltas de Rapunzel, ambas en un claro del bosque sobre una manta.

Habían pasado cerca de 4 semanas desde que Mérida llego, y estuvieron buscando todas las respuestas posibles de lo que sucedía.

Intentaron que saliera, que se conectara 20 incómodos minutos con el bosque, comunicarse con alguien fuera e incluso Jack intento volar con Mérida hasta lo más alto. Todo fallo.

- ¿Hiccup siempre fue así de serio? - Mérida llego con Rapunzel, empezando a decorar su cabello.

Rapunzel vio a sus dos amigos que estaban a varios metros de ambas. Jack parecía apostar con Hiccup que podría pasar por la barrera de neblina con la cabeza e Hiccup le recordaba que los espíritus se podían lastimar.

- Suele serlo con los recién llegados, con Jack tardo varios años en acostumbrarse. Y ahora míralos.

Mérida vio como Jack corrió a la barrera y está como siempre, lo impulso dentro nuevamente, haciendo que se golpeara contra un árbol.

- Fue difícil para él, es posiblemente el que más recuerdos tiene... Era hijo del líder de su tribu, Hic murió cuando su padre estaba enfermo. No sabe qué sucedió.

- ¿Hijo del líder?

- Algo parecido a un príncipe, creo que se llamaba Jerk, o Yerk...

- Se llamaba Berk. - Comento Hiccup, quien había aparecido a un lado de ambas con los brazos cruzados.

- ¿Berk? La tierra de los dragones...

Hiccup funcia las cejas, intrigado por ese nombre.

- Estudiaba eso con mi madre. - Explico Mérida. - Fue una tierra antigua donde habitaban con dragones, el hijo del líder hizo esa alianza hace tiempo.

- ¡Fuiste tú, Hic! - Rapunzel se puso de pie, emocionada.

- No recuerdo eso... ¿Sabes qué paso con Berk?

La sonrisa de Mérida se borró, Berk cayó pocos años después de la caída de Arendelle. Dijeron que los dragones consumieron el lugar, pero al haber sido hace siglos no sabían concretamente que fue.

- Lo siento, Hic. - Mérida le vio con tristeza.

- Está bien... fue hace mucho, mi familia está muerta de seguro. - Hiccup se encogió de hombros.

- ¡Hic! ¿Y si lo hago de cabeza? - Jack llamo a su amigo de lejos.

- Veré que no nos quedemos sin espíritu de agua en este milenio. - Hiccup se despidió.

Mérida vio de reojo a Rapunzel, quien sonreía mirando a Jack dándose un golpe contra la muralla de neblina.

- Por ciertooo, estas semanas he visto que ves mucho a Jack, ¿te gusta?

- Oh, no, es... somos amigos, hace unos 800 años.

- Eso suena depresivo. - Dijo Mérida.

- No, es solo que... - Rapunzel se volvió a sentar, acariciando su cabello. - Además de ser los espíritus del agua y la tierra, también somos del invierno y la primavera. No podemos estar juntos, no nosotros.

- Oh...

Las chicas se distrajeron un momento más, hasta que llego la hora de comer y Rapunzel dejo un par de frutas y verduras sobre la manta.

Jack e Hiccup se acercaron, y el primero tomo una uva para comerla.

- Pensé que no necesitaban comer. - Menciono Mérida, comiendo una naranja.

- Oh, no necesitamos. Pero está rico. - Dijo Jack.

Mérida se debió acostumbrar a no comer carne, pues no había ningún animal por ahí, y aunque lo hubiera, el bosque no les dejaría comerlo.

- Eh recorrido este bosque de pies a cabeza estas semanas, pero... ¿Por qué no puedo ir a las cuevas? - Pregunto Mérida.

- No es que no puedas ir, pero es aterrador. - Dijo Jack, empezando a volar boca arriba.

- Hay muchas leyendas aquí, y en ese lugar se dice que había un quinto espíritu. El espíritu de la oscuridad. - Empezó Rapunzel.

- Pero hace 999 años, los anteriores espíritus del bosque fueron destruidos por ese espíritu. Y ante la muerte de esos espíritus, la oscuridad se extinguió.

- Esperen... - Mérida proceso la nueva información. - ¡Ohhh, esperen! 999, fue la fecha en la que el reino de Arendelle cayó, los espíritus enloquecieron y destruyeron el reino.

- No éramos nosotros, los espíritus que destruyeron el reino eran nuestros antecesores. - Explico Hiccup.

- Esperen, los que destruyeron el reino eran otros espíritus. Y fue por qué murieron, ellos no quisieron hacerlo.

Los tres espíritus asintieron.

- Y aún no sabemos que te trajo aquí, pensamos que eras el nuevo espíritu de fuego. Aún no tenemos uno, pero pues... - Hiccup dudo en continuar.

- No soy espíritu, ni humana, al parecer.

Rapunzel tomó su mano con una sonrisa, los tres habían sido un buen apoyo para que no colapsara esos días.

- Buscaremos la solución, Mer.

- Mientras más pronto, mejor. - Decía Hiccup.

- Hiccup Amargado Amir hablando. - Bromeo Jack.

- No soy amargado.

- Ni soy imirguidi. - Jack hizo voz infantil.

- ¡Raps! - Hiccup se quejo.

- Llámale a mamá.

Mérida vio aquella discusión con diversión, comiendo las verduras crudas y riendo.

- Parecen pareja de casados. - Dijo Mer.

- ¡Me quedo con la niña! - Grito Jack, acercando la cabeza de Mérida a su pecho con posesividad. - Su madre Hic no es adecuada para su crecimiento.

- ¡Oh! ¿Puedo ser la tía? - Los ojos de Rapunzel brillaron.

- Mi bella Solecito, ¡claro que sí! - Jack soltó a Mérida, para ir a abrazar a Rapunzel.

- Jack, con cuidado. - Hiccup alzo ambas manos.

- Lo sé, lo sé. No hielo. - Jack le dio un beso en la mejilla a Rapunzel antes de apartarse.

Mérida se dejó caer al suelo, alzando una fresa.

- ¿Puedes congelarme esta fresa?

Jack se puso de pie, viendo de reojo a Hiccup ponerse frente a Rapunzel y toco la fresa. La fruta se congeló al instante, y procedió a comerla.

- ¿Quieren ir al lago? - Rapunzel salto en su lugar.

Mérida se puso de pie con rapidez, empezando a correr hacia el lago, pero Jack no tardo en ir detrás de ella entre empujones.

Hiccup y Rapunzel vieron como se alejaban, y al estar algo lejos, Rapunzel borro su sonrisa y se giró hacia Hic.

- ¿Cómo fue el recorrido de la mañana? - Rapunzel pregunto.

Hiccup le indico con la cabeza hacia un lugar, fueron pocos metros y el chico movió unas hojas.

Rapunzel ahogó un gemido, la tierra de ese lado se empezaba a poner de un color gris opaco.

- Llego hasta aquí... - Rapunzel vio con dolor los árboles marchitos, acercándose y tocando uno. - No puedo hacer nada por ellos.

- Ha avanzado más desde que Mérida llego, Punz. Si queremos salvar el bosque debemos tener el cuarto espíritu.

- ¿Qué quieres decir? - Rapunzel se giró a verlo.

- Debemos asesinar a Mérida.

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Espero les guste, y no sea tan confuso, jsjs. Cualquier duda pueden preguntar. ♡

❛❛ Elements ❜❜ 〈 The Big Four 〉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora