Esos omegas

~[CAPITULO 8]~

Wei Ying soltó un largo suspiro de aburrimiento.

Miro con pesar la pila de pergaminos que esperaban ser acomodados. Luego de ser atrapados terminado una pelea (si es que puede llamarse eso a la golpiza unilateral que dieron) fueron llevados al salón de castigo mientras los alfas que golpearon fueron llevados con el sanador, una vez en el salón de castigo QiRen les lanzo una larga letanía de regaños que paso el toque de queda. Cuando fueron enviados a su habitacion les hizo saber que al día siguiente les pondrían un castigo. 

Y fiel a su palabra así fue. Sin embargo no fue el mismo castigo de copiar las reglas, claro que no, Lan QiRen se puso creativo en esta ocasión.

A Jiang Cheng lo puso como su asistente, lo tenia de un lado a otro y muchas veces lo ponía a revisar y calificar las evaluaciones que asignaba. Mientras a el en sus ratos libres lo pusieron a cargo del almacén, a desempolvar pergaminos viejos, leer cada uno y etiquetarlos según su tipo y si había alguno que se veía demasiado viejo debía transcribirlo a un nuevo pergamino. 

Los alfas discípulos luego del testimonio de Huaisang y Wen Ning también recibieron un castigo por ir al ala Omega, fueron golpeados con las tablas de castigo y debían copias las reglas todos los días durante tres semanas cinco veces, además que estarían restringidos para ir de sus habitaciones a clase y de clase a su habitaciones.

—¿Que mal hicimos? — se quejo en voz alta mientras ponía un pergamino sobre otro

—Eso no va ahí. 

Se sobresalto y miro sobre su hombro, se sorprendió de ver al segundo jade en el umbral. Frunció el ceño y regreso a su deber, ignorando la presencia del Lan. 

—Wei Ying.

Escucho el llamado, pero lo ignoro y empezó a tararear una canción que su shijie suele cantar.

—Wei Ying.

Se rasco un oído y subió el tono de su voz.

—Wei Ying. 

Camino por el lugar colocando varios libros en estanterías, escucho los paso de Lan Wangji detrás de el pero siguió fingiendo no notarlo.

Se detuvo frente a una estantería alta, no tenia problema en alcanzarlo, solo debida estirar los brazos, sin embargo, una mano ajena se coló en su trabajo y tomo los libros que iba a acomodar y se ocupo de ello. Volteo a mirar al Lan con una fingida mueca de molestia, se aseguro de copiar la expresión de Jiang Cheng lo mayor posible. 

—No necesito tu ayuda, segundo maestro Lan. — hizo amago de girarse, pero la voz del alfa lo detuvo

—¿Wei Ying esta molesto conmigo? 

Cualquiera que lo escuchara pensaría que en realidad no le importaba por lo seca que sonó su pregunta, pero esas semanas persiguiendo a Lan Wangji no han sido en vano. Pese a que lo negó innumerables veces a su hermano que le gustara el segundo jade, a la hora de la verdad se había sentido atraído desde la primera vez que lo vio, por ello había invertido tanto de su tiempo en tratar de acercársele, había estado atento a sus acciones y las pocas palabras que tenia para decir.

No era una novedad descubrir que Lan Wangji es un hombre de pocas palabras, sin embargo, tiene fuertes convicciones y esta fuertemente arraigado a las reglas de su secta, es por ello que no tratara de disimular si algo le desagrada o fingirá interés en algo cuando en realidad no le importa -de alguna forma le recordó a su shidi, aunque Jiang Cheng tenia una forma mas ruidosa y notable- es por ello que sabe que la pregunta del Lan, aunque no lo parezca, viene de completo interés. 

Soltó un suspiro. No podía con aquellos ojos dorados que lo ven fijamente. 

—No es nada, Lan Zhan. Solo no estoy de animo — se encogió de hombros