[UNO]

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Hace ocho años.

—No es una cita a ciegas, solo quiero que conozcas a un amigo —Minseok insistió.

—No tengo tiempo para eso Min —fue la respuesta que Baekhyun le dio.

—Solo es una cena y no estarán solos, yo y otros amigos estaremos ahí, vamos Baekhyun. Di que sí.

No mintió al decir que no tenía tiempo, además de eso, tampoco tenía dinero, no para divertirse. Sus padres le proporcionaban lo suficiente para existir, es decir, vestirse, comer, transportarse a la universidad, rentar un pequeño cuarto, etcétera, otros gastos debían ser planificados con mucho tiempo de antelación. Desde siempre lo había hecho, en la preparatoria Baekhyun jamás fue a divertirse después de clases con sus amigos ni aceptó todas esas invitaciones. Vivia reprimido, solo su inseparable mejor amigo le daba un poco de color a sus dias, pero no era suficiente para colorear un cielo. Menos ahora que se había mudado a otra ciudad y apenas se hablaban.

Como adulto joven, Baekhyun continuaba viviendo con las mismas restricciones de su adolescencia, porque así se había acostumbrado y era lo único que sabía hacer bien. No lo decía en voz alta, pero le causaba satisfacción y alegría cuando su madre se alegraba que aún tenía un poco de dinero o que podía esperar un día más para darle.

Salir con su compañero y los amigos de su compañero no le parecía buena idea, pero no le gustaba decirle siempre que no. Minseok era tan amable que temía que un día de repente ya no le dirigiera, por cansarse de tanto insistir.

—Será divertido, estoy seguro que mi amigo te agradará porque he notado que tienen muchas cosas en común —añadió.

—¿Cómo cuáles? —quiso saber, solo por preguntar, tampoco quería meterse en un noviazgo, era mucha presión y responsabilidades para él.

La gran carga que significaba la universidad y que su futuro dependía de él era suficiente para su triste vida.

—Son bastante obstinados —dijo. 

—No digas más, por favor.

—Solo si aceptas ir.

—La próxima semana tenemos una evaluación.

—Te la pasas estudiando, se que es para mantener tu beca pero de igual manera debes cenar, ¿no es así? Y si tienes alguna otra preocupación, yo te invito, puedes elegir todo lo que se te antoje, solo acepta, ¿si? ¿Puedes?

Siempre le dolía el corazón al decirle que no. También pensaba que si le decía por lo menos una vez todo podría cambiar y esa preocupación inmensa desaparecería, ¿o no?

—Preocupación como tal no, pero llevo un plan estricto.

—¿No quieres divertirte un rato?

En realidad si, necesitaba hacerlo, reconocía lo mal que había estado viviendo su vida. Quería cambiar pero al mismo tiempo no quería hacerlo por miedo. Aceptó y se arrepintió al instante, Minseok no se dio cuenta. 

Más tarde Minseok fue a buscarlo a su cuartito y en su carro lo llevó al restaurante, cuyo lugar jamás había visitado, Baekhyun tragó gordo al ver ese lugar tan elegante, estaba seguro que toda su mesada del mes se iría con un vaso de agua y un platillo. Muchos de sus compañeros provenían de familias adineradas y asuntos como estos no les causaba ninguna preocupación. Era genial que pudiera mezclarse bien, de alguna manera, nadie lo discriminaba por ser becado, había corrido con suerte, en todo caso, sólo existían ciertas personas que no le hablaban para nada, aun así, podía llevar una vida universitaria tranquila.

Se guardó sus comentarios y congeló una sonrisa ligera en su rostro para no arruinar el ambiente. Ya había tres personas sentadas cuando llegaron y tuvo que presentarse antes de ocupar una silla. Demasiado para el introvertido de menor estatura.

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