Te adoro | Edwina y Antonio |

Welcome to the Show

Gaceta de la Alta Sociedad | Año 1818 | Número 6 | Septiembre

Querida Ton

Queridos lectores, es un honor presentarles a la resplandeciente Señorita Edwina Sharma, una joya cuya luz eclipsa las noches más estrelladas. Con su gracia incomparable y aplomo majestuoso, la Señorita Sharma se alza como un ícono de la alta sociedad, atrayendo las miradas y los suspiros de caballeros y damas por igual.

En recientes acontecimientos, nuestros ojos atentos se posaron en la Señorita Edwina durante su visita a la propiedad campestre de los estimados Bridgerton. ¿Podría haber ocasión más propicia para una declaración de amor? Bajo la caricia del sol de verano y en el escenario bucólico de la campiña inglesa, las circunstancias parecen haber sido tejidas por las mismas musas del romance.

Damas y caballeros, en medio de este idilio que parece haber sido tejido por las mismas hadas del amor, no podemos evitar preguntarnos si una propuesta nupcial está en el horizonte. ¿Podría haber un momento más propicio para que el Vizconde Bridgerton se arrodille y ofrezca su corazón y mano a esta dama radiante? Los rumores y especulaciones llenan los salones y las conversaciones íntimas, mientras aguardamos con anticipación el próximo capítulo de esta historia de amor.

Queridos lectores, como testigos de estas intrigas galantes, les instamos a mantener sus abanicos listos y sus oídos atentos, ya que las noticias del futuro prometen una paleta de emociones y sucesos irresistibles. Los secretos y las sorpresas de la alta sociedad están destinados a dejarnos absortos, y no hay duda de que la Señorita Edwina Sharma será la estrella más radiante en este escenario deslumbrante.

Con los ojos bien abiertos y la pluma en mano,

Lady Whisteldawn

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Edwina

El latido apresurado de su corazón era como el eco de una melodía arrebatada, una sinfonía de emociones que se elevaba como un susurro urgente en su pecho. Edwina, presa de su propia excitación, avanzaba por los pasillos con una urgencia velada, agradeciendo en silencio la soledad que la rodeaba. El peso de su secreto amenazaba con escapar de su ser, pero la determinación guiaba sus pasos hacia el destino que había elegido.

El camino hacia su habitación parecía extenderse como un sendero eterno, pero finalmente, su ansiado refugio estaba ante ella. Al posar su mano temblorosa en el pomo, la joven reunió su coraje y abrió la puerta con una suavidad apenas perceptible. La figura de Kate yacía plácida en la cama, las sábanas susurraban con cada respiración constante. Edwina dejó escapar un suspiro contenido, la tranquilidad de su hermana le brindó un bálsamo para sus nervios tensos.

El umbral de la habitación la recibió en su abrazo silencioso, permitiéndole deslizarse con la destreza de una sombra hacia el interior. Su mirada se posó en la figura de Kate, su rostro sereno en el reposo del sueño. Las sábanas revueltas parecían dar la bienvenida a Edwina, aunque el gélido toque de la noche parecía reprenderla por su tardía llegada. Sin embargo, una sonrisa temblorosa danzó en los labios de Edwina, la recompensa de su intrépido peregrinaje nocturno.

Las oscuras horas de la noche habían sido generosas con ella, permitiéndole un momento crucial con el Sr. Bridgerton. Recordó sus cejas entrecruzadas, su mirada penetrante cuando ella había confesado sus sentimientos más profundos. "No puedo prometerte amor, señorita Edwina", sus palabras resonaban aún en su mente, como un eco dolorosamente sincero. Pero Edwina se había mantenido firme, había proclamado su posición con una valentía que apenas reconocía en sí misma. "Aprecio tu sinceridad, Sr. Bridgerton, y no he olvidado sus palabras en casa de los Danbury", su voz resonaba con determinación. "Puede que mi corazón se incline hacia ti, pero no renunciaré al deber que tengo para con mi familia. Mi amor nunca será una negación del sentido común. Quizás nunca me ames como afirmas, pero encontrarás alegría y satisfacción en nuestro deber compartido".

Y así, con sus acciones osadas, Edwina había forjado una oportunidad que se desenvolvía ante ella. El Sr. Anthony Bridgerton, un hombre cuyas palabras habían perforado su corazón, había prometido hacerla su esposa. En ese instante, en el silencio de su habitación, Edwina no pudo evitar que una sonrisa tímida y radiante se dibujara en su semblante. Las complicaciones del corazón y el deber se entretejían en una danza apasionada, y ella estaba decidida a ser la protagonista de su propio destino.

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Hola a todos los que les guste esta pareja o quieran algo diferente, en mi opinión ellos podrían ser una pareja admirable, si el matrimonio hubiera continuado, pudo haber sido un romance lento pero bueno está historia tendrá cambios, y se desarrolla antes de la boda

Bueno espero les guste esta fic, y les hago recuerdo que también otras historias de ellos y si les gusta Crepúsculo pueden pasar por mi perfil

T.P.W.K

All love 💚✌🏼