ESPERANDO POR TI (Predator/Yautja x Lectora)

30. UNA SORPRESA INESPERADA

<DOS MESES Y MEDIO DESPUÉS>

_____ estaba recostada en el pie de un árbol mientras tomaba una siesta, la brisa templada del viento era demasiado agradable y la ayudaba a tranquilizarse un poco.

Eso hasta que Minerva interrumpió su momento de paz gritándola para llamarla por la visita que trajo.

_____ se sentó con calma y vió a Minerva acercarse con una hembra yautja. Ella la reconocía era T'leil la hembra que estaba con su cachorro en la Villa.

Las hembras se acercaron a _____ para conversar.

— ¿Otra vez durmiendo? — preguntó Minerva.

— No sabía que tomar una siesta era un delito. — respondió _____.

— Jajaja no pero debería serlo, con tantas siestas te volviste perezosa y hasta engordaste un poco.

— Ja ja ja si como no.

— Recuerdas a T'leil ¿Verdad?

— Sip, la yautja con un precioso cachorro que ví en la Villa. Hola, ¿Cómo estás? ¿Qué fue de tu cachorro?

— Pues estoy bien, me perdí la temporada de apareamiento por un momento. Jajaja mi cachorro me salvó de esa pesadilla pero para mi desgracia se apareció su padre y bueno tuve que hacerlo con él. Y mi cachorro bueno ya tiene edad para quedarse con Nana y las demás solo. — dijo T'leil.

— Entiendo.

— Como te comentaba _____ y yo la pasamos solas encerradas en nuestras casas ¿Verdad? — dijo Minerva.

— Ajá, fue aburrido.

— Sin nuestros machos no hay diversión y sabes a lo que me refiero.

— Es evidente... ¿Te ves diferente a la última vez que te vi _____? — preguntó T'leil a _____.

— Nop. No cambie en nada.

— Si cambiaste jajaja te ves más voluminosa.

— Te dije que lo perezosa le está cobrando factura. — dijo Minerva.

— Estás con un poco de panza  _____. — dijo T'leil.

— Que chistosas. Estoy así porque no tengo fuerzas para hacer nada, me siento cansada, con sueño, con hambre... Dios con mucha hambre podría comerme un cerdo entero.

— Jajajajaja. — se rió Minerva.

— Cualquiera pensaría que estás preñada del Comandante. — dijo T'leil mientras Minerva y _____ la miraban calladas y sorprendidas. — ¿Por qué las caras de sorpresa? Un bebé yautja en gestación suele fatigar mucho a la madre y por como describes tus síntomas y tu apariencia pareces estar preñada.

— O por Dios es cierto, cómo no lo he notado. — dijo Minerva.

— No creo estar preñada sólo un poco panzona, okey.

— Tus senos parecen hinchados. — dijo T'leil apuntandola.

— Gran observación.

— Pues eso no tiene nada que ver, siempre las he tenido así. — dijo _____ excusándose.

— Tu vientre esta un poco sobresaliente.

— Es una panza llena de grasa, me la paso comiendo gran parte del día.

— ¿Y de dónde sacas la comida si tu macho no se encuentra aquí?