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Confesiones.

Taehyung no sabía que le pasaba a sus compañeros, algunos eran felices con algunas cartas en sus manos mientras hablaban con sus amigos y algunas de las chicas se susurraban algunos secretos pero todos sabían que hablaban de las cartas. Pareciera que todos tenían una fiebre con dichos objetos todos la recibían algunos en sus manos, escondidas en sus cuadernos, puestas en las mesas o incluso le piden el favor al amigo del destinatario.

Taehyung no entendía cuál era la emoción que podría traer recibir un simple papel con palabras, algunos ni siquiera estaban bien decorados, era algo que no le molestaba en un principio pero cuando fue su turno de recibir una carta pudo entender muy bien ese sentimiento. Claro está era muy diferente a la emoción que presentaban los otros chicos y el conocia muy bien ese sentimiento que tenía tiempo sin sentir, pero el principal era enojo.

Delante de él estaba una tímida niña con las mejillas coloradas por la vergüenza, siempre fue tímida y nunca se atrevió a entregar la carta ella misma y tenía miedo de que se perdiera si la dejaba en su mesa como otras chicas lo hacían así que su mejor opción fue pedirle el favor al mejor amigo de Jungkook que prácticamente parecía su hermano para que le pasará la carta.

Taehyung sintió un malestar en todo su pecho cuando miro la carta todavía en las manos de la chica, no quería agárrala, pero al mirar los ojos suplicantes de la contraria decidió tomarla sin decir ni una palabra y la chica solo lo tomo como una afirmación a su favor así que salió casi corriendo del lugar aún muy avergonzada por hacer eso.

Pensamientos malos volvieron a aparecer en su mente después de mucho tiempo, no le gustaba esta parte de él, la que siempre pensaba egoístamente y la que no tenía buenas ideas como tirar, quemar o romper esta carta.

Él estuvo callado todo el día, no quería hacer nada, si no hacía nada no pensaba en nada y eso era mejor, así callaba esa parte mala de él.

Estaba sentado al lado de Jungkook mientras veían clase pero él no prestaba atención solo se mantuvo jugando con los dedos del otro y su rostro pegado a la mesa observando como su amigo escribía con la otra mano, parecía no importarle estar con solo una mano para escribir y eso le gustaba a Taehyung, Jungkook nunca le negó nada hasta la más minima cosa.

Colocó la palma contraria contra su rostro frotándose en esta para tratar de apaciguar su malestar en el pecho, se sentía mal por ocultar la carta pero sabía que se sentiría peor si la entregaba y Jungkook aceptaba estar con ella, él tenía este pensamiento porque era el resultado que más veía y no quería que eso sucediera con su amigo.

Apretó con más fuerza la mano contraria sin querer soltarla, haciendo un puchero inconscientemente y cuando Jungkook volteo a verlo, dejo de lado la clase para recostarse también en la mesa muy cerca del rostro de su angelito, dejo un pequeño beso en su frente para relajar el pequeño ceño que apenas era visible y que el otro hacia siempre que pensaba en algo que le molestará.

─ ¿Qué tienes TaeTae? ─ Sabía que algo molestaba a su puro angelito cosa que no le gustaba, su pequeño no debería tener ningún problema.

Taehyung solo pudo observarlo sintiendo peor el dolor en su pecho al pensar que podría hacer eso con esa chica, no le gustaba la idea que besara el rostro de alguien más o que cumpliera con cualquier capricho que ella quisiera así como Jungkook hace con él, en su mente su conejito solo debería ser así con él y nadie más así que se animó a decir.

─ Jungkookie ¿Tú me quieres mucho verdad?

─ Yo te amo mucho TaeTae ─ Respondió sin titubear pero con la duda del por qué su bebé le preguntaba esto.

Fue allí donde sintió los conocidos conejitos corriendo dentro de él que tanto le gustaba sentir pero que solo su mejor amigo podía hacer que aparecieran.

─ Kookie se sintió muy lindo aquí ─ Señaló su estómago sin dejar de sonrojarse ante la atenta mirada de Jungkook ─ Me gusta sentirlo.

Aunque el contrario no sabía a lo que se refería su pequeño, si estaba seguro de que le gustaba esa sensación al otro por las tantas veces que ya se lo había dicho en otras oportunidades.

─ Me alegra que te guste, siempre deberías sentirte bien angelito ─ Eso sí lo tenía claro, su bebé solo debería ser felíz.

─ Si me amas mucho solo estaras conmigo ¿No? Así como me dijiste que hiciera yo ─ Le pregunto con un brillo en los ojos esperando la afirmación con mucha esperanza.

Si solo está con él no tendría problemas de entregar la carta, aunque el pensamiento de tirarla le seguía gustando más o quemarla así ya no existiría la posibilidad de que la viera por accidentes.

─ Bebé yo solo estaré contigo ─ Retiro su mano de la mejilla para dejar un pequeño beso sin querer retirarse, solo lo hizo cuando restregó su rostro en su suave piel quedando satisfecho después de un tiempo ─ No tengo a nadie más importante que tú y lo sabes, solo estoy contigo, eres mi mejor amigo, eso nadie lo puede cambiar.

─ Entonces no puedes amar a nadie más ¿Verdad?

─ No, solo a tí.

─ Tampoco puedes tener otros amigos aparte de los que tenemos ¿Está bien?

─ Más amigos es menos tiempo contigo así que no, no tendremos más amigo ─ Acaricio su mejilla con el pulgar ya que su angelito volvió a colocar su mano allí, a su bebé le gustaba el contacto y el no se quejaba de eso ─ Ya tenemos muchos amigos.

─ Chicas tampoco ─ Se apresuró a seguir ya llegando al punto que quería ─ No puedes tener novia o amigas ellas quitan mucho tiempo ─ Volvió a aparecer su pequeño ceño fruncido junto con el puchero que se había calmado anteriormente ─ Ellas quieren mucha atención y eso no está bien Kookie ─ Y menos si se robaban la atención de su amigo.

Pero Jungkook nunca pensó en las chicas, siempre se aseguró de que su bebé no se acercará a los demás chicos pero nunca pensó en el peligro que representan las chicas y sus impuros pensamientos hacia los chicos, no lo pensó hasta este momentos dónde todas se estaban confesando.

Porque sí, ya él había recibido más de una carta rechazando cada una de ellas sin siquiera mirarlas, no tenía tiempo para decir palabras de consuelo cuando todos sus pensamientos estaban en interceptar cada carta con destino a su amigo, lo cual lo tenía muy ocupado ocultando todas las que llegaban a su cuaderno o escritorio logrando tomar cada una de ellas sin que su bebé se diera cuenta un trabajo difícil ya que el encanto de su pequeño no solo le gustaba a él si no a muchas chicas e incluso algunos chicos.

Lo cual lo tuvo ocupado por tanto tiempo que se le olvidó por completo prohibirle a su bebé tener contacto con ellas o decirle que no puede tener amistad con ninguna, todas tenían la mente envenenada para él, nadie era tan puro como su pequeño angelito.

─ Tampoco puedes tener ninguna amiga TaeTae, ellas no son buenas, creo que están un poquito locas ¿No lo crees? ─ Jungkook vio la oportunidad así que la aprovecho dejando una mala impresión de todas ellas, solo para asegurar que cualquier encuentro futuro tenga un mal comienzo.

─ Siii ─ Respondió sin dudar ya teniendo una mala impresión de ellas por culpa de esa chica de la carta, sintió un alivio en su pecho al escuchar las palabras de su amigo ¡A él tampoco le gustaban las niñas! Era una buena noticia para el dolor en su pechito ─ No podemos acercarnos a ellas, son muy locas Jungkookie.

Los dos asintieron con grandes sonrisas, sintiendo alivio de eliminar cualquier amenaza que pudiera venir mientras el otro no estaba cerca.

Esa misma noche Taehyung rompió y enterró la carta para asegurarse de que nunca fuera encontrada, ahora sí su pechito no tenía ningún mal sentimiento, pudo dormir sin ninguna culpa ya que dentro de él Jungkook solo podía ser suyo en todos los aspectos así como él era de su mejor amigo, sin pensar mucho en sus propias palabras se acostó a dormir en su cómoda cama.




Me gusta mucho este Taehyung
(⁠。⁠♡⁠‿⁠♡⁠。⁠)
💬 Actualizaaaaaaaa
Yo: ooowwww quiere seguir leyendo
Mi mente: escribe entonces pendeja
Yo: si, estoy pasada de floja
Así que aquí está el resultado
(⁠.⁠ ⁠❛⁠ ⁠ᴗ⁠ ⁠❛⁠.⁠)

Solo Con Mi Mejor Amigo (Kooktae)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora