Harry Potter and the Silver Vixen

capitulo 78

27 de diciembre de 1995

Francia

Fue alrededor de una semana después de su boda y Fleur llegó a casa poco después de las tres de la tarde después de haber hecho compras todo el día. Dejó sus compras, aparentemente normales desde el exterior pero de hecho modificadas mágicamente para poder llevar todos los ingredientes para su cena de Navidad en dos bolsas pequeñas. Harry abrió casi tan pronto como ella tocó, viéndose especialmente guapo con una camisa verde oscuro y pantalones negros.

"Joyeux Noel, Harry".(Feliz Navidad)

"Feliz Navidad", respondió él, tomando sus bolsas. Ella lo siguió mientras los llevaba de regreso a la cocina. "Wow. ¡Parece que trajiste todos los ingredientes para una verdadera fiesta!"

"Es la cena de Navidad, es como para ser especial". Estaba emocionada y un poco nerviosa, pero después de unos minutos la anticipación desapareció. Se sentía tan natural, cocinar con Harry. Mientras clasificaba los ingredientes y encendía el horno y la estufa, Harry sacó tazones y sartenes.

Pronto el pavo estuvo en el horno y la sopa hirviendo suavemente sobre la estufa. La voz de Harry provenía de la sala de estar, donde estaba colgando unos pequeños adornos que ella había traído. No tenían un árbol de Navidad, así que cintas y oropel colgaban de las esquinas de los marcos de los cuadros y las barras de las cortinas.

"Fleur, mira, está nevando otra vez. ¡Vamos a tener una blanca Navidad!"

Ella se unió a él mirando por la ventana; efectivamente, gruesos copos blancos caían del cielo nublado, y una capa de nieve fresca ya se había acumulado en el alféizar de la ventana.

"Vamos afuera."

Harry la miró.

"¿Qué hay de la cena?"

Fleur agitó una mano con desdén. Necesitaría al menos una hora antes de que comenzara con las verduras; la sopa solo necesitaba cocinarse y, por supuesto, el pavo tardaría un poco.

"Tenemos mucho tiempo para dar un paseo, estará bien". Fue a la puerta principal, poniéndose sus cálidas botas de invierno y mientras Harry agarraba su chaqueta. Tan pronto como él abrió la puerta, ella salió corriendo al patio en el frente de la casa, con la cara vuelta hacia arriba y la boca abierta para atrapar los copos de nieve que caían.

"¡Hey espera!" Harry la llamó, cerrando la puerta de la casa y poniéndose un gorro de lana.

Caminó hacia ella, y ella no pudo resistir la tentación de tirarle un puñado de nieve.

"Apúrate, viejo perezoso", le respondió ella. Harry rió, sacudiendo la nieve de su sombrero y quitándosela de la cara. De repente, su expresión cambió y le dio un escalofrío violento.

"Ugh. ¡Merlín, eso es frío!" Fleur se rió mientras desabrochaba frenéticamente su camisa por detrás, sacudiendo su chaqueta para tratar de sacar la nieve. Se tambaleó, frunciendo el ceño. De repente, él sonrió y recogió un puñado de nieve, arrojándolo en su dirección. Ella esquivó y arrojó un puñado hacia atrás, ignorando el frío punzante en sus dedos. Harry se acercó, recogiendo un poco más de nieve del respaldo de un banco. Sabiendo que estaba demasiado cerca para fallar, Fleur comenzó a correr hacia el refugio de un árbol cercano. A mitad de camino, resbaló en un trozo de hielo y sus pies resbalaron frente a ella. Hubo un momento espantoso en el que supo que se estaba cayendo, y luego, de repente, se sintió atrapada, sostenida. Fuertes brazos la levantaron de nuevo y ella miró a la cara de Harry, que estaba un poco preocupado pero sonriente.

"Cuidado, ahí," murmuró. Por un momento ninguno de los dos dijo nada, solo la abrazó, mientras la nieve caía a su alrededor.

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