Harry Potter and the Silver Vixen

capitulo 27

Mansión Potter

8 de junio de 1989

"¿De verdad tienes que ir Harry?" le suplicó Max Potter a su hermano.

Harry había estado en Potter Manor durante una semana.

En realidad, fue un momento bastante agradable, para ser honesto.

Había pasado gran parte de la semana en varias habitaciones poniéndose al día con su hermano y había sido sorprendente lo diferente que parecía.

Lily y James habían estado ausentes durante gran parte de la semana porque estaban ocupados con el trabajo en el ministerio.

Así que Harry había pasado gran parte de los últimos días charlando con su hermano y contándole todo sobre Hogwarts.

Fue impactante cuando quitaste la fama y el reconocimiento de ser el Niño-que-vivió y le hablaste a Max Potter, la persona como un niño normal, de lo ordinario que parecía ser.

Sin embargo, sus padres eran un asunto completamente diferente.

En las pocas ocasiones que habían estado en casa habían hecho bastante bien lo que habían hecho en el pasado, Ignorar a Harry Potter.

Admitiría que no esperaba que le preguntaran sobre todo lo que había estado haciendo. No sabían nada de lo que había hecho con sus amigos en el pasado o durante este verano.

Todavía le dolía un poco que no le preguntaran nada sobre cómo había sido su año o qué iba a hacer durante el verano.

Le había explicado a su hermano que iba a hacer varias actividades con sus amigos durante el verano. Max había estado aceptando lo que estaba haciendo y prometió no compartirlo con Lily y James, pero Harry aún podía ver que estaba triste porque su hermano se iba.

Con una punzada de dolor, Harry se dio cuenta de que si se despojaba del club de fans del chico que vivía, Max Potter era una persona muy sencilla sin muchos amigos de verdad.

Decidió que le enviaría a Max algo especial para su cumpleaños.

Finalmente, aunque el día de la partida de Harry había llegado.

Lily y James estaban trabajando y Max y Harry estaban parados en la entrada principal cerca de la chimenea.

"Lo siento, tengo planes para los próximos meses" explicó Harry a su hermano menor.

"Está bien", dijo Max con tristeza. "Diviértete".

"Tú también", dijo Harry y torpemente le dio un abrazo a su hermano antes de volverse hacia la chimenea.

Entrando en la rejilla, Harry tomó un puñado de polvos Flú y con voz fuerte y confiada lo arrojó en "Patterson Shop".

Pronto llegó a la tienda del Sr. Patterson.

Mirando a su alrededor y al no ver al hombre mayor, decidió mirar a su alrededor.

El Sr. Patterson salió de detrás de uno de los estantes.

"Harry" dijo viéndolo en la entrada "Llegas temprano".

"Sí", le dijo Harry, "no quería llegar tarde esta vez".

"Buena idea" Isaac asintió "Tienes tus cosas aquí".

"Se lo di a los elfos domésticos de Fleurs antes", dijo Harry.

"Está bien", el Sr. Patterson fue a uno de los estantes traseros y tomó una pipa muggle.

"Estás listo para ir", preguntó.

Harry asintió y agarró la tubería.

Luego pasaron por la maravillosa experiencia de viajar en traslador antes de llegar a una ladera ventosa.