Capitulo 23

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"Muy bien, quiero que ustedes dos se enfrenten."

"¿Espera qué?" Naruto parpadeó, mirando al hombre mayor confundido.

"Ya sabes, pelear, llegar a los golpes, sacarse los mocos el uno al otro", respondió Jiraiya uniformemente.

"Sé lo que es sparring", resopló Naruto. "¿Pero por qué Zero Two y yo tenemos que luchar entre nosotros?".

"¿De qué otra forma podría determinar por dónde empezar con tu entrenamiento? Necesito conocer todas tus capacidades, así que no tengas miedo de ir a por todas. Intervendré una vez que haya visto todo lo que necesito ver", habló sin rodeos el Sabio Sapo. Naruto estaba a punto de objetar hasta que sintió una mano en su hombro. Miró detrás de él y vio a Zero Two sonriéndole.

"¿Qué pasa, cariño? ¿Tienes miedo de mí? No te preocupes, ¡no muerdo!"

"¡Sí que muerdes!"

"¡Oh, vamos, cariño!" La roseta gimoteó. "Será divertido. Hace tiempo que no puedo soltarme. Esa escoria sonora de las preliminares ni siquiera fue un buen calentamiento." Naruto suspiró mientras la ágil chica rebotaba de un lado a otro sobre sus talones, prácticamente vibrando de emoción.

"Bien," Naruto finalmente cedió, ignorando el grito de júbilo de su amada mientras lanzaba una mirada molesta en su dirección. "¡Pero esta vez no caeré en ninguno de tus trucos baratos, sabes!"

"Todo vale en el amor y en la guerra...¡Querida~!"

"Sí, bueno, vamos a verte cantar esa misma melodía cuando te tenga pidiendo clemencia."

"Ooo, eso casi sonó como una amenaza, ¿sabes?

"¡Es una promesa!"

"Dios mío... es como ver a dos Kushinas peleando. Jiraiya se calló. "Está bien, está bien, guárdenlo para el campo de batalla. E intentad no mataros el uno al otro".

"No prometo nada", dijeron a coro los dos adolescentes mientras se miraban el uno al otro con la misma sonrisa.

"Vale, como queráis. Hacedlo", dijo Jiraiya con un gesto desdeñoso mientras se retiraba a una distancia más segura. "Vale... veamos lo fuertes que sois los dos".

"Neh Darling," Zero Two nos llamó mientras terminaba el último de sus estiramientos, atrayendo la mirada escéptica del rubio. "Me llevarás a comer dango después de que te patee el trasero, ¿lo sabes?"

"¿Oh? Alguien seguro está lleno de sí mismo," Naruto rodó los ojos antes de encogerse de hombros por la rigidez.

"¡Ara Ara~!" Zero Two sonrió satisfecho mientras torcía el cuello. "La última vez que lo comprobé, el marcador era 63-57 a mi favor ¿no?".

"¡Oi! 13 de esas victorias son porque hiciste trampa y sabes-"

"Neh Darling... ¡tu guardia está baja y'know~!"

El sorprendido rubio ni siquiera percibió el sensual susurro que resonaba en su cabeza, y mucho menos tuvo oportunidad de esquivar el ágil apéndice que se dirigía hacia su cara a escasos 3 centímetros de distancia. La rodilla de Zero Two se estrelló contra la cara de Naruto con astuta precisión, haciendo que el normalmente robusto adolescente se tambaleara hacia atrás. Sin perder un instante, la roseta se enroscó alrededor del torso de su amado y cambió su peso para golpearlo contra el suelo.

"¡Te atrapé!"

"Un golpe bajo..." Naruto resolló mientras luchaba por respirar. Zero Two estaba demasiado preocupada ahogándose en sus propios autoelogios y se quedó bastante sorprendida cuando su fundación de pelo rubio se derrumbó bajo ella en una columna de humo. "¡¿Eh?!"

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