Capítulo 5: Demasiados sentimientos desconocidos...

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Alan

Me despierto a las 6 de la mañana, ya que tengo que ir a la universidad para prepararme. Voy a dar un discurso de apertura a los alumnos de cuarto de la ESO, y luego mis hermanastros y otros estudiantes les darán una charla sobre la responsabilidad de la universidad y bla bla bla... Me he esforzado mucho ya que quiero impresionar a mis profesores.

Además, me ha venido de perlas que sea hoy, porque nos han dado fiesta en el trabajo toda la semana debido al aniversario y lo bien que salió la fiesta. Me visto formal y todo de negro, nunca uso colores vivos. No pretendo destacar ni ser sociable. Me peino y pienso que hoy va a ser un día mejor, sin recordar mierdas del pasado y subiendo nota media. Sintiéndome optimista para mi gusto, bajo a desayunar.

-Vaya, qué elegante, veo que te has vestido decente para la ocasión-me dice Henry-.

-Qué guapo-dice la pequeña Helen entrando a la habitación en brazos del otro gemelo, Harry-.

-Mm..-me limito solo ha asentir y tomar mi zumo-.

-Alan hoy te llevamos nosotros, el bus es muy caro y te vas a quedar pobre-se ofrece uno de mis hermanastros-.

-¿Me he perdido algo? ¿Quieres ayudarme en algo? ¿Dónde esta la puta cámara oculta?-levanto una ceja y todos se ríen.-

Harry coge las llaves del coche y nos montamos con la pequeña incluida. Sigo sin entender su gesto amable y notablemente falso que acaba de tener.

Cuando vamos a aparcar y salimos del coche, Henry me da a Helen.

-Tienes que cuidar de la pequeña mientras nosotros preparamos el escenario y todo. Cuando sea tu turno ya nos ocuparemos nosotros-y ambos se van medio corriendo-.

Me parecía bastante raro que me ayudaran y no me extraña nada. Iba a insultarles pero cuando he visto la mirada de la niña se me han quitado las gamas de hacerlo. Ella se porta bien conmigo, y a quién voy a engañar, puede que hasta me caiga bien, a nivel 1...

-Vamos a sentarnos anda...

-Vale-la niña me da la mano y entramos-.

Nos sentamos en unas sillas en el escenario esperando a que vengan los niñatos del instituto.


Paula

Me despierto y empiezo a vestirme, hoy vamos a la universidad así que decido arreglarme. Después de desayunar sola, como siempre me dirijo hacia la universidad en el bus. Cuando llego, soy la primera como siempre, no me gusta llegar tarde. Entro para ver si puedo hacer algo.

-Hola, soy una de las chicas que viene a lo del discurso, ¿puedo ayudar en algo? Llego pronto por lo que veo- me acerco al escenario-.

Entonces reconozco al chico de siempre, que no se ha dado cuenta de que estoy aquí y esta jugando con la que parece ser su hermanita pequeña. Y por primera vez le veo sonreír. Bueno, a sonreír me refiero elevar un poco las comisuras de los labios, pero es un gran progreso. Además le salen unos hoyuelos adorables, que le hacen ver amistoso y abierto, no como suele actuar.

-Por lo menos veo que eres simpático con alguien-sonrío y me acerco a él- hola pequeña- me agacho a la altura de la niña-.

En cuanto me ve frunce el ceño y se quita a la chica de su regazo. ¿Pero qué le pasa a este chico? ¿Tan mal le caigo?

-No estaba siendo simpático. ¿Que haces aquí? Sólo personas autorizadas.

Le enseño el pase y sonrío.

-Por lo que veo vas a tener que aguantarme todo el día-sonrío y vuelvo a mirar a la pequeña- ¿cómo te llamas preciosa?

-Maria Elena, pero llámame Helen-me sonríe abiertamente-.

Don't let me go...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora