-Maratón de verano- Capítulo 7: Dime una razón para alejarme.

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Paula
Me despierto y miro el reloj.
-¡Mierda llego tarde!
Salgo corriendo de la cama y empiezo a vestirme bajo presión, cuando bajo no hay nadie, como siempre, así que cojo dinero y empiezo a correr hacia el colegio.
De repente veo que un coche se para a mi lado y veo que se baja la ventanilla. Curiosamente el conductor está a la derecha. Oh no...británicos... Veo aparecer el rostro de un gemelo, el "simpático" creo.
-¿Permites que te lleve?-me pregunta sonriendo-.
-Si vas a conseguir que llegue en dos minutos sí- lo miro-.
-Adelante-me guiña el ojo y me invita a pasar-.
De acuerdo, tiene sonrisa bonita, punto para él.
Me monto en el coche y lo miro de nuevo.
-Aligérate por favor, no quiero llegar tarde mi último día...
Entonces ríe y me mira amistosamente.
-Como usted mande. Agárrate fuerte.
Acelera muy rápido y casi atropella a un peatón , pero llegamos al insti en dos minutos.
-¡Gracias, te debo una!- me bajo corriendo del coche y corro hacia adentro del instituto.
Oigo que me grita un: "Por supuesto que me lo debes" y eso me hace reír, que chico más raro, en el buen sentido.
Después de las clases, voy hacia mi casa tranquilamente, ¡por fin se terminaron las clases!
Pero cuando salgo veo al chico que me trajo, sonrío y me acerco a él.
-Creo que alguien me debe algo. ¿Qué tal si te invito a mi casa a comer helado?-dice acercándose a mi-.
-Mm.....-hago que lo pienso- me encantaría-sonrío de nuevo-.
-¡Estupendo!-hace algo parecido a un baile de la victoria y entramos al coche-.
Cuanto más avanzamos, más me daba cuenta de lo que iba a hacer: ir a casa de Alan, a comer helado, con su hermano. Aunque ¿qué me importaba a mi? No lo sé, pero pienso preguntarle a Harry sobre su misterioso familiar.
Y pienso hacerlo ahora mismo.
-Oye...- lo miro- Alan es un tanto raro ¿no?
Me mira levantando una ceja.
-Alan es gilipollas que es diferente-dice negando con la cabeza-.
-¿Por qué?- lo miro curiosa-.
-Siempre esta de mal humor y nunca quiere hablar con nosotros .Henry me contó que ayer, cuando tú yo estábamos hablando, hizo llorar a nuestra hermanita pequeña. Realmente no sé que coño le pasa en la cabeza, yo intento llevarme bien con él pero es imposible.
-Ya bueno...algo le pasaría antes de venir aquí ¿no? No creo que sea así porque sí...y cuando yo lo vi con tu hermana estaban muy bien...
-Pues al parecer sería un rato que le pillaste majo. No sé, pero no me gusta la gente así-se encoje de hombros-.
-¿Y tu no eres así?- lo miro sonriendo-.
-¡Me ofende que pienses eso! Yo soy buena gente, además de guapo-me devuelve una sonrisa juguetona-.
-Si si, guapísimo-río- bueno, cuéntame de ti.

-¿No te parezco guapo?-me hace risa al ver que está ofendido-.

-Si, eres todo un pivonazo- río con él-.
-Lo sabía. Y bueno ¿qué quieres saber de mí, querida Paula?
-Mmm....no sé...- sonrío- lo que quieras decirme, no sé ni si quiera cuántos años tienes.
-Tengo 19-aparca cerca de una heladería y me sonríe-.
-¿No íbamos a tu casa?- lo miro sonriendo-.
-Primero a comprar el helado. No te impacientes pequeña-.
No sé por qué pero no me gusta que me llame así. Eso es solo de... Alan ,él me lo dice, nadie más, así que le miro con mala cara.
-No me llames así por favor...
-¿Cómo?
-Pequeña...
-Lo siento si te he ofendido,no te volveré a llamar así-le miro asintiendo ya que parece que se siente culpable--
-No te preocupes- le sonrío y bajamos del coche-.
-Hola Triana. Yo quiero uno doble de chocolate-le pide a la chica de los helados-
Me fijo bien y es la chica que nos enseño la universidad con Alan, con la que se beso, su novia...
-¿Tú qué quieres Paula?
-¿Qué?- lo miro un poco perdida y me doy cuenta de que es para pedir- amm...un mediano de chocolate blanco.
Harry paga y me lo da. Cuando nos alejamos me mira preocupado.
-Paula...¿qué te pasa? Ahora mismo parecías querer matarnos con la mirada... ¿es por lo de llamarte pequeña? Lo siento de verdad -me coge de la mano-.
-No no tranquilo- sonrío- solo...una mala mañana...-suspiro- por cierto, ¿esa es la novia de Alan no? Es que los ví besarse en la universidad...
-¿Alan con novia?-empieza a reírse a carcajadas- eso ha sido buen chiste. ¿En serio les viste besarse? ¡ya tengo algo con lo que chantajearle!
-¡No¡ No por favor, no quiero que sea más borde conmigo de lo que ya es! Por favor no le digas nada, déjalo.
Mierda, ya le he liado, como se entere entonces si que dejará de hablarme.
Entonces mi amigo me levanta una ceja y entramos al coche.
-No le diré nada si me contestas a una pregunta . ¿A qué se debe tu interés por mi hermanastro?
¿Y ahora qué le digo? ¿Qué me gusta? ¿Realmente me gusta? No, no puede gustarme un chico así...¿o si? ¡Oh Dios! ¿!Qué mierda me pasa?¡ ¡Piensa rápido Paula, vamos! ¡Ya sé! La tienda.
-Trabaja para mi madre, y últimamente no para de meter a adolescentes que no son muy simpáticos con los clientes, simplemente cuido las cadenas que próximamente serán mías.
Me sonríe pícaramente sin creerse una palabra pero lo deja estar.
-Tiene sentido. Bueno ya hemos llegado a casa.
Bajamos del coche y entramos a su casa.
-Siéntate donde quieras, voy a ponerme cómodo. Ahora vengo.
-Está bien...- entro al salón y me quedo mirando las fotos de cuando eran pequeños, y me doy cuenta de que no tienen ninguna de Alan...qué pena...quería verle de pequeño...
Alan
Me despierto y veo que ya es por la tarde. Ayer me pegué toda la noche pensando en mis cosas y me dormí tarde. Bajo al salón sin camiseta y veo a la chica, Paula, comiéndose un helado. Me cago en la puta, aunque no me guste esa chica desearía ser ese helado.
Sin decirle nada me siento en el sofá de al lado y pongo la tele.
Se asusta al verme y se da la vuelta para mirarme.
-¡Se dice hola cuando se entra en algún lado eh!
-Mm hola Paula. Veo que traes buen genio-le miro fijamente a los ojos-.
-Pues mira estaba perfectamente con tu hermano hasta que has aparecido.
Tenso la mandíbula y dejo mi "amabilidad" a un lado.
-No es mi hermano ¿lo entiendes?
-¿Entonces quién es?- me mira comiéndose ese maldito helado-.
-De momento nada mío. Próximamente igual mi hermanastro.
-Mmm..interesante...-sonríe y sigue mirando las fotos-.
Veo que viene Harry y le miro mal.
-Suerte follándotela, esta de mal genio.
Me voy a mi habitación dando un portazo.
¿Por qué coño me enfado ahora? No me entiendo ni yo.
Paula
¿¡Qué, follándome?! Miro a Harry y ando hacia atrás.
-Harry yo no...
Se ríe y me abraza.
-Me sorprende que después de lo que te he contado creas a ese gruñón. Solo somos amigos.
Le sonrío.
-Eso espero, cada día que pasa creo que es más gilipollas.
-Estoy de acuerdo contigo. ¿Te quieres quedar a cenar? Eres agradable. Seguro que a Alan le encantará la idea, aunque nunca lo vaya a admitir.
-Será mejor que no...no hay nadie en mi casa por la noche y se me han olvidado las llaves.
-No te vas a quedar sola en casa. Vamos quédate aquí. En el fondo quieres, no soy tonto.
-Ya, pero no tengo ganas de tener que saltar luego, que suene la alarma, tener que tranquilizar a los perros, escalar hasta mi cuarto, etc...-rió- si quieres otro día.
-Pues le digo a Alan que te gusta-dice como un niño pequeño-.
-Pues te va a crecer la nariz como a pinocho, por decir mentiras- sonrío-.
-Como es mentira, ¿no te importara que se lo diga no?
-Vente tú a mi casa si quieres y así no me dejas solita.
-Vale entonc..-le interrumpe mi teléfono y veo que es Ashley-.
-Tengo que cogerlo, lo siento...-cojo el móvil y me aparto un poco- dime Ashley.
-¡Hola,preciosa! ¿Adivina qué? Hoy por la noche fiesta en casa de Eric. Me ha dicho que estás invitadísima y que nos espera allí. ¡¿No es una monada?! ¿A qué hora paso a recogerte?
-No estoy en casa Ash, no puedo ir...
-¿Qué te pasa?
-Estoy con un amigo y se viene a casa a cenar, no puedo decirle ahora que no
Al decir eso Harry me susurra al oído:
-No quiero arruinar tus planes, te prometo que no diré nada a Alan.
-No te preocupes- le sonrío a Harry- por cierto ¿dónde hay un baño?
-Allí-me lo señala y voy hacia el mientras hablo con Ashley-.
-No puedo ir Ashley otra vez será- llego al baño- además, no quiero volver a beber y que pase lo de la otra vez...
Abro la puerta y veo a Alan en la bañera,lo único que tapa su cuerpo desnudo es la espuma y aún así veo su torso debido a su altura. Se da cuenta de que estoy aquí y deja de estar relajado matándome con la mirada pero sin decir nada.
Quiero irme pero no puedo, mis pies están paralizados y algo me dice que me meta con él en la bañera... ¡¿Pero qué mierda estás pensado Paula?!
Creo que ha notado que no quito mi vista de él y coge una toalla para colocársela en la cintura sin que se le vea nada. Se va acercando hacia mí. Ay madre, sigo sin poder moverme.
-¿Se puede saber por qué cojones no quitas tu mirada de mí? Das miedo -por su tono parece bromear pero su rostro es serio-.
-Yo...-no puedo hablar, dios ¿qué me pasa? Ni que fuera la primera vez que veo a un chico medio desnudo...-.
-Paula nadie va a volver a quedarse desnudo como aquella vez, yo te vigilaré...- se escucha a Ashley por el móvil-.
Parece que Alan lo ha oído porque frunce el ceño. Coge mi teléfono y cuelga. Dios mío,está muy cerca de mí.
-¿Necesitas algo?
-Yo no...¡¿por qué has colgado?! ¿Quién te crees que eres para coger mi teléfono y colgar?
-¿Quién te crees que eres para entrar mientras me baño en la casa de mi padre y aún encima mirar descaradamente? -se me acerca aún más.No puedo reaccionar-.
-¡Pues cierra con pestillo, y yo miro lo que me da la gana!
-¿Y te gusta lo que ves,pequeña?-parece que esta situación le parece graciosa, pero a mi no me hace ni una pizca de gracia-.
- Pues no, mira por donde- cruzo los brazos-.
-Entonces vete-levanta una ceja-.
-Es pensaba hacer, no merece la pena perder el tiempo con gilipollas- le guiño un ojo y me voy de allí-.
Oigo que se ríe y que sube a su habitación. Aún sigo acelerada. En realidad me ha gustado lo que he visto, y mucho. Pero no me puede parecer que esta bueno, no, eso sería mi perdición. Vuelvo con Harry al salón y resulta que se ha dormido.
Decido dejarle una nota diciéndole que venga mañana a cenar, que me tengo que ir y también le dejo la dirección de mi casa y mi número de teléfono. Cuando se la he escrito, salgo de la casa y llamo a Ashley.
-¿Si?
-Recógeme, pasamos por mi casa y vamos a la fiesta.
-Esa es mi chica. ¿Dónde estás? -Te mando la ubicación, espera.- cuelgo y se la envío por whatsapp-.

-"Estoy allí en 25 minutos"-me envía y espero fuera de la casa-.
De repente oigo ruidos y gritos en la casa y veo salir a Alan. Es de noche y no se ve bien, pero juraría que está llorando. Se me encoje el corazón ante la idea.
Me acerco con cuidado, porque sé que va a saltar chillándome...
- ¿Alan?
No puede hablar y solloza.
-Me cago en tu puto noviecito y en su puto gemelo. Son los dos unos gilipollas. No saben lo que es una vida jodida. Son unos hijos de puta-dice temblando- ¡adelante! Ríete de mí. Oh, Alan llorando, que flojeras. ¡Me cago en la humanidad ya!-cuando parece que se ha desahogado se lleva las manos a la cara y sigue andando alejándose de mi-.
Se me parte el alma al verlo llorar...
-¡Hey! ¡Alan,espera!-corro hasta él y cuando lo he alcanzado lo paro y lo abrazo- relájate pequeño...
-Deja de ser tan jodidamente buena conmigo Paula-no me devuelve el abrazo pero no se escapa de él- todo lo que me pasa me lo merezco ¿sabes?
-No, Alan, nadie se merece estar mal, aunque seas un capullo, no te lo mereces, mereces ser feliz como todo el mundo.
-Debes ser la única en el mundo que piensa eso. Por eso no quiero que me conozcas. No me mirarías con los mismos ojos pequeña-se da la vuelta y me mira-.
Ha dejado de llorar pero tiene los ojos rojos y puedo ver el dolor y la tristeza en ellos.
-Te seguiría mirando con los mismos ojos Alan, porque sé que dentro de ti hay un niño pequeño asustado, puedo verlo en tus preciosos ojos- le sonrío intentado tranquilizarle y le acaricio la mejilla-.
Me gustaría que por un momento se relajara y dejara atrás esa tensión que tiene en el cuerpo, siempre en alerta.
-No te conviene hacer eso... te tengo que dejar ir Paula. No debes estar con un tipo como yo-frunce el ceño-.
-¿Y si quiero estarlo Alan?¿No vale mi opinión? ¿No te importa lo que yo piense?
-Me odias
Por primera vez en el tiempo que lo conozco Alan baja la mirada y le cae otra lágrima. Se le ve tan frágil y débil. Me imagino lo que debió pasar un pequeño Alan y las consecuencias que pasa el actual. Me dan escalofríos de pensarlo.
-No te odio Alan...pero por favor...déjame conocerte...-le acaricio el brazo-.
Entonces oigo un coche. Es Ashley y me está pitando para que vaya.
-Adiós-me dice Alan-.
-No me voy a ir, vas a hablar conmigo, y me lo vas a contar todo- le mando un mensaje a Ashley diciéndole que ha habido un problema y no puedo ir. Entonces se va el coche-.

-Te estoy advirtiendo y no me haces ni caso. No te acerques a mí. No te pasará nada bueno. Deberías haberte ido con tu amiga-ya ha vuelto el Alan de siempre-.

-¡Deja de hacerte el duro conmigo, Alan! ¿!No ves que no funciona¡? !No me das miedo!
Antes de que me dé cuenta su boca está en la mía y sorprendentemente es un beso muy dulce, sus labios acarician los míos, mientras nuestras lenguas juegan entre si. Realmente me siento en el cielo.
-Por esta jodida razón pequeña. Te pido que te alejes.
-¿Que jodida razón? No me voy a alejar de ti Alan, simplemente porque no puedo y no quiero
Abre los ojos y me mira mal.
-¿Aún te preguntas que razón? ¡Te acabo de besar joder! Debería ser suficiente razón para alejarte. Estás buena y no sabes lo que un chico tres años mayor puede hacerte. Yo que tú tendría miedo.
-¡Es que me he enamorado de ti! -lo miro a los ojos y se me saltan las lágrimas-.

Hola:) como hace años que no subimos tenemos que daros explicaciones: estamos haciendo maratón de verano, así que entre hoy y mañana (si da tiempo hoy) publicaremos tres o cuatro capítulos jeje. Esperemos que os guste y mucho amor a todos^_^ xxClau y Paulaxx

Don't let me go...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora