The Witch Is A Metalhead

4 - An Tagen Wie Diesen

La mañana siguiente, Vania fue a hablar directamente con el rector Žukauskas. Quiere saber sobre Soryana, y exige que no le oculte información. El sujeto sabe que debe hablar con ella, pero necesita hacerlo en el momento correcto. Solo le dice que la situación ha cambiado drásticamente para todos los magos en Europa, por lo que debe estar atenta y cuidarse. Vania no termina de entender, como así tampoco qué tiene que ver Soryana con todo esto. La joven se retira fastidiosa de la sala. En ese momento se materializa en el despacho del rector una mujer. Era la señorita Medaksyan. Estaba invisibilizada, por lo que presenció la discusión. El lituano le expresa su preocupación por ella y la ucraniana, y también por el resto de los magos de la academia. La mujer no entiende por qué al sujeto le preocupa más esas dos que el resto de los estudiantes. Entonces él le muestra las fichas personales de ambas. La mujer observa las identidades de ambas y se sorprende. Sobre todo de la rubia. Kopraska es un apellido muy conocido entre brujas y hechiceros. Le pregunta a Gelynas qué quiere hacer. Él le pide que busque a su colega y las protejan a cualquier costo. Ella le da su palabra y se retira por la puerta.

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En el patio de la academia Soryana estaba sentada pensativa. En ese momento llega Sylvania y se sienta a su lado. La rubia comienza preguntandose a sí misma en voz alta si también es una bruja. Vania no tiene la respuesta técnica de eso. Le pregunta si sabe hacer algo de magia y Sora le responde que no. Entonces la joven de cabello tricolor le expresa con calma que entonces probablemente no lo sea, que no se preocupe. Mientras hablaban del tema una flecha viene desde uno de los flancos y se clava en el césped delante de ambas. Vania se alerta y observa hacia desde donde la debieron lanzar, pero no hay nadie. Soryana ve que parece tener algo atado y saca la flecha. Es un mensaje en un papel manuscrito. You both meet me at the MPR after last period of class. Come only you two, alone. թող կախարդանքը պաշտպանի քեզ. La eslava no se asustó, pero sí se preocupó. Supone que alguien las está amenazando. Vania coincide, sobre todo porque hay palabras escritas en un idioma considerado de magos. Deciden ir porque es dentro de los límites de la academia, y allí dentro hay protecciones mágicas dispersas por todo el complejo. El SUM (salón de usos múltiples) está dentro de la academia. Terminada la cursada de ese día van hasta el salón que estaba con las luces encendidas y una mujer de cabello naranja estaba sentada de espaldas a la puerta en el escritorio. Rissenhorst la increpa verbalmente. La mujer, que tenía un atuendo de la academia, pero de los que usan las profesoras, las saluda cordialmente. La neerlandesa y la ucraniana siempre estuvieron a la defensiva. Desde el comienzo la mujer intenta dejarlas tranquilas, explicando que fue el rector quien le pidió que las ayude en la situación actual. La mujer, de cabello naranja se presenta. Hayarpi Medaksyan. Por ese nombre Vania presupone que es una bruja y de las más poderosas. Brujas hay de todas las nacionalidades, pero las armenias son las mejor formadas y más habilidosas, entrenadas en los monasterios más renombrados del mundo arcano, que están en Armenia. Hayarpi se les acerca, toma una silla y se sienta, pidiéndoles que también lo hagan. Ambas estudiantes acceden cautelosas. La mujer les da un pantallazo de la situación actual. Hace más de 600 años, allá por 1467, el Catholicos de Armenia Antranik II comenzó a desarrollar el estudio sobre la magia en el monasterio de Zvartnots. Desde diferentes iglesias orientales y occidentales comenzaron a condenar esa decisión poco después y para el Concilio Ecuménico de Siena en 1496 se decidió perseguir a todos aquellos monasterios, obispos y sacerdotisas que se adentraron en el estudio de la magia. Para 1534 ya la iglesia católica en Europa condenaba a la hoguera a toda mujer acusada de bruja y todo hombre acusado de hereje. Muchos de los libros de magia, grimorios y objetos relacionados a ello fueron escondidos en monasterios menores, y que luego se fueron recuperando al pasar los años terminando en academias como esta. En aquel Concilio Ecuménico se formó la Orden de San Crisóstomo, un grupo de personas específicamente seleccionadas para perseguir magos, brujas y hechiceros en toda la Europa cristiana. Todo esto cesó a finales del siglo XVIII, pero las brujas y los hechiceros siguieron existiendo hasta el día de hoy. Y aparentemente un grupo de personas, específicamente condenando la herejía, han creado una organización desde ciertos sectores de la iglesia en toda Europa para atacar supuestamente a personas y lugares relacionados a ello. Es decir, brujas como Vania o Hayarpi están siendo blanco de ataques, y también posibles descendientes de brujas o magos como Soryana. Entonces, ambas tendrán que aprender a ser brujas para sobrevivir. En días como estos las cosas se van a complicar y mucho.