𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫'𝐬 ━ 𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐦𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲

04

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La persona misteriosa para los del futuro se retiro la capa, dejando ver a una chica blanca como la nieve, su cabello era de un rubio sucio y estaba algo alborotado, sus ojos eran grandes y azules. La chica tenía aretes extraños mientras que su varita reposaba detrás de su oreja.
-Bueno, hola a todos. Mi nombre es Luna Lovegood.- un hombre que se encontraba en la mesa de Ravenclaw la miro expectante.- Mis padres son Xenophillus y Pandora Lovegood.

Isabella pudo ver como dos chicos muy parecidos a Luna (claramente eran sus padres) se abrazaron cariñosamente. Y la pelirroja no pudo evitar sonreir tiernamente.
Estaba haciendo toda las fuerzas posibles para no mirar hacia las mesas de Slytherin y Gryffindor. No quería ver a sus padres, a sus amigos, ni siquiera quería ver a Regulus y Snape.
Esto no se debía a que no quisiera verlos, todo lo contrario, simplemente estaba demasiado nerviosa y no tenía ni la menor idea de cómo iban a reaccionar.
-Fui Ravenclaw- la mesa recién mencionada aplaudió con gran entusiasmo por su futura integrante.- ¡Oh vaya!...esta lleno de Narggles por aquí.- murmuró distraidamente Luna-bueno, creo que eso es todo.

Fue lo último que dijo antes de ir junto a sus padres mientras daba pequeños brinquitos.
-Neville todo tuyo.- le dijo Harry.

Neville paso al lugar donde Luna estaba anteriormente.
Dejando su capa de lado todos vieron a un muchacho alto, su cabello era castaño y estaba peinado hacia un lado de manera prolija, tenía unos brillantes ojos grises.
Los del pasado miraron inmediatamente a Frank Lonbotton.
-¡Vaya Frank! Ese crío es tuyo- dijo una voz divertida en la mesa de los leones.

La chica Potter no pudo aguantar más e inmediatamente miró a quien habia dicho eso sin poder evitar una exclamación apenas se dio cuenta de quién era el responsable.
Quien era nada más ni nada menos que Sirius Black. La pelirroja vio que al lado de su tío se encontraba Remus Lupin y en su otro lado había un adolescente muy parecido a Harry, allí se encontraba James Potter sonriendo divertido con su brazo al rededor de una pelirroja que era (literalmente) igual a Isabella.
No supo en qué momento había empezado a soltar lágrimas silenciosas, miró disimuladamente a su hermano quien estaba igual que ella. Sus miradas se encontraron y se sonrieron con emoción. Allí delante de ellos estaban sus padres, vivos y felices.
Ahí fue cuando Isabella cayó verdaderamente en cuenta de que si hacía todo al pie de la letra ella y su hermano podían crecer con sus padres y sus tíos. No iba a desperdiciar tal oportunidad.

-Pues si- dijo feliz Neville- mi nombre es Neville Longbottom, mis padres son Frank y Alice.
Los recién mencionados se miraron sonrojados mientras Frank abrazaba de acostado a una chica bajita y de pelos castaños, claramente Alice.