SILENCIO
Tranquilidad
Justo ahora esas son las dos cosas que pido.
Necesito calmar a mi corazón. Ralentizar mis latidos.
Y la ciudad no me ayuda.
Estoy hasta la medula del ruido que producen los carros con sus bocinas. Estoy cansada del olor que producen los gases de las fábricas. Estoy hasta la coronilla del tráfico que se arma cada que me subo a un autobus o de los accidentes que tienen los motorizados por su imprudencia.
Estoy HARTA de los silbidos y siceos que me hacen los viejos verdes en la calle.
Camino por el asfalto caliente y me pregunto ¿por qué incluso donde nadie me conoce me da miedo hasta respirar?
Me siento abrumada ¿te has sentido así?
¿Has sentido que los edificios se te vienen encima?
Trato de distraerme pensando que se sentiría rozar el cielo como lo hacen los rascacielos. Pero no lo logro. Más bien consigo estar más atenta a lo que me rodea.
Cada silbato, cada rueda, cada bocina, cada paso, cada palabra que dicen las personas en la calle me asfixian.
Y ruego a Dios para encontrar la paz en este caos. Pará poder por lo menos, escuchar el revoltijo de frases que son mis pensamientos.
No puedo creer que existan personas que quieren vivir aquí.
A veces me pregunto como será la tranquilidad del campo.
Tus problemas los sientes más grandes si estas en un lugar grande. No te recomiendo hacer tu vida en la ciudad.
Mejor quedate donde eres mejor, no donde piensas que vas a ser grande.
Keizyth Azuaje
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Balbuceos de mi Corazón
PoetryPalabras sin alas, palabras sin libertad; como los sonidos de un bebe, apenas audibles...apenas entendibles. Eso es "Balbuceos de mi corazon".