TERRENO PELIGROSO. [ J.JK + K.TH ] (ADAPTACIÓN)

CAPITULO 24

Sentado en mí oficina disfrutando de un café hago lo único que he hecho durante las últimas 3 semanas; pensar en Tae. Desde que estuvo aquí en mi oficina no he hablado con él y es que me evita o simplemente me ignora.

"No quiero que me vuelvas a dirigir la palabra y gracias por hacerme sentir que valgo menos que una puta... porque hasta ellas te cobrarían por quitarte las ganas"

Mierda. Sus palabras están tan presentes a cada momento, es como si me persiguieran a cualquier lugar que voy. Me duelen y cada que las recuerdo es como si removieran ese cuchillo que tengo clavado en el corazón, es como si la herida se hiciera cada vez más profunda. Estas tres semanas desde que lo vi no han sido más que mi propio infierno.

Una semana después desde que estuvo aquí, decidí ir a buscarlo y hablar con él, quería darle su espacio a que pensara, a que se relajara y creí que esa semana era más que suficiente, pero me equivoqué. Esa tarde fui a su escuela a la hora de la salida, pues no quería arriesgarme a ir a su casa con sus padres ahí y se dieran cuenta de que estamos más que mal. Al verlo salir noté que iba con Jimin, como siempre, así que decidí acercarme.

—Tae—. Dije por detrás de él. Jimin me dedicó una sonrisa y me saludo, por lo que veo él no sabe nada. Noté como Taehyung se ponía tenso y lentamente volteo y vi en su mirada que aun tenía mucho coraje y dolor por como lo había tratado.

—¿Tu que mierda haces aquí? — Dijo entre dientes y a Jimin se le borró la sonrisa de la boca. Frunció el ceño, pues no entendía porque me hablaba de esa manera.

—Necesitamos hablar.

—Yo no tengo nada de qué hablar contigo. Fui muy claro cuando te dije que no quería que me dirigieras más la palabra, así que vete.

—Por favor, Tae, no podemos seguir así... escúchame.

—Que te vayas ¿no entiendes? ¿eres imbécil? Déjame en paz—. Giró dispuesto a irse, pero lo tomé del brazo y lo detuve, algo que lo hizo ponerse más tensa y en un rápido movimiento se deshizo de mi agarre. Bueno por lo menos sé que aun causo efecto en él ¿no? — En tu perra vida vuelvas a ponerme una mano encima.

—Taehyung, basta, tenemos que hablar, no me trates así—. Le dije prácticamente como suplica. Me tomó del brazo y caminamos unos tres pasos alejándonos de Jimin.

—¿Qué no te trate así? —. Dijo indignado—. Tú me has tratado mucho peor, jugaste con lo que siento, me trataste como a una ramera y ahora, yo soy el que trata mal ¿no? — Rio con coraje y amargura—. Eres increíble, eres un maldito descarado... Vete, no te quiero ver más.

—Por favor. Yo jamás quise...

—No me importa lo que pretendas decirme, ya no te creo nada... Vete, vete y si de verdad te importo, aunque sea un poquito, no me vuelvas a dirigir la palabra—. Se alejo de mí y tomo a Jimin del brazo y se alejaron. Su amigo se despidió de mi con su mano, apenado y encogiéndose de hombros mientras me sonreía como diciendo "lo siento".

Regrese a mi auto cabizbajo, pero desde ese día le he enviado mensajes de texto y correos electrónicos, pero nunca, recibo respuesta de su parte. De igual manera he intentado llamarlo a su celular, pero no me contesta y es tanta mi insistencia que termina apagando su teléfono. Me estoy volviendo loco, necesito verlo, hablarle, pedirle que me disculpe una vez más. Pero, él de verdad ya no quiere saber absolutamente nada de mí. Fui un hijo de puta miserable con mi pequeño Tae y aunque sé que me lo merezco, me duele y simplemente no lo soporto.

Mi amigo y compañero Namjoon entró a la oficina para consultarme los últimos detalles de los planos del centro comercial, ese proyecto es lo único que medio me ha mantenido alejado de mis pensamientos y culpas y los clientes están más que contentos con el trabajo y eso me reconforta, aunque sea un poco. Namjoon es un gran amigo, nos contamos de todo, aunque claro jamás le dije nada sobre mi relación con mi sobrina, eso es algo que jamás le diría a nadie. Él ya sabe que algo me atormenta y me tiene mal pero siempre le digo que es la presión del proyecto, aunque ahora que ya está casi terminado, debo encontrarme otra excusa.