Promesa implícita

Y todo, estará bien

Jin Ling puso muy mala cara, no sólo le costaba dormir ahora más que nunca, sino que falló, él nunca fallaba.

-Entonces... Hay daño estructural -Jadeó Jiang Cheng
-Las cargas grandes hubieran provocado un derrumbe y las pequeñas fueron suficientes pero la maldita puerta no se abrió -Gruñó el Omega
-Oye, cuida tu maldita boca -Regañó Jiang Cheng, estaban delante de los Lan que eran socios y clientes
-¿Entonces no podemos entrar? -Preguntó de verdad deprimido Wei Ying. La cámara de la noche fue mucho de su interés hasta que encontraron los documentos convertidos en polvo.
-Nunca dije que no, es sólo que no funcionaron las cargas y detonar más podría provocar un derrumbe -Señaló de malas Jin Ling
-Si se accede desde la sala del bosque entonces le pertenecía a la familia Nie -Señaló Zizhen -O Wen... Le preguntaré a mi mamá si tiene algún documento sobre cámaras subterráneas, tal vez tenga alguna trampa o sistema diferente
-¿Cómo un acertijo? -Cuestionó Wei Ying tomando un pesado tomo sin importarle que el resto de libros cayeran estrepitosamente -En las cámaras de algunas pirámides había algo parecido...
-No encontramos nada como llaves o códices, sólo esos raros papeles pegados en la entrada -Jin Ling bostezó y mostró las fotografías tomadas con su celular, Jingyi ya estaba casi encima de él mirando, cómplice dirigió un asentamiento a su padre, eran talismanes de sellado, nada abriría eso si no se retiraban primero, aún existía algo de poder espiritual en el sello.
-Creo que es algo propio de la familia Lan, tal vez... ¿Podamos revisar? -Pidió Xichen
-Uh... Si no se rompen una uña o una pierna entonces no habría problema -Señaló Jin Ling, había estado muy de malas desde que entró a la cámara contigua
-Tal vez encontremos algo del niño -Intervino Zizhen
-¿Niño? -Preguntó Wei Ying
-En la cámara de la primavera hay una habitación infantil, había... Bueno, parece que hubo un bebé, no encontré restos ahí sin embargo
-Un sobreviviente -Sonrió Wei Wuxian por algún motivo aliviado
-No me lo parece... -Exhaló Zizhen -Sugerí que tal vez no tuvo habitante desde el inicio, pudo haber sido sólo un preparativo, entonces A-Ling me dijo amante de los cadáveres idiota y dudó de toda mi formación y carrera -Acusó sonriendo
-Oh... -Susurró Wei Ying - ¿No has dormido?
-No es tu asunto -Rebatió el castaño
-No ha dormido -Confirmó Zizhen

De mal humor Jin Ling tomó sus cosas y se salió dando pisotones y refunfuñando

-Le obsesiona demasiado cuando hay... Niños -Exhaló Zizhen
-Es por lo que había debajo de LanLing Jin... Supongo que todavía le molesta -Explicó Wei Ying
-Ah, la historia de su pariente loco que se robó niños -Suspiró Jiang Cheng
-¿Un pariente loco que se robó niños? -Cuestionó Jingyi
-Algo así... Meng Yao fue por un tiempo líder de la familia pero, tuvo que dejarlo, aparentemente tuvo un hijo que falleció al poco tiempo y se volvió loco, sin embargo... No hacía daño, hasta que empezó a llevarse a todos esos niños y los encerró, por eso Jin Ling convirtió torre Koi en un museo...

Xichen soltó el aire mientras cerraba los ojos, pensó que eran rumores, simples leyendas urbanas, pero aparentemente fue real, Meng Yao ya había perdido la razón para ese punto era su castigo por la traición, no obstante... Saber que terminó aún más bajo que eso de alguna forma le estrujó, después de todo fueron tan amigos que se llamaron hermanos jurados.

Estaba claro que el karma había llegado para todos aquellos que tuvieron que rendir cuentas y su viejo amigo no fue la excepción.

Por lo que les comentaron finalmente dejaron ir a los infantes después de un tiempo, la familia había decidido no alzar la voz al respecto, fue el mismo joven que acababa de salir el que aceptó el crimen cometido llevándose el odio de buena parte de los Jin.

Sizhui no se movía de su lugar en en cambio, aún parecía perdido en sus pensamientos paralizado y pálido, también era una habitación que le provocaría pesadillas a cualquiera si les hubiera sucedido lo mismo que a él.