Restauración

Capítulo 2: La segunda primera esposa.

POV Katara.

-Vaya...me toma por sorpresa esto-

-Lo sé-

-En el pasado haría una broma acerca de esto, ya sabes, imagina que te digan que debes tener más mujeres, el sueño de cualquier mujeriego-

-Sokka- Sokka reacciono, se había desviado un poco del tema.

-Lo siento, ¿Qué ha dicho Aang de todo esto?-

-No hemos charlado más después de que me contara sobre esto-Comente al respecto, sin embargo Sokka suspiro.

-Bueno, supongo que es algo que debes decidir tú, básicamente porque eres su esposa, si das luz verde a esto él tiene que buscar a mujeres, créeme es la tarea menos difícil hasta ahora- Menciono Sokka algo gracioso al respecto de buscar mujeres.

-No, no dejare que salga con mujeres cualquiera, si serán esposas serán mujeres de bien, tener el hijo del Avatar es una responsabilidad y más si eso implica la crianza al estilo de los nómadas aire- Si Aang iba a tener mujeres para engendrar más hijos estas debían adaptarse al entorno de vida de un nómada aire, mismo que es complicado.

-Dicho así, las mujeres reducen una cantidad bastante extrema-

-No dejaría que cualquier mujer este con Aang, así que...tendré que entrevistarlas- Dije con cierto orgullo, creo que tendré que ver qué tipo de mujer estará con mi esposo.

-¿Qué harás pondrás letreros de "Esposa para coger con el Avatar"?-

-Sin el coger- Mencione en ese detalle.

-Oh dios-

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POV Aang.

Desperté en la mañana, fui por algo de té caliente, camine por el jardín de la casa y mire el bello horizonte frente a mí, desde la isla en la que vivía podía ver la ciudad que habíamos creado, un lugar lleno de paz y hasta cierto punto algo de armonía, todo hasta que al mirar a otro lado veo a Katara montando unas mesas y sillas.

Al acércame tome uno de los carteles que tenía en la mesa.

-¿Entrevistas?-

-Si, vere que tanto pueden ofrecer las mujeres que deseen ser parte de tu grupo de esposas- Escupí mi té.

-Espera...¿Qué?-

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Sin darme cuenta la isla empezó a tener como visitantes a mujeres algunas jóvenes, otras de edad bastante...mejor no decirlo.

-Por supuesto que sería una buena candidata para ser una madre, soy joven y seguramente tendré muchos hijos maestros aire-

-Siempre he deseado estar con el Avatar, ayudo al mundo y creo que una forma de agradecer es poder ser parte de las mujeres que llevaran su semilla para restaurar una cultura-

-Nunca me he casado y creo que es cosa del destino, por estoy aquí-

-¿Hijos? Los que quiera el Avatar, no pienso negarle nada después de todo lo que hizo por el mundo-

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-Bueno, hoy fue un día lleno de muchas buenas razones y algunas algo exageradas- Comente a Aang.

-Por todos los lémures, ¿Qué fue todo eso?- Pregunto un avergonzado y sorprendido Aang.

-Ni lo menciones yo tuve que ver y escuchar a la mayoría, buenas personas pero...repetían ciertamente lo mismo- Dije algo cansada, si bien era lindo que pensaran en la cultura había ciertas intenciones detrás de cada una de esas palabras bellas.

-¿Eso es malo?-

-Aang, una mujer puede ver cuando hay un interés oculto en algo, si bien todas quieren darte las gracias...algunas piensan que la vida será fácil, de momento tendré que seguir con esto-

-Sigue causándome incomodidad- Dijo Aang suspirando.

-¿Crees que a mí no?-

-Entiendo- Ambos nos miramos y nos relajamos, no había que ponerse tensos en este momento.

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Toph había llegado en el barco de oficiales, bajo y podíamos notar que venía con cierto enojo.

-Bien, díganme una cosa, ¿Lo que dice este letrero es verdad?- Ambos nos miramos, no sabíamos si tomar como broma o como sarcasmo lo que había dicho.

-Dejare de lado la broma porque bueno...hay una explicación-

-¿Qué? ¿En verdad buscas esposas?- Pregunto sorprendida Toph-

-No es cosa mía, hable con Roku y Kyoshi y ambos me dijeron que necesito tener más hijos-

-Katara...tapate las orejas- Dijo Toph, negué rápidamente.