Yo no quería soltarte ni mucho menos dejarte ir, pero me lastimaba el sujetarse y el poco interés que tenías de quedarte.
Sabía que ya dolía, pero me aferraba al instante de amor que me ofrecías cuando aflojabas la cuerda, cuando con besos y caricias "curabas" las heridas en mis manos.
Me sorprende lo mucho que aún sigues doliendo después de tanto tiempo; es como si cada vez que la imagen de tus ojos oscuros atraviesan mi mente, la herida retrocediera en su proceso de cicatrización.
Así que llegué a la dolorosa conclusión de que nunca pero nunca dejarás de doler, quizá con el tiempo ya no será de una forma tan intensa, ya no será a cada momento que escuche una melodía que me recuerde a ti o un lugar en el que solíamos compartir; hasta que ya no duelas y sólo seas un fugaz recuerdo de aquello que tanto amé.
No te lo mereces pero en mi vida serás el primer amor que quise genuinamente y la cual me dañó con la misma intensidad.
Fuiste, eres y siempre serás mi peor y más amado error...
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Suspiros de un corazón
PoetrySentimientos expresados a través del arte de la escritura. Una romántica sin cura, una afligida sin voluntad, una villana sin escrúpulos, un individuo aprendiendo a convivir con aquello que le dieron sin su consentimiento; la vida. Tal vez todo es...